Mi luz de sol ‖ Bɴʜᴀ x ᴏᴄ - Pausada -

c a t o r c e|🌴

Estuve un rato en la enfermería mientras Recovery Girl estaba sentada en un escritorio junto a mí camilla, escribía algo en unos papeles. Estaba acostada en la camilla, me sentía realmente mareada y me veía más pálida de los normal.

Pude escuchar como alguien llamó a la puerta y entraba, era un hombre alto, totalmente degaldo, tenía los ojos undidos y su cabello era rubio. Se vio algo nervioso al verme, pero Recovery Girl lo regaño por entrar sin tocar la puerta y se lo llevó fuera de la sala.

Tardé un poco en procesar todo, una vez volvío a pasar todo por mí mente no le tomé importancia, cosas de adultos, todavia no quería meterme en eso.

Todo fue silencioso, solamente quería que me hicieran la transfusión de sangre y dejar de sentirme mal. Después de que Recovery Girl llamó al banco de sangre casi me caigo del cansancio, algo tarde creo yo, incluso ella se sorprendió de que no me hubiera desmayado antes.

- ¿A-All Might...?

Mis ojos se abrieron como platos al oír una débil voz viniendo de adentro de la sala, voltee a ver la cortina al lado de mi canilla.

Cuándo débilmente la tomé la abrí completamente, del otro lado de la cortina había otra camilla que estaba siendo ocupada por ni más ni menos que Midoriya, quién gritó al verme.

- ¿Midoriya? - Dije confundida al verlo, creí al menos nos ponían en salas diferentes, tal vez no se imaginaron que hubiera más de una persona gravemente herida -

- ¡Hoshitoyo-san, t-tu traje! - El chico desvió la mirada, yo bajé la mía, no se por que se puso así, solo tenía la chaqueta rasgada pero tenía una camiseta casi intacta debajo -

- Si... Puedo decir que pasaron... Cosas. - Dije con una pequeña sonrisa y pasando mí mano por mí nuca -

Me acosté de lado para poder observarlo mejor, tenía unos raspones y un brazo enyesado. Nos quedamos hablando un rato, aveces había silencios largos e incomodos, se arreglaban con alguna pregunta sobre las batallas, pero siempre volvían esos silencios.

- Entonces... Midoriya-Kun.. ¿Algo nuevo que contar? - Pregunté un poco incomoda, tuve un abofeteo mental en ese momento por lo estúpida que fue mi pregunta -

- Pues, no mucho desde que estoy aquí. - Soltó una pequeña risa extraña, volteo hacía otro lado un segundo, pero luego me miró con una pequeña sonrisa segura - Por cierto, dime Deku, si quieres.

Lo miré sorprendida, pues, ese era el apodo que usaba Bakugou, supuse que se lo decía en forma de burla, aún así le devolví la sonrisa.

- Claro, Deku-kun. Creí que no te gustaba ese nombre, por.. Ya sabes... Bakugou. - Mi sonrisa cambió a una un poco molesta, aveces el rubio podía pasarse de malvado y tal vez abusivo -

- No te preocupes, le di un nuevo significado. - Extrañamente desvío la mirada, como si estuviera recordando algo -

Unos minutos después de éso, volvió Recovery Girl diciendo que ya estaba lista para la transfusión, así que me "despedí" de Izuku, pues, la anciana cerró la cortina que nos dividía. Para empezar con la transfusión, hizo unas cosas extrañas con una máquina, tenia un pequeño tubo con una aguja, con ella pinchó en una de mis venas para que la sangre llegará a mí cuerpo.

Dijo que tardaría un par de horas, parece el Festival de extenderá más de lo que se esperaba.

Mientras más sangre llegaba a mí cuerpo, iba retomando fuerza; ya no me sentía tan cansada pero aún así me quede sobre la camilla.

Luego de terminar la transfusión, Recovery Girl apagó la maquina sacando la aguja que dirigía el líquido rojo a mí y en su lugar colocó un trozo de algodón sujetado con cinta para que no saliera sangre.