Capitulo 25

487 49 1
                                    

A pesar de que la mayoría del día anterior había sido nefasto para ella, la noche y la madrugada habían sido de lo más agradable, durante las horas que pudo descansar no tuvo ninguna pesadilla, estaba tan agotada que no hubo necesidad de batallar para cumplir con las horas requeridas de sueño, tanto que ni siquiera escuchó el momento en que su alarma se había disparado con toda la intención de despertarla para dar comienzo a su atareado día.

Tampoco había escuchado las incesantes llamadas de su hermana, sea lo que sea que Kara había hecho con su presencia bastó para darle la tranquilidad y seguridad que tanto había requerido.

Sam preocupada por la ausencia de noticias de su hermana menor, fue directamente a la oficina de Lena, al principio tocó, pero no recibió respuesta alguna, quiso entrar pensando que tal vez ella había dejado sin seguro su puerta y si, pero la sorpresa fue que no hubo tanto esfuerzo para que esta se abriese, al entrar pudo notar el caos que había en el escritorio y la bebida derramada en el suelo junto con pequeños cristales alrededor.

El pánico se hizo presente en su rostro y mas al notar qué archivos estaban regados sin alguna clase de filtro que los proteja de personas ajenas a ello.

Los rayos del sol empezaron a traspasar por la ventana de la habitación de la doctora Luthor removiéndola de cualquier paz que pudiese encontrar entre sueños, poco a poco fue despertando, para su desgracia o para su fortuna, se encontraba abrazando una almohada en lugar de a Kara, al parecer la rubia se había retirado de su habitación antes de que se despertara, había sido lo mejor, solo esperaba que nadie le haya visto en el proceso por regresar a su propia habitación.

Estaba tan cómoda entre sabanas que solo apretó más su agarre a la acolchonada y suave almohada dispuesta a dormir unos cinco minutos más.

–¡¿Sabes lo mucho que me preocupe por ti, Kieran?! –gritó sin piedad Sam haciendo que Lena diera un brinco en la cama.

–¿Cuál es tu maldito problema con tocar antes de entrar a cualquier habitación en la que esté? –dijo Lena una vez que se recuperó del susto.

–¡Es la una de la puta tarde! ¿Crees que no toqué? Te llamé decenas de veces, fui al laboratorio y no estabas, fui a tu oficina y tampoco estabas ahí. –empezó a explicar, quería calmarse, pero realmente se encontraba fúrica, Lena jamás se había ausentado de esa forma y después de ver el desastre que era su oficina en esos momentos solo avivo el fuego en su interior. –Estoy a punto de ponerte un localizador en el maldito c...

–¡Sam, por favor basta!

–¿Basta? Lena encontré esto tirado en tu oficina, la cual tiene la chapa rota, por cierto, vidrios rotos y alcohol tirado en el suelo. –contestó Sam. Los pads que anteriormente se encontraban en su escritorio ahora yacían en su cama, cortesía de su hermana. –En verdad me preocupe por ti, idiota.

Había salido no tan deprisa, pero si ausente de cualquier cosa el día anterior, lo único que quería era salir de ahí con Kara a su lado. Reconocía que eso había sido demasiado irresponsable de su parte, no solo expuso a la cadete a un posible castigo por burlar la seguridad y el toque de queda impuesto por el director, sino también había sido irresponsable al dejar información tan delicada e importante al alcance de quien sea.

Viendo el semblante bastante intimidante y serio de Sam, recogió los archivos y se acomodó en la cama para obtener una mejor postura al recargar su espalda en el respaldo.

–Lo siento, debí estar demasiado cansada como para dormir profundamente. –dijo cabizbaja.

–Si, y creo saber el porqué de eso. –contestó de manera acusatoria al mismo tiempo que dirigía la mirada a la silla frente al escritorio de ella, aparentemente alguien había olvidado parte de su uniforme.

A través de las estrellas [Supercorp] AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora