Say I love you [Larry/Omegaverse]

13.- Problemas gatunos.

Siente el frío soplo otoñal irse contra su hermoso y fino rostro, siendo cubierto a la mitad por la afelpada bufanda escolar. La mano cálida de Harry pareciera ser el mejor de los calefactores, incluso si solo siente su tacto en una extremidad de su cuerpo. Su alegría sofocante se evapora instantaneamente al segundo que ve una mugrosa y frágil caja en una de las esquinas del parque.

Con brusquedad, se separa de Harry y corre a ver dentro de la caja presintiendo su contenido. Un pequeño y sucio gatito se asoma en uno de los dobleces del maltratado cartón, provocando que su corazón se ahogue en un mar de agonía.

Como pudieron abandonar a un animal así... Más con el frente frío que azotaba la ciudad.

—¿Qué sucede, Lou?

Harry detiene sus pasos detrás del susodicho observando su pequeña espalda encorvada por estar en cuclillas.

— Un gato.

—¿Uhm? — Harry se asoma para ver mejor y se encuentra con un pequeño cuerpo con un pelaje negro lleno de tierra. — ¡Oh! Es muy lindo.

— Lo abandonaron. — Susurra Louis con la cabeza gacha. — Quisiera llevarlo a casa, pero ya tenemos uno... Mi mamá me regañaría. — Hace un mohín desdichado. — Pero si lo dejo aquí, se lo llevarán a un refugio... o morirá de hambre.

Harry analiza el semblante del más bajo con confusión, su corazón se llena de ternura por ver al ser tan lleno de bondad que era el omega. Sonríe relajadamente y acaricia sus cabellos reconfortándolo. — Estará bien. Es un gato lindo, encontrará un nuevo dueño fácilmente.

—No puedo creer que seas tan despreocupado. — Lo corta. — Está al borde de la muerte, está llorando desesperadamente por ayuda. — Cierra los puños con una expresión fúnebre. — Asi que no actúes como si no te interesara.

A pesar de no querer desquitar su frustración con Harry, lo hizo. Era inevitable, le disgustaba que la gente fuera tan insensible con los animales.

El rizado se queda callado con un pequeño cúmulo de culpa floreciendo en su pecho. — Lou...

El mencionado se muerde el labio dudoso. — Lo siento. — Expresa indefenso con las mejillas rojas por el frío. — No es tu culpa pero yo...

Harry niega y frunce el ceño pensativo.

...

El teléfono suena intensamente alumbrando la imagen de un alfa con dulces labios y mejillas de malvavisco. El omega contesta rápidamente tomando a su minino refunfuñado en sus delgados brazos.

—Louis. ¡Ayúdame!— La desesperada y afónica voz de Harry lo alarma enormemente pensando con rapidez situaciones de vida o muerte. ¿Se quedó varado en algún lugar? ¿Lo estaban persiguiendo? ¿Presenció un asesinato?

—¡¿Qué?! ¡¿Qué ha pasado?! — Réplica preocupado.

—¡Por favor¡ ¡No! No puedo...¡oh! ¡No puedo creerlo! — Los gimoteos dolorosos del mayor no hacen nada más que aumentar su ansiedad y preocupación. Dios, ahora solo pensaba en lo peor. Se sienta en la cama y ajusta sus sandalias para poder salir en cualquier momento, Marshmallow se remueve inquieto.

—¡Cálmate! ¡Cálmate y explicame despacio!

—¡No bebe nada más que leche! — Agoniza frustrado.

Louis se queda en blanco. Siente su pecho desinflarse cual globo pinchado por una aguja.

—¿Leche? ¿Estás hablando del gato?