Deseos.

Parte 21.

-Rei he tomado mi decisión, viajaré por esta región por 2 meses más obviamente quedándome menos tiempo del que he pasado aquí, luego regresaré con Bankotsu porque se que espera con ansias mi regreso.

-Si es lo que haz decidido Aome esta bien, sé que tú corazón es quien te guía.

-Muchas gracias por todo Rei, la llevo aquí- mientras la azabache decía esto señaló su pecho a la altura del corazón donde con una cálida sonrisa apretaba sus manos.

-Gracias Aome, nunca conocí a alguien como tú.- De las mejillas de ambas unas traviesas lagrimillas bajaban.

-No es tiempo para entristecer por esto, no es una despedida, ¿por qué traerás a Bankotsu verdad?

-¡Lo prometo Rei!

-Muy bien muchacha, ahora sigue mediodía al norte ahí encontrarás la aldea de mi hijo, él te dará asilo ya he hablado con el.

-¡Muchísimas gracias Rei! ¡Volveré pronto!- Dicho esto la azabache se disponía a marcharse hasta que la voz de Rei la saco otra vez de sus pensamientos.

- En las caballerizas de atrás hay una yegua Aome, era de mi hijo pero él tiene 3 más en su casa además de que la pobre Pom está triste, así que adelante, ahora es tuya.

-¡Muchas gracias Rei! ¡Cuidaré de Pom ya verá!- Así Aome agitó su mano a manera de despedida y corrió por Pom, la hermosa yegua blanca ya la esperaba como si presintiera que saldría a cabalgar después de mucho tiempo.

-¡Hola otra vez Pom!

Así sin más monto a la yegua, y se encaminó a la siguiente aldea.