𝑈𝑛 𝐴𝑚𝑜𝑟 𝑃𝑒𝑐𝑢𝑙𝑖𝑎𝑟.

Once.

—Chicos los busque por toda la Isla ¿En donde estaban? —nos pregunto.

—Sólo estábamos, ¿aquí? —dice Jake, le pegué con el codo lo lo estúpido que sonó, tiene que notar que no hicimos nada malo y en parte es verdad.

—Si, sólo vimos el paisaje —le digo mientras empezamos a caminar.

—Bueno.  —es lo único que dijo mi padre.

—¡Oigan ustedes! ¿Ustedes hicieron esto?  —nos dijo gritando el señor de las ovejas, nos acercamos y vimos a las ovejas muertas y sin ojos.

—Mis hijos no hicieron esto, estuvieron todo el día con estos muchachos. —«Se nos olvidó que le dijimos eso para que nos dejará salir, ojalas que esos intentos de raperos nos sigan la corriente».

—¿Por qué estaríamos con ellos, si nos pagó ayer? ¿Por qué estaríamos hoy de gratis? —«Ya valimos, nos castigaran».

—Jake, _____ me mintieron. —nos dice. Jake se nota apenado y es  porque nunca les ha mentido a nuestros padres.

Luego de mi aburrido regaño por mi padre y el primero para mi hermano, nuestro padre llegó a la conclusión de que no nos dejaría salir, que... Que genial... Ahora podría estar jugando con los niños, molestando a Jake con Emma o haciéndole la vida imposible a Enoch.

Salimos los tres a la playa para que papá pueda fotografiar algunos aves, para empezar tiene más cámaras que yo, es como decir que tengo Esperanza de que Enoch sea amable y cariñoso.

Papá al ver a un señor con una cámara mejor, se fue a tomar al Hotel, Se puso tan ebrio que se quedo dormido rapido, Jake y yo nos miramos y salimos por la ventana para ir con Miss Peregrine.

Al llegar abrió Bronwyn y nos abrazó a ambos, nos soltó y nos fuimos a cambiar de ropa. Jake se puso la ropa del abuelo Abe y yo la misma de ayer, el que me presto Emma, me hice una una cola con mi cabello para que se vea ordenada. Salgo y las niñas me invitan a jugar su juego de té.

—Yo seré la princesa Claire. —dice y se pone una corona.

—Y nosotras seremo las princesas Fiona y Bronwyn. —ahora dice Bronwyn poniéndole la corona a Fiona.

—¿Y quien serás tú_____? —me preguntó Fiona.

—No lo se, ¿qué quieren que sea? —les pregunté.

—¡Una Reina! —gritaron todas juntas —.Hace mucho que no teníamos una reina —me dice Bronwyn.

—Pero una Reina tiene un Rey, el cual la quiere mucho, le da besitos y la toma de la mano  —responde risueña.