diez.

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Para Park Jimin, no le era fácil entablar una amistad o siquiera una plática con alguien, era todo lo contrario; desde pequeño, sus padres le enseñaron que no debe de hablar con cualquiera, que solamente debe tener amigos y amigas omegas o betas porque de ellos no se podría enamorar de él, ya que solo hay una persona especial a la cual debe amar, proteger y cuidar, al igual que todo eso debe ser devuelto, el cual era, es y será siempre un alfa.

El día que se presentó como omega, su madre le había felicitado, ayudado y explicado todo lo que debería saber. En cambio su padre, al principio se comportó distante ya que él no quería que fuese ni alfa ni omega, para no sufrir con ninguno. Pero luego, al pasar los meses, empezó a comportarse como lo hacía antes de la presentación.

En esos momentos, su padre había tenido una conversación con su madre acerca de sus posibles parejas; las cuales deberían ser alfas o betas, pero lo más preferibles eran alfas. Le habían presentado a casi todos los hijos de sus amigos, pero todos le demostraban lo estúpidos que podían ser.

Lo que empezó a generar que su omega se sienta insatisfecho con los alfas, provocando el rechazo absoluto con todos. Eso causó el que varios omegas le dejaran de hablar y que empezaran a murmurar cosas falsas de él, diciendo que solo los rechazaba porque nada más los buscaba para encuentros sexuales y no más.

Todos esos comentarios, hacían que los alfas quisiesen sobrepasarse con él en demasiadas oportunidades, pero siempre era salvado por algún profesor o por un misterioso acto. En las salidas del colegio, siempre era golpeado por un grupito de omegas y alfas chicas, las cuales eran pareja de alguna perteneciente al grupo; también era molestado fuera del colegio, cuando se cruzaba de casualidad a alguien.

Por ejemplo esta esa vez en que Seulgi, una omega un poco ruda, lo había citado en un parque para hacer las pases y empezar una amistad, él creyéndole fue pero lo que no se esperó fue que en el lugar en que quedaron, se encontraban tres alfas, y lo peor EN CELO, casi lo agarran y hubieran hecho de él un pedazo de carne pero sino fuera porque su omega tomo el control y huyó lo más rápido que sus patitas podían.

En la huida, se topó con el que, actualmente, hacía que su corazón bombease de una manera peculiar a como lo tendría que hacer normalmente. Aquella persona que le sacaba sonrisas tímidas pero coquetas al mismo tiempo, esa persona que hacía que su omega se revuelque tratando de llamar la atención de ella.

Sus suspiros se hacían cada vez más frecuentes a medida que, en sus pensamientos, aparecía aquel joven con sonrisa gummy, o cómo él le decía, sonrisa de gomita. Pero luego toda sonrisa boba se volvía desaparecida por el hecho de que su querido y adorable hyung, era un beta. No es que le molestase del todo, pero se era muy sabido que entre alfa-beta o beta-omega, la complicado de esas relaciones era el no poder concebir, pues, las betas no aceptaban el nudo de un alfa y eso provocaba baja posibilidad de quedar embarazada o simplemente porque no eran compatibles. Lo mismo ocurría entre beta y omega, los omegas rechazaban los genes de los betas y no podían quedar en estado, también porque al no tener el nudo, la posibilidades eran pocas.

Y él, deseaba tener al menos un hijo o hija, de parte de ambos y no porque tuvo que conseguir el esperma de un alfa cualquiera, para Jimin era muy desagradable aquello.

Otro problema, eran sus padres. Sabía que lo iban a aceptar pero siempre va a haber cierta incomodidad y tensión de parte de sus progenitores.

Por lo que, con pesar, decide guardar esos sentimientos que empezaba a sentir por su hyung. Sabe que le mencionó a su amigo que iba a intentar algo, pero al pensarlo, toda posibilidad cayó.

¡Jimin-ah, di meow!〔 Yoonmin 〕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora