3.- Primer beso.

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Era extraño, realmente extraño. Nunca había visto a un alfa comportarse así, y su condenado atractivo no le ayudaba a creer en la buena imagen del ruloso, nadie era así de perfecto.

Lo más seguro era que fuese uno de esos impostores que a la mínima confianza te robaban algo o te secuestraban. Louis se preguntaba qué vería en él, no gozaban de mucho dinero ni nada en abundancia, ¿talvez era parte de una red de mafia? ¡Sí! De seguro era eso y lo quería para poder contribuir con la trata de omegas.

Cómo no lo vio antes. Admitía que esa sonrisa que competía con los rayos del sol y el encanto de su Marshmallow era muy engañosa. Más con esos brazos...

-¡Louis! ¿Qué pasa, cariño? ¿Tienes fiebre? - Mary era la jefa de Louis, una beta rechoncha pero llena de alegría y con aura muy hogareña. Era la dueña de la panaderia "Your good bakery" donde Louis trabaja por medio tiempo.

Ellos no sufrían de dinero. Afortunadamente, después de la muerte de su padre, el sindicato en el que laboraba les pagó una decente pensión. Su madre también trabajaba en un puesto decente, pero Louis se sentía mejor si aportaba algo a la casa, además de poder ganar un dinero para él. Era una buena manera para pasar el tiempo.

El omega se