¡Jimin-ah, di meow!〔 Yoonmin 〕

seis.

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No lo podía creer, al llegar a casa, se encontró con Chanyeol y empezó a preguntarle un sin fin de preguntas para saciar sus dudas.

–Dime, ¿cómo es posible que aquel chico haya podido convertirse en gato en un parpadear? ¿Es acaso una broma? Y si lo es, es una de muy mal gusto.

–Oye, calma, como haz notado nosotros tenemos orejas y colas, eso se debe a nuestro lado animal ya sea omega o alfa. Mira, a los que puedes verles eso, es porque todavía no están en pareja. Es normal que puedas transformarte, tu forma animal también debe salir y convivir como lo haces con tu forma humana. –le explicaba tranquilamente a un muy alterado Yoongi. – ¿Quieres que te muestre?

Negó mientras se sentaba en la cama del mayor y se quedaba mirando el techo.

–Esto va a ser más difícil de lo que pensé... No se si prefiero esto o deprimirme por Hoseok. –murmuro bajo pero que su acompañante logró escuchar.

–¿Quién es? ¿Es algún amor secreto?

Se debatía si contarle o callarlo, era doloroso para él. Pero para tener más confianza, decide contarle.

–Era mi no-novio... –murmuro un poco nervioso.

–Oh. –fue lo único que dijo Chanyeol.– Pero, ¿que pasó con él?

–Habíamos arreglado un día para juntarnos y comer en la casa que compartíamos, aunque era de él. Ese día, al llegar luego del trabajo, no había nadie en casa, o eso creí... Hasta que escuché ruidos en la habitación, fui para fijarme que era y me lo encontré a él junto con su compañera en una situación comprometedora. Me estaba engañando... –respondió un poco melancólico.

–Eso debe de ser horrible, lo siento.

–No importa, no fue tu culpa...

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Luego de la intensa charla en el cuarto del mayor, Yoongi se fue a su cuarto para descansar ya que al día siguiente tenía que ir temprano a trabajar.

Pero lo que no se esperaba, era encontrarse a un gato gris con tonos blancos en medio de su cama, el felino se encontraba tan cómodamente pasándose su lengua por todo su cuerpo.

Tratando de tener la atención del gato, se sienta al lado de él. Estaba por posar una de sus manos por el pelaje del gato pero algo lo detuvo. Un gruñido.

El animal se dirigió a el baño que se encontraba en la habitación y a los segundos la puerta fue cerrada, con confusión se levanta e intenta abrir la puerta pero no lo logra.

–No, no lo hagas... –se escuchó una voz del otro lado, la reconoció, era de aquel chico que conoció -de muy mala manera- y que era amigo de el chico gato, pero viendo lo que acababa de ocurrir no puede decir nada.

–¿Qué haces aquí? Sabes que esta mal que estés aquí sin que nadie te haya dejado pasar, ¿no? –preguntó, estaba cansado.– Quieres salir, por favor.

–No puedo... Necesito ropa, ¿puedes prestarme algo?

Con eso dicho, fue en busca de la ropa. Al entregarla, espera unos minutos y ve como Jungkook sale del baño junto con su olor que lo hace taparse la nariz.

–Ahora sí, dime que haces aquí. –dijo serio.

–Es-esta bien...

El omega se sentó en la cama de Yoongi y empezó a explicar su repentina llegada, le había dicho que olvide todo lo que pasó entre su amigo y él. También que querían ser amigo de él.

Luego de ello, el chico se fue y Yoongi, estuvo toda la noche despierto. No sabía que hacer y tampoco sabía porque le había dicho a Chanyeol lo que pasó con Jung.

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