—¡Quédate quieta!
—¡Pero duele si no tienes cuidado! —me quejé cubriendo mi rostro.
—Tu cabello siempre ha sido un desastre... —comentó rendida suavizando la intensidad con la que me estaba peinando.Las cosas han tomado un rumbo muy drástico. ¿Cómo será que actualmente me encuentro en casa de Kenma, y mi madre me está peinando tras habernos colocado nuestros atuendos tradicionales? Optamos por kimonos en vez de ropa normal, para darle un toque normal al evento. Además que la iniciativa la tomé pensando en las palabras pasadas de Kuro.
—¿Podrías permitirme el honor de volverlo una cita? —preguntó con ilusión—. Ya sabes, algo de nosotros, solo tu y yo...
—Tal vez debimos optar por yukatas nuevamente —comentó mi madre mientras colocaba un adorno en mi cabello recogido.
—Pero decidimos por el frío los kimonos, dado estos son significativamente más abrigados tantos por las mangas como por el calzado —respondí con certeza.
—Lo sé, supongo que extraño el haberme ausentado para los festivales de veranos —dijo algo nostálgica.
—¿Ya están listas? —preguntó la madre de Kenma entrando al cuarto—. Ah, se ven hermosas...
—Gracias —dije algo avergonzada.Realmente el arreglarme no es mi fuerte, menos cuando me gusta ir a todo de forma más natural, pero mi madre insistió que tratáramos de hacer la experiencia lo más especial posible.
Con la llegada de las vacaciones de invierno, mi madre pidió días libres tras retomar contacto con sus conocidos de Tokio. Se tardó un poco en poner a todos al tanto de lo ocurrido, porque no todos estaban consientes de lo de mi padre. La madre de Kenma fue quien propuso darnos estadía unos días para reunirse y poder ir todos juntos al festival de año nuevo de Nerima. Ante la propuesta, mi madre parecía tan entusiasmada que no pudo negarse. Yo por otra parte terminé por confesarle algunas cosas, siendo que tras habernos arreglado, empezamos a ponernos al día con las cosas que habían pasado por mi parte. Sabe que corté comunicación con los chicos tras la mudanza y que no fue hasta el reencuentro que tuve con ellos que retomé el contacto. Sabe un poco más sobre lo de Karasuno, un poco sobre mi desempeño académico, además de que he visitado a papá un par de veces. Incluso llegué a decirle sobre que sentía algo por Kuro, cuando organizamos el viaje que realizamos ahora.—Ya quiero poder verles de nuevo —pensé en voz alta a lo que mi madre me observó extrañada mientras cerraba su computadora.
—¿_____?
—¿Qué sucede?
—Me disculpo si malinterpreto algo, ¿pero acaso será que sientes algo por uno de tus amigos?Quedé paralizada ante su pregunta, a pesar de que lo dijo con total calma. A pesar de saber que si respondía con honestidad no se enojaría conmigo, me costaba entender cómo dedujo eso.
—¿Por qué piensas eso? —cuestioné aún en trance.
—Tienes escrito "Estoy enamorada" por todo el rostro, o tal vez son ideas mías, siendo que no he estado tan al tanto de las cosas... —dijo en tono reflexivo.
—Es culpa de Kuro por ser un idiota —comenté sin pensarlo a lo que mi madre me observó extrañada—. ¡Quiero decir que...!
—Así que Tetsu —rio suavemente—. Tal para cual ustedes dos después de todo, creo a tu padre le encantaría —agregó animada.Luego de aquella escena, traté de esfumar la forma de cómo lo dije de mi memoria, dado lo traté como un idiota, siendo que lo es. No en el sentido académico, porque ahí él es un genio, pero aún me da vueltas el cómo se le ocurre haberme besado de la nada aquel día del campamento. Pensaba tantas cosas sobre él en ese entonces, más que de costumbre. Ahora retomando la realidad, Kuro sabe que vendría, pero ayer fue de visita a ver a sus abuelos y hoy regresa para unirse a nosotros para el festival.
—Estoy segura que Kuroo te encontrará preciosa —dijo mi madre divertida.
—¡Oka-San! —exclamé en señal de vergüenza
—Lo siento, pero no puedo evitarlo —comentó con aquel tono dulce y suave que asociaba a mi madre antes del incidente de mi padre—. ¿Alguna vez habías escuchado sobre que la belleza de una mujer aumenta exponencialmente cuando se enamora?
—No la verdad —admití apenada.
—Odio decirlo, pero siento que te faltaron amigas mujeres a lo largo de tu crecimiento —agregó abrazándome por sobre los hombros—. Pero a lo que iba, es que espero no te retengas ante esos impulso, enamórate de la forma más pura y potente, de ese modo jamás te arrepentirás de no haberlo dado todo en su momento...
—¿Acaso te arrepientes de...?
—No, siento que cuando llegó tu padre a mi vida, hice todo eso, lo que jamás hice antes —dije en un tono de ensueño.
—Es una historia bastante llamativa la que tuvieron ustedes —dije divertida.
—Lo recuerdo bien —comentó la madre de Kenma mirándome a través del espejo—. Pensar que tu madre estaba comprometida con otro hombre cuando conoció a tu padre
—Escapé con él y al regresar cancelé todo sin sentir una pizca de culpa, así de fuerte es el amor de verdad —concluyó mi madre—. Nos cambia, nos transforma
—¿Y qué hay de mí...? —cuestioné mirándome al espejo, viendo que Kenma entró al mismo cuarto.
—¿Interrumpo algo...? —cuestionó inseguro.
—No... Ya estamos preparadas —respondí alegremente.
—Creo que si te cambió —comentó la madre de Kenma llamando la atención de todos—. Te vi crecer, así que puedo notar ahora que has experimentado casi todo tipo de emociones potentes en un lapso corto de tiempo, y todo eso debido a él, ¿no crees?
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"Hybrid" Kuroo, Tetsurō
FanfictionTener que dejar Nekoma atrás. Tener que aprender y enseñar a volar en Karasuno. No es lo que realmente quería, pero lo afrontaré todo si es por estar a tu lado. Aún si el pasado me genera culpa, aún si el presente se vuelve un pesado desafío y el fu...