Luego de haber caminado, por los pasillos mi mirada parecía perdida hasta que Jonathan, tomó mi hombro.
--Llegamos-- lo observe y note su mirada curiosa sobre mi.-- ¿sigues con eso?--renegó.
--Tu no comprendes ¿verdad?-- baje la mirada y sin volver a observarlo reanude mi camino.
-- ¡Oye,cuida..!--y antes de que terminará la oración, me estrelle contra la puerta y caí al suelo, escuche las carcajadas de Jonathan a mis espaldas.
-- ¡Ayudame!--le dije enojada y con el rostro rojo de la vergüenza.
-- Jajajaj vamos admite lo fue divertido-- estaba cororado de tanta risa que pareciera que ya no lo soportaba.
--Olvidado-- refunfuñe,me levante y me sacudi.
--Bi..bien...-- recuperando el aliento, se acercó al lugar donde me estrelle era una gran puerta decorada con plata, derrepente aquellas majestuosas puertas se abrieron y me observo.-- Bienes...o te quedaras ahí-- reanudo su paso, y yo lo seguí al entrar vi como grandes mesas se extendían en una salón gigantesco con una admirable elegancia, el tapiz era igual a los anteriores, calendabros con velas iluminaban todo el lugar,el aroma a pino y Té me llamo la atención,Jonathan se encaminó a una de las mesas enmanteladas de color negro con encaje de tono grisáceo, llegamos y se sentó en una bella silla tallada en madera y forrada con piel en el respaldo, indesisa tome asiento y me relaje.
--¡Jonathan!--una voz agradable aprecio, era una mujer con un hermosa figura ya estaba grande su cabello oscuro le llegaba hasta la cintura, era sumamente preciosa sus ojos azules brillaban con interés a saber ¿quien era yo?.
--Hola, Rosell-- le sonrió.
-- Hasta que vienes ¿cuanto tiempo ha pasado desde que te vi por última vez?-- Jonathan, se quedó pensando.
--Como unos 3 meses tal vez-- hizo un gesto con los hombros.-- Extrañaba tu comida-- sonrió.
-- Se me hacia raro que no lo comentaras preparé comida-- con un chasquido varias sirvientas aparecieron para poner deliciosos platillos sobre la mesa.
-- Por cierto creó que ya sabes sobre lo de la...-- rápidamente me señalo y ella sonrió.
--Si todos lo saben, deberías comer ammm...-- me miro curiosa.rápida reaccioné.
--Sandra, soy Sandra--- ¿recorde mi nombre, sandra?. Alegre por recordar como me llamaba no pude evitar sonreír.
-- Valla, bien entonces Sandra provecho, Jonathan no te acabes todo-- con voz de advertencia se dirigió a Jonathan el cual de mala gana asintió.Ella se retiró para así empezar a comer. Cuando observe a Jonathan el tenía grandes bocados en la boca parecía como si nunca hubiera provado comida en años se atragantaba con la comida.
--Tranquilo la comida no se escapara-- reí, el me miro después de masticar bien todo dijo.
-- Tengo hambre siempre eso es común en mi-- sonrió y continuó yo comencé a tomar la comida del plato y al igual que Jonatha empecé a comer, tenia hambre no sabia cuanto tiempo pase dormida,después de un tiempo terminamos y el se recargo en su silla satisfecho.
-- Genial!!!..-- suspiró, cerro los ojos derrepente a mi lado Rosell miraba a Jonathan disgustada.
--¡Jonathan, te dije que no comieras tanto,eres un tonto!!...--ella tomo los platos, sucios y no le dirijio la palabra.
--Ya se le pasara-- bufo con una media sonrisa en el rostro, derrepente se escucharon murmullos afuera del salón.
--Oye por que tanto ruido--me miro extrañado.
-- Ni la menor idea, pero debe ser importa...-- derrepente una voz femenina lo interrumpió, era la de esa chica Christina.
--Jonathan,acaba de llegar el-- y sobre saltado se levanto de golpe y con los o los como platos.
--¡Encerio...!-- dijo alegre-- Rayos, quiero verlo-- sonrió.
--Yo igual-- se cruzo de brazos.
¿de que tanto alegan? Me limite a ver qué ambos lucían contentos.
--¿Terminaste?--dijo Jonathan, yo asenti, rápidamente me tomo de la mano y me llevo a rastras a la salida.
--¡No la trates así Jonathan!--dijo disgustada ella.
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The Demon Lord (Exiliados).
Fantasía¿Que harías si estuvieras apuntó de morir? si te dieran una oportunidad de prolongar tu vida un poco mas, ¿venderías tu alma?, Sandra una chica de 16 años se encuentra en un castillo en el olvido, sin recordar lo que paso antes de llegar ahí, se enr...