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Capítulo 23: "Oscuridad"

Capítulo 23: ''Oscuridad''

La oscuridad formaba parte del todos sin darnos cuenta pensábamos en lo peor con tan solo tener una simple llamada y conmigo no fue la excepción pensé hasta lo más terrible cuando escuché la voz temblar de Allie. La oscuridad no consume el pesimismo también y no es nuestra culpa en fin somos un ser humano y nuestros sentidos siempre nos hacen sentir alerta siempre no hacen pensar lo peor, Aunque estemos totalmente equivocado.

Espero yo también estarlo.

La oscuridad hacía que hasta el más dulce se volviera igual a él tenemos que ponernos en primer lugar siempre y si es llegar a perder un alma bonita siempre lo vamos a hacer por el bienestar de uno mismo. La oscuridad formaba parte de todos, la usábamos para cubrir un secreto, para protegernos a nosotros mismo o solo para lastimar a alguien que nos haya hecho lo mismo.

La oscuridad trataba de consumirme. El dolor formaba parte de mi oscuridad, pero también la conciencia.

Un golpe a la realidad era la mayor oscuridad, ya que tratamos buscar la luz y tapar con un dedo todo el agujero negro que tendríamos, pero solo hacemos más fuerte el golpee. La aquel sentimiento oscuro llega con más dolor al igual que la misma conciencia.

Pero al final siempre queremos lo mismo todos.

Alcanzar la mayor felicidad con la persona que te haga más feliz, llegar al lugar más alto y desde allí gritar y soltar todo lo que tienes que decir sobre la vida y encontrar su propia luz.

La felicidad no es eterna, ya que si fuera así no la conociéramos en sí, a veces se necesita sufrir un poco para lograr tener un equilibrio en este mundo.

Pero eso no significa que tengas que tener sufrir de más para sentirlo, solo ser fuerte y convertirte en alguien mejor de paso.

Las lecciones que no da el camino es lo que nos hacen valorar más a las personas y a las cosas.

Todo con paciencia se obtiene.

Porque lo único que puede quitar la oscuridad es la luz de uno mismo.

Hay que aprender que la oscuridad y la luz es lo mismo ya que ambas tienen el lado positivo.

Por eso aprendí a amar.

Aprendí amar la luz porque muestra el camino.

Pero también.

Aprendí a amar la oscuridad porque en ella habitan las mejores estrellas.

Desde esa llamada arranque en el auto lo más rápido que pude sin importarme nada. Trate de controlar mis acciones y trate de no pasar por alto los semáforos. No cometería el error dos veces.

Mis manos temblaban mientras apretada el volente, había autos más delante mío, tocaba la bocina como loco, quería llegar. Necesitaba saber que pasada. Luego de nos minutos el transito avanza y llego al hospital a paso rápido.

Parqueo un poco torcido el auto y sin importarme mucho a ese gran apartamento blanco que tenía el gran letrero rojo que tenía el nombre de Centro médico. Entre a ese lugar frio y lleno de recuerdo, esas paredes blancas con líneas amarrillas, llenas de anuncios y letreros de cómo cuidar tu salud, asientos de esperas y... personas desbastadas. El hospital era sin dudarlo uno de los lugares más triste que había conocido.

En la sala de espera miro a un grupo de jóvenes que logro identificar inmediatamente camino rápido hasta donde ellos, ellos sienten mi presencia inmediatamente.

— Necesito que te calmes — Es lo primero dice Allie al acercarse a mi mientras coloca sus manos en su hombro tratando de calmare.