Amy's P.O.V.
Hablar con Zayn era mucho más fácil de lo que hubiera imaginado.
Sin darnos cuenta, llevábamos más de una hora en aquella pequeña cafetería, hablando de todo y de nada, mientras la gente entraba y salía, agenos a nuestra pequeña conversación.
Hablamos de nuestras aficiones, gustos, estudios... Que por cierto, descubrí que Zayn está en segundo de medicina y que se mudó a Londres este año, con su mejor amigo. Se aloja en la residencia del campus, y no le faltó tiempo ni detalles para contarme lo asqueroso que es su compañero de cuarto.
Dijo que le gustaría alquilarse algún apartamento fuera del campus, pero todavía no tiene mucho dinero, ya que no le ha dado tiempo a buscarse un trabajo, y además tiene que estudiar un montón.
Hablando y hablando, me di cuenta de que tenemos muchas más cosas en común de lo que parece a primera vista con ese look y esos tatuajes; que le dan un toque arrogantemente sexy, aunque una vez te encuentras con su cálida sonrisa, toda arrogancia desaparece. Le encanta leer, como a mí. Discutimos un rato sobre los grandes clásicos, y él me recomendó algunos, no muy conocidos, pero "espectaculares" (según él) libros.
También le encanta el arte, aunque en una manera muy diferente a la mía. Mientras que yo pinto de un modo más clásico, a lo pincel-lienzo, a Zayn le encanta el arte moderno. Hace graffitis, dibujos abstractos, caricaturas... me enseñó alguna foto en su móvil, y la verdad es que eran alucinantes.
También hablamos algo de nuestras familias, aunque yo me sentí reacia al tema, y el pareció notarlo, pero no me presionó en absoluto. Todavía no me sentía muy cómoda hablando del tema de mi madre... ya había sido hace tres años, pero sigo echándola de menos como el primer día.
Por fuera puede que parezca que todo va bien, pero todo el mundo carga con un peso que no quiere mostrar al exterior, supongo. Además fue mi madre, la que me enseñó a mantener una sonrisa ante todo, como ella hacia. Como ella hizo hasta el final.
Así que cada vez que la recuerdo, en vez de hacerlo triste, lo hago con una sonrisa.
Y bueno, pensando en todo lo que acabo de decir, me he dado cuenta de lo rápido que se me a quedado grabado todo lo que Zayn me ha contado, al mínimo detalle. Pero esque, hablar con él, es tan fácil, confortable, y te mira con esos ojos que dicen que realmente le importa lo que le estás contando.
Le miré de arriba a abajo mientras terminaba de contar, emocionado, una anécdota con su hermana pequeña, cuando me di cuenta de que... ¿estaba en calcetines?
Sin poder evitarlo, empecé a reírme descontroladamente, y él me miró confundio.
-Pero.. ¿Si la parte graciosa no ha llegado aún...?- Me miro con esos ojos dorados, confundidos.
-No.. es ...eso...-Dije como pude entre risitas.- ¿Por qué no llevas zapatos?- Me miró sorprendido, luego se miró los pies y agachó la cabeza, aunque pude ver como sus mejillas se sonrojaban.
-Yo... Esque...Bueno con la nieve se habían mojado mis vans y.. y... -Este Zayn nervioso y avergonzado me gusta mucho más que el Zayn ligón del principio, y mira que es eso es díficil.
No pude seguir conteniendome la risa, y estallé con una carcajada. Esta vez no por que no llevara zapatos, sino por el hecho de que estuviera tan avergonzado.
Me miró y se echó a reir conmigo, mostrando esa preciosa sonrisa con la lengua detrás de los dientes. pero derrepente, su sonrisa desapareció y fue sustituida por una expresión no muy descifrable. parecía... ¿dolida?
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Greenlight (One Direction fanfic)
FanfictionAmy Edwards se mudó a Londres junto a Niall, su rubio y carísmatico mejor amigo. Ella es una chica alegre, graciosa, un tanto insegura sobre sí misma; y sobre todo con ganas de enamorarse. Y al enamorarse descubrirá todas las caras del amor, se dará...