Hua Mulán

Capitulo 7

Especial 2

La ciudad se encontraba completamente tranquila, los ciudadanos volvían a sus casas, los animales se recostaban y los vendedores recogían su mercancía. Los guardias estaban vigilando hasta el último centímetro de la ciudad.

Un vendedor estaba metiendo su mercancía a su hogar, dejaba los tomates en unas repisas al igual que el resto de vegetales, se escuchó un estruendo y gritos que provenían de afuera, el señor salió para enterarse de lo que pasaba. Vio a los hunos bajando por la muralla de la ciudad y masacraban a los guardias, el señor iba entrar pero una dama, con parte de su cara pintada de color blanco, apareció frente a él y lo atravesó con garras de águila que aparecieron en sus manos.

Al día siguiente, en el campo de entrenamiento, los soldados se encontraban en filas, con sus armaduras y espadas.

—Nos han llamado a la guerra, a pesar de que su entrenamiento no haya terminado, iremos a proteger la ciudad de el paso Tong-shao, contra los invasores— dicto el General Shang— ahora harán el juramento del guerrero, prometiendo fidelidad a los 3 pilares de la virtud. El enemigo no posee ninguno de ellos, por lo tanto puede ser derrotado, ESPADAS— los soldados sacaron sus espadas—Lealtad—

—Lealtad— gritaron todos inclinando sus espadas hacia adelante.

—Valentía— dijo Shang

—Valentía— dijeron todos.

—Verdad—

—Verdad— Mulan y Kai se miraron entre ellos sin repetir aquella virtud.

En el camino, algunos asustados y otros preparándose mentalmente.

—A la guerra hemos mucho ya marchado...— empezaron a cantar.

—El estruendo es tal, sonamos cual ganado— dijo Yao.

—Estos pobres pies que a ritmo ves, inútiles ya son— entonaron todos.

—HEY, hay que pensar, Mi Chica es La Razón— canto Ling.

— ¿Qué? — pregunto Mulan.

—Lo he dicho ya, Mi Chica es La Razón— respondió.

—Que tenga pálido color, Y brillo en su mirar— Ling se la imagino.

—Mi chica debe admirar mi fuerza y mi Valor— canto Yao.

—No importara que se pondrá, o si es muy fina, dependerá de que cocina, Res, puerco, pollo— dijo Shien-po.

Yao se acercó a Mulan.

—Muchas chicas te creyeron el más hombre— le dijo Yao.

—Les apuesto a que aman solo el uniforme— canto Ling.

—Adivinen que extrañamos más, estando en acción— corearon los demás soldados.

—Si hay que luchar— Dijo Ling.

—Mi Chica es La Razón— entonaron.

Shien-po, Ling y Yao se acercaron Mulan y a Kai.

—Mi chica no dudara...— Yao dejo Shien-po terminara la frase.

—Que soy tan ejemplar—

Kai se escabullo para no tener que decir nada, pero Mulan dijo lo primero que se le ocurrió.

—No hay una chica cerebral que piense antes de hablar—

—Nah— dijeron los chicos.

—Mi modo varonil de hablar, va a emocionarla— dijo Ling.

—Se cree un galán que va a matarla— dijo Yao devolviéndole la nalgada a Mulan.

—No habrá chica igual a la que me ha esperado— Canto Chi-fu.

—Su mamita, ¿o quién?, pues nadie más lo ha amado— Le susurro Yao a Mulan.

—Y si a recordar el plan triunfal nos dan su corazón— dijeron todos.

—Hay que gritar— dijo Ling.

—Mi Chica es La Razón—

—Hay que gritar—

—Mi Chica es La Razón, Mi Chica es La Ra...—

No terminaron la frase pues encontraron cuerpos mutilados, espadas ensangrentadas y... un pueblo incendiado.