"A" » Jeon JungKook

13. Vuelta a Casa

Capítulo 13

Nos habíamos alejado del estante que estaba cerca de la entrada para ir a la esquina más apartada de la tienda. Jungkook me miraba con un signo de interrogación en su rostro, moviendo sus ojos de mí hacia Bambam, preguntándome que hacía él allí, claro que no le respondí.

–Bien, chicos–Dije, llamando la atención de los dos. –, es hora de que me vaya. –Sonrío, aunque no me siento feliz. –Fue un gusto conocerlos, y espero que podamos volver a vernos luego de esto. –Les digo, aunque ambos tienen la mirada gacha.

–Lo siento.–Dicen ambos a coro.

–De verdad, fue mi culpa, lamento haberte metido en todo este problema. Yo sé que ningún Idol puede ser visto con alguna chica, por que empiezan los mensajes de odio hacia ella. Y de verdad lamento que la chica seas tú. No quiero que te odien por mi culpa. –Se disculpa Bambam aún con la cabeza hacia abajo.

–No, la culpa fue mía. Si yo no la hubiera besado, nada de esto hubiese ocurrido. Digo, hubiera tenido problemas pero no por tu culpa, Alen. Lamento haberte hecho pasar este muy mal rato, de verdad lo lamento. –Una pequeña sonrisa se forma en mis labios. Por alguna razón, encontraba esta situación divertida.

–Ya, no se pongan así.–Les doy un sueva golpe a ambos en sus hombros con mis manos y ellos me miran.–Ahora no es momento de: 'es mi culpa', 'no es la mia'. –Pongo mi voz un poco más gruesa tratando de fingir las suyas y ellos se ríen. –Es una despedida, y no es momento de eso, así que sonrían. –Cada mano la acerco a sus labios y con mis dedos subo las comisuras de sus labios hacia arriba, haciendo sonriesen. Luego alejo mis manos y continúo: –Bien, les compre esto, recuerdo de la chica con nombre de chico. –A Bambam le entregué el peluche de mono, era pequeño y tenía la cabeza algo grande con un cuerpo pequeño, por alguna razón me recordaba a él. Y a Jungkook le entregue el peluche de conejo, similar al de Bambam, solo que con forma de conejo. Ellos sonrieron al verlos y yo también lo hice.

–Oh, yo tengo esto. –Bambam saca una cajita pequeña de color durazno con una cinta blanca de su bolsillo trasero y Jungkook saca una caja de color blanca con una flor pintada de color negro del interior de su chaqueta.

–Ten. –Dicen al mismo tiempo y yo me río. Estos dos se miran mal mientras extienden las cajitas hacia mí.

–Gracias pero no era necesario. –Me río mientras tomo las cajas de ambos al mismo tiempo. Ahora ¿cuál abriré primero?

Abrí la cajita de Jungkook primero y sonreí al ver su pequeño regalo.

–Muchas gracias, está muy lindo–Le agradezco a Jungkook mientras saco el collar con el pequeño dije de pingüino, mi animal favorito, de la caja. No era fan de los collares, pero usaría este única y exclusivamente por que él me lo regaló.

–Feliz cumpleaños atrasado.–Dice Jungkook mientras agita sus manos y me observa con una sonrisa.

–Gracias, galleta. –Abrazo a Jungkook mientras me río. Trato de colocármelo pero él me lo quita y finalmente él me lo coloca. –Y no es atrasado, en Corea es hoy, pero en mi país es mañana.–Explico riendo. Ahora abro el de Bambam.

Dentro de la cajita, habían tres pulseras de diferentes colores y de hilo. La primera era de color blanca con tres piedras de color celeste. La segunda era de color marrón con un dije de un elefante color dorado. Y por último, la tercera era de un color rojo cuajado con un dije de un chocolate. Al ver esta última, reí.

–Muchas gracias, pimuk. –Lo abrazo con la cajita en mis manos y él corresponde mi abrazo con una sonrisa.

