11. ¡Es mágico!

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Shannon

Ya casi es el amanecer y estoy con Anastasia yendo a un lugar “secreto" pero por los caminos, presiento que he venido acá, estos son los lugares donde se la pasan mis padres y si, ciertamente, por aquí vive un amigo de papá, “Caurimare" una urbanización de clase alta unos minutos cerca de casa, pero no entendía algo ¿Anastasia qué me traía acá? No es como si fuese los lugares que ella frecuente, bajamos de la moto y volteó a verme así que sólo sonrió nerviosa, yo no entendía que hacíamos acá.

A: Llegamos - se puso la mano en la nuca en modo de que me diría algo malo, lo presentía - aquí vive Juanpi - me sorprendí, me había contado que sus padres tenían mucho dinero pero no sabía como para vivir aquí - pero ahorita no esta y el vigilante es nuevo - sonrió más nerviosa y yo aún no entendía nada - nos toca entrar sin que nadie se de cuenta - susurró y mis ojos se abrieron tanto por el asombro -
S: No, no, no Anastasia, eso suena muy peligroso, este lugar tiene una gran seguridad, me da miedo - Anastasia me miró entendiendo y me extendió la mano, aún así la agarre -
A: ¿Confías en mis dotes? - pregunta y sonreí - ¿eso es un sí? - sonríe preguntando y asentí -
S: Si, señorita de la Garza confío en usted - susurro y sonreímos -
A: Vamos Greco - me llevó por un camino, el cual no recuerdo haber ido jamás y subimos una pared, yo tenía demasiado miedo pero también muchísima adrenalina y saltamos esa pared, caminamos unos minutos más y allí estaba la vista más hermosa jamás antes vista... La ciudad de Caracas -
S: Esto… ¡Esto es mágico! - susurre anonadada y ella sonrió orgullosa - ¿Desde cuándo vienes acá?
A: Desde que conozco a Juanpi, nos conocemos desde chiquitos la verdad, pero hace unos años él se mudó acá con sus padres y una de las primera veces que vine a visitarlo él y yo conocimos esta parte, lo cual es realmente mágico y desde entonces venimos cuando estamos mal ¿Te acuerdas cuando salí de tu casa que bueno casi nos besamos? - asentí lentamente - pues vine hasta acá y Juanpi llegó al rato, aparte de él y yo ahora lo conoces tú - volteó a verme - este lugar es como nuestro secreto, el cómplice de mis llantos y los de Juanpi, nuestras risas, nuestros suspiros y ahora sabes tú también - me miro sonriente -
S: No tengo palabras, mil gracias - la abracé y sentí paz, sentí por un momento que no existía clase social, novio, pasado, familias, otros mundos, sólo nosotras dos, frente a un mágico momento y fue al separarnos que quedamos a centímetros, mi piel se enchino, ella solía hacerme temblar y no se si se daba cuenta de eso - creo que esto es lo más hermoso que he visto - no sabía si lo decía por el lugar o sus ojos -
A: Lo es - susurro y fue cuando el amanecer nos atrapó, me acurruque en su pecho y lo vimos aparecer, era una magia total y estaba anonadada - creo que ya debo llevarte a casa - suspiró y asentí -
S: Creo que sí - susurre acurrucada en su pecho -
A: Maldición Shay no sé como luchar con esto - susurro y alce la mirada, Ana hizo el puchero más hermoso del mundo, pero no entendía nada y realmente tenía miedo a preguntar -
S: A… ¿A qué te refieres? - carraspee y pregunté-
A: - Allí bajó su mirada, volvió a ver mis ojos y agarró mis mejillas, en segundos mis ojos estaban cerrados - esto… - susurró y me besó, era algo increíble, sus labios eran adictivos, suaves, con sabor a fresa, a alcohol, era majestuoso y enrede mis brazos en su cuello, pidió permiso para acceder su lengua y sin dudar lo aprobé, allí comenzó una batalla donde ninguna quería salir perdedora y por falta de aire a los minutos nos separamos y estábamos sonrientes, la abracé sabiendo que pronto volveríamos a la realidad… a nuestra realidad - fue…
S: Precioso - completé su frase y asintió - vamos, debo volver a casa - me sonrió nostálgicamente, para agarrar mi mano y hacer lo mismo que cuando llegamos pero ahora para salir, subimos a la moto esta vez ella no llevaba el casco en cambio yo si seguía con el que me dio, pero igual la seguía abrazando, a los minutos llegamos pero le pedí que me dejará una cuadra antes de mi casa - gracias por… todo - le sonreí -
A: A ti por venir conmigo, aunque la que me lo pidió fuiste tu - nos reímos y asentí -
S: Avísame cuando llegues a casa por favor y Ana - me miró atenta - ha sido la mejor noche de mi vida, había querido tanto esos besos - susurré en su oído y ella se alejó, me miro asombrada pero con un brillo único y le sonreí para irme a casa, suspiré porque de seguro Ben llegó y le dijo a mis padres que me fui del bar, la vi pasar y se me olvido lo que pensaba, ese era el efecto de Anastasia en mí y sonreí como una tonta. Llegué a casa y como dije estaría Ben - ¡Llegué! - salía Ben ¿preocupado? Y Diana echa una energúmena -
D: ¿Dónde estabas Shannon Ashley Greco Dimario? - pregunta y ahora si debo temblar -
B: Valentina y tú se fueron, me preocupé muchísimo - apenas me soltaba y yo estaba muda, no quería pelear, así que me di la vuelta y caminé hacía las escaleras, escuchando los gritos de Ben y de mi mamá, caminé al cuarto de los gemelos aún dormían y sonreí, para luego irme al mío y echarme un baño, había sido una noche preciosa y sin haberlo planifico, al salir sonó mi teléfono-

