Capitulo 5

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Mulan se encontraba a unos metros del campo de entrenamiento, su caballo estaba recostado en el pasto y la chica trataba de actuar como hombre.

—Hola, veo que tienes una espada, yo también tengo una, son muy masculinas— trato de sacar su espada de la funda pero esta cayó al suelo.

El caballo relincho, burlándose del intento de Mulan, la susodicha suspiro.

— ¿A quién engaño?, necesitare un milagro pare entrar al ejercito—

El ruido del fuego encendiéndose asusto a Mulan, luego apareció una sombra de dragón en una roca.

— ¿alguien solicito un milagro?, los que si digan “YO” —

Mulan grito y se escondió detrás del caballo.

—Con eso basta, tus ancestros me han enviado así que  prepárate Mulan tu salvación dragonearía está aquí, porque si el ejército descubre que eres una chica tu destino será la muerte—

— ¿Quién eres tú? — Interrogo la chica.

— ¿Quién soy?, soy el guardián de almas perdidas, el señor de los dragones, el estupendo, el simpático— Mulan sonrió  — el majestuoso e indestructible Mushu—

Mulan se desilusiono por lo que vio.

—Vaya producción ¿eh? — Antes de decir otra cosa, caballo lo pisoteo pero Mulan lo detuvo.

— ¿Mis ancestros enviaron a una lagartija a ayudarme? — dijo mientras recogía al dragoncito.

Mushu levanto frunció el ceño.

—DRAGON— corrigió — Yo no ando por ahí enseñando mi lengua— se quejó.

—eres tan…— Mulan no termino la oración al ser interrumpida por Mushu.

— ¿Impactante?, ¿inspirador? —

—Chiquito— dijo ella, haciendo referencia a ello con una de sus manos.

—echacatamente, soy de tamaño de bolsillo para su conveniencia, mis poderes van más allá de lo que crees, por ejemplo, mis ojos ven a través de tu armadura— Antes de seguir, la chica le dio una bofetada.

— ¡Ya está, deshonor, deshonor sobre toda tu familia, DESHONRADA TU, DESHONRADA TU VACA, DESHON…— Mulan lo callo tapándole la boca.

—Perdona, perdona, es solo que… estoy nerviosa— Admitió.

 —está bien, te ayudare, ¡PERO NO VUELVAS A GOLPEARME! — se quejó el dragón.

Se pararon en la entrada del campo de entrenamiento.

—Bien, te enseñare a actuar como un chico — dijo Mushu desde la parte del cuello de la armadura de Mulan— hombros atrás, saca el pecho y piernas separadas— La chica entro al campo de entrenamiento caminando de forma rara, los demás reclutas la miraban.

Mulan se paró frente la carpa donde reclutaban, justo al lado de un hombre enano y con barba, uno flacuchento y cara estirada, y un gordo pero grande.

—Bien, primer paso, hacer amigos, golpéalo eso les gusta— Susurro Mushu.

Mulan obedeció y golpeo al hombre enano, el cual se estrelló contra la pansa del pachoncito.

—Mira Yao, tienes un amigo— digo el gordito.

—Ahora una nalgada, eso sirve para sellar la amistad—

Mulan obedeció otra vez… Grave error.

Yao agarro a Mulan del pliegue de la camisa que iba debajo de la armadura.

Hua MulánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora