dí que sí (kacchako)

Capítulo 23: !Aléjate!

Izuku lo observa realmente molesto. En su interior sospecha por qué, pero aún así decide fingir demencia.

-¿por qué estás tan molesto, kacchan?

Bakugou pesca del brazo a ochako para apartarla del peliverde.

-¡estabas tocandola! ¿¡quieres morir maldito cabrón!?

-¿por qué te afecta tanto?

-¡Esta maldita es mía! ¡No puedes tocarla, no la mires es más... ni si quiera deberías respirar el mismo aire que ella!

El temperamento y celos de Bakugou llegaron a cierto límite esta vez. Ochako trata de relajar al rubio.

-¡Bakugou, tranquilo! ¡no fue nada!
Dice ochako nerviosa queriéndolo hacer entrar en razón.

-¡no me importa! Sirve que de una vez  lo sepa.

-¿saber...?
Replica izuku impresionado.

-que ella es mi maldita novia.
El rubio rodea con su brazo derecho a ochako. La castaña luce apenada y exaltada.

-¿¡eh!? ¿¡En qué momento!?
Exclama sorprendido mirando a ochako. Ella no sabe cómo explicárselo así que guardan silencio por ahora.

-ahora que lo sabes... ¡A joder lejos de ella!
Katsuki deja impactado a izuku en el elevador mientras se cierran las puertas frente a ellos.

-tsk... Maldito brócoli resultó ser un mano larga. Ochako se aparta bruscamente de él.

-¡Bakugou no había pasado nada! Iba a decírselo pero... obviamente de una forma más tranquila y civilizada.

-¿tranquila y civilizada? ¡Mis pelotas! Así le quedó bien claro que no debe tocar mis cosas.

-¿tus cosas? ¿Soy una cosa para ti?
Ochako infla sus mejillas disgustada, parece una niña haciendo un berrinche. El rubio solo chasquea con la lengua y vira su mirada a otro punto.

-tu sabes a lo que me refiero.

El elevador sube hasta el piso de ochako. Las puertas se abren para dar paso.

-no tienes que estarme cuidando, yo se puedo defenderme sola, buenas noches.

Ochako sale del elevador pero el rubio la retiene cargandola por atrás para regresarla al elevador con él. Ochako está atrapada entre sus fuertes brazos.

-¡oye déjame ir a dormir!
Dice pataleando sin lograr nada.

Katsuki ignora lo que le dice, estira su brazo derecho para presionar el botón del número correspondiente al piso de los muchachos mientras le responde tranquilamente a la castaña.

-hoy no irás a tu habitación. Dice sin más

La chica se pone nerviosa y temerosa. Sabe la respuesta pero aún así pregunta.

-¿a dónde voy a ir entonces?

Bakugou no le responde, en cambio permanece abrazado de ella recargando su mejilla sobre su hombro. El rostro del chico se le puede notar calmado, tiene sus ojos cerrados como si estuviese a punto de dormirse. Después de unos segundos antes de que llegara el elevador al piso, Bakugou acerca su rostro hacía la cabeza de ochako, el inhala y exhala pasivamente.

-tu aroma me relaja. Dice sosegado.

Ochako se mantiene inmóvil pero por dentro su estómago arde, siente revoluciones y su rostro está caliente.
Las puertas al fin se abren. de inmediato Bakugou separa cuerpo de ella para salir llevándosela de la mano por el solitario corredor de los dormitorios.

¿¡A caso piensa en...!? ¡No puede ser!
¿¡Habré utilizado ropa interior que combine!? ¡Que maldita vergüenza!

Ambos están afuera de la habitación, sin problemas Bakugou abre su puerta. Ochako escucha a alguien que se aproxima así que entra a la habitación rápido y le cierra la puerta en la cara a Bakugou.

-¿¡Qué mier...!?

-¡hey hombre!
Kirishima se acerca junto a kaminari hacia Bakugou.

-¿que quieren?
Dice molesto el rubio cenizo.

-oye adivina quienes vendrán mañana a la práctica. Comenta kaminari.

-no lo sé y estoy seguro que no me importa, tengo cosas que hacer ahora.

El rubio forcejea la perilla para abrir pero uraraka está del otro lado apretandola para que no la abra.

-¿que sucede? ¿No puedes con una puerta?
Dice burlón kaminari.

-a un lado, puedo abrirla. Dice Kirishima activando su quirk en su mano derecha.

-¡yo puedo solo! ¡Solo váyanse!

-oye pero queríamos contarte el chisme. Dice kaminari decepcionado.

Kirishima conoce a su amigo explosivo así que intuye que algo oculta por lo que el convence a kaminari de irse y regresar mañana para conversar. Una vez que se marcharon, Bakugou pudo abrir la puerta sin problemas y se encerró junto a ochako.

-¿se puede saber por qué me dejaste afuera de mi propio cuarto?
Dice enfadado.

-¡no fue mi intención! Oí que alguien se acercaba, entré para que no me vieran y en cuanto escuche que era Kirishima supuse que tal vez querría entrar contigo a hablar.

-si claro, bien pensado sherlock ¿por qué no querrías que te vieran conmigo? ¿Si recuerdas que somos novios verdad?

-¡ya sé pero...! Me daría mucha vergüenza que me vieran entrar a tu habitación. La chica toca sus mejillas con sus manos para calmar su inquietud.

-aah ya veo ¿te daría vergüenza que supieran que vamos a coger verdad?

-¡Oye! ¿¡Por qué siempre hablas con palabras tan buscas!?
Uraraka agita sus brazos nerviosa.

Bakugou detiene sus movimientos tomando sus brazos de las muñecas.

-mis palabras no son lo único brusco que va a ver aquí. Dice sonriendole de extremo a extremo.

¡Oh no! ¡Va a matarme!

Bakugou nota el nerviosismo de la chica, por lo que trata de relajarla y soltarla de las muñecas.

-tranquila, se que estas tensa, trataré de ser delicado por esta vez contigo.

"¿Trataré? ¿Esta vez?" no me hace sentir tranquila.

-claro solo sí... Es lo que quieres.
El chico da pasos hacia ella mientras ochako retrocede con pasos de espalda hasta topar con la cama.
Ella observa al chico rubio, a pesar de que el cuarto está en completa oscuridad puede distinguir bien sus ojos rojo oscuro, su sonrisa filosa, cabello alborotado. Traga en seco para después pedirle gentilmente que esté con ella.

-quiero estar contigo esta noche.

Katsuki le da un empujón para sentarla sobre la cama, coloca su pulgar sobre el labio inferior de la castalla.

-me pregunto cómo podré contenerme contigo.
la chica le responde con una voz muy débil y aguda como si le tuviese miedo.

-por favor solo... No seas tan rudo.

Esa petición provoca aún más al chico que de por sí ya tenía las hormonas alborotadas por ella.

-eso no te ayuda en nada.
Dice mordiéndose el labio.