Llamada entrante

S: Digan - conteste sin ver el número -
A: ¡Hola! ¿Por favor con la srita Greco? - preguntó con voz de profesional -
S: Con ella hablan ¿Quién es? - pregunto y sonreí -
A: La persona que acaba de dejarla en su casa y que le pide ahora una cita porqué - se quedó muda y me dio miedo - porque le gusta mucho señorita Greco - volví a sonreír -
S: Acepto sólo está vez invito yo ¿le parece? - pregunto y la escuché refunfuñar pero al segundo aceptó a regañadientes y yo me reía -
A: Shay… -vno dije ni una palabra aunque ella sabía que estaba allí - me gustas mucho - me embobe al oír su voz ronca -
S: Ana… - ahora ella era la muda - tú también me gustas mucho - la oigo suspirar y sonreí enamorada - hablamos ahora, te quiero
A: Te quiero más - nos despedimos y colgamos - Fin de llamada

Me asomé a la ventana a ver si seguía Ben en casa y vi que salían mamá y él, vire los ojos, bajé a buscar agua y los miré por la ventana de la sala, así que agarré camino a la cocina tranquilamente hasta que oí una pregunta que me dejó helada.

D: ¿Tienes a alguien más Shannon? - me quedé petrificada -
S: No mamá - dije en un susurro y volteé a verla ella tenía los brazos como un jarrón en las caderas - no hay nadie más ¿Qué dices? - pregunto sin aire -
D: Espero que así sea Shannon, Ben se habrá tragado la mentira de la Valentina esa pero yo no - Y allí volvía ella, realmente mi mamá odiaba a Valentina porque “me escondía todo” así que siempre que podía la criticaba, pero como toda una política cuando estaba Valentina la trataba bien -
S: Cree lo que quieras Diana, estoy cansada voy a dormir - iba a pasar por su lado pero no me dejó seguir -
D: A no muchachita, arréglate vamos a misa - la miré seria -
S: Van, yo no voy y no me vas a obligar Diana, hoy no, así que hasta luego mamá , voy a dormir - caminé decidida, dejando a una Diana en cólera y sonreí, entré al cuarto y por fin me tumbe en la cama, recordé todo lo sucedido y así me quedé dormida sonriendo como una boba -

Siempre Fuiste tú... Mi gran amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora