𝐋𝐀 𝐌𝐔𝐄𝐑𝐓𝐄 𝐘 𝐒𝐔𝐒 𝐀𝐌𝐈𝐆𝐎𝐒 || ShinKami

▫ ¿Preparados? ▫

Toda la noche, estuvieron esperando a que llegara la mañana para así salir e ir a juntarse con la reciente pareja comprometida. Momo, tenía las ganas de tomar su celular y hablar o con Bakugo o con Kendo. O hasta con Monoma. Estaba nerviosa.

¿Su mejor amigo se iba a casar a los 22 años? ¿Tan joven? No lo culpaba, ella lo iba a ser, pero luego de terminar su carrera. Aún les faltaba un año de universidad para graduarse permanentemente.

Suspiró afligida. Tenía mucha información acumulada.

Tomó su bolso y de allí sacó su celular, dispuesta a llamar a Bakugo. Shoto le quitó el celular, antes de siquiera marcar.

─ ¡Shoto!

─ ¡No, no mas llamadas! ─ guardó el aparato en su bolsillo ─ Momo, prometimos no decir nada hasta poder hablar con ellos ¿Que tanto te cuesta entender eso? ─ Momo frunció el ceño. Shoto tragó saliva, algo arrepentido de decir lo último ─ Quiero decir...

─ No no, está bien, tienes razón ─ concluyó rendida ─ Es solo que... ¿Se van a casar? Eso si que es una sorpresa.

─ Lo se, yo también estoy sin palabras. Pero aún así, los apoyaremos ¿Verdad?

─ S-si, obvio que si, Denki es mi mejor amigo ─ suspiró ─ Vamos, seguro nos están esperando.

─ Eh, lo dudo mucho, pero bueno. Vamos ─ asintió. Se dieron un corto y tierno beso en los labios y partieron para el departamento de Shinso, ansiosos por saber la verdad de la situación.

Al llegar a la puerta, se encontraron con otras parejas. Al parecer se habían enterado de la situación, o al menos eso pensaban ellos.

─ ¡Oye cola de caballo! ¿Sabes lo de...? ─ ni bien la vio, Bakugo tomó a Yaoyorozu de un brazo y la alejó un poco de los demás.

─ ¿Lo de qué? ¿La-la boda? ─ vio a Katsuki asentir ─ ¡S-si! ¿Tu lo sabes?

─ ¡Por supuesto que si! ¿Porqué mierda crees que te lo pregunté?

─ Bueno bueno, perdón. Shoto también lo sabe, Shinso se lo dijo ─ señaló a su prometido, quién se había ido a saludar a los demás solo

─ Si si, el ojeras también me lo dijo. Lo que quiero saber es si hablaste con Rayito ─ al verlo tan preocupado, Momo lo miró con pena y suspiró.

─ No, Denki no me ha hablado desde aquel... incidente ─ Bakugo gruñó por recordar lo que pasó, aunque no haya estado en el momento, juró haber odiado a Kyoka ese día.

─ Esa perra...

─ Cálmate, Kyoka lo siente ¿Okey?

─ Como sea. Si Denki llora en frente mio, juro que me voy a vengar.

─ Es tierno que te preocupes por el Katsuki, eres como su verdadero papá ─ comentó con una sonrisa.

─ Cállate.