–Noté que te gustaban mucho las pulseras, así que decidí agregar más a tu colección. Para que me recuerdes. –Dice con las manos en sus bolsillos y sonriendo.

–Ayúdame a colocármelas. –Le tendí mi mano izquierda, libre de pulseras, para que las colocara. Por alguna razón, no acostumbraba a usarlas en ese brazo, solo en la derecha, pero para hacerlo más "especial", decidí usar la izquierda. – Gracias, estas muy lindas.–Digo mientras las observo. Levanto la mirada para sonreírles y noto como Jungkook fulmina con la mirada a Bambam. Si las miradas matasen, Pimuk hubiera muerto hace mucho tiempo.

–Creo que es el adiós, ¿no?–Jungkook deja de observar a Bambam y me mira con una media sonrisa.

–Sip, –digo marcando la p. –pero no te preocupes, seguiremos en contacto como siempre. No te vas a librar fácilmente de mi–le digo con una sonrisa a Jungkook y luego volteo a ver a Bambam–y no creas que tu también. –Río. Abrazo a los dos al mismo tiempo y ellos me corresponden. –Fue un placer verte sin que sea a través de una pantalla, Jungkook. –Lo abrazo y el me aprieta a él, ambos sin querer alejarnos. –Nos volveremos a ver, tenlo por seguro. –Murmuro en su oído y lo siento asentir. Me separo de él y le sonrío, cosa que él también hace. Volteo hacia Bambam y le sonrío.

»Mentiría si dijera que no fue un placer conocerte porque si lo fue. –Abrazo a Bambam y él corresponde mi abrazo. –Creo que haberle pedido la dirección de la empresa a una persona que parecía traficante de drogas, fue la mejor opción.–Su cuerpo vibra y escucho su risa.–Te extrañare Bambam.–Me separo lentamente de él y sonreímos, aunque la de él es solo una media sonrisa. –Bien, nos veremos en otra oportunidad, y ocúltense bien antes de que salgan otros rumores.–Les pongo los gorros de sus chaquetas en sus cabezas y los tiro hacia abajo, haciendo que no se vean sus rostros. Ellos se ríen y quitan mis manos.– Annyeong. –Me despido de ellos con una reverencia y salgo de la tienda para ver a mi mamá en la tienda de al frente, metida en el teléfono.

–¿Y que compraste? –Pregunta mi madre cuando estoy frente a ella. Comenzamos a caminar hacia la salida, hablando sin decir mucho.

–Nada. –Respondo. Caminamos hasta el terminal de buses y luego de un viaje de dos horas, llegamos a Incheon, y de allí vamos al aeropuerto.

Luego de una hora, nuestro vuelo es anunciado. Con mi madre caminamos hasta el avión y nos subimos a él, para que luego de treinta minutos este despegue. Durante el viaje, veo las pulseras y juego con el dije que descansa en mi cuello. Y poco a poco, mis ojos se van cerrando, hasta que veo todo negro.

——*——-

Despierto exaltada. Miro a mi al rededor y estoy en mi habitación. ¿Que co...?

Me levanto rápidamente de la cama y corro hacia el espejo de cuerpo entero que hay en mi habitación. Estoy con mi pijama y toda desarreglada. ¿Que ocurre?  Recién estaba en el vuelo y ...Ay no...

Corro hacia la computadora y la enciendo. Espero impacientemente a que cargue y lo primero que hago es abrir Skype, busco el contacto de Jungkook y no esta.

Dime que no fue un sueño. No, no ¡No! Busco mi teléfono y reviso la galería de imágenes, en donde supuestamente debería encontrar las fotos que me saque con Bambam y Jungkook durante mi estadía allá en Corea.

Nada.

Dios, todo fue un sueño...

¡Un maldito sueño!

MENTIRA! JAJAJA! Es broma, no termina aquí xD Lo siento .-. (este capitulo) Termina en donde Alen se duerme en el vuelo, fin.

xxB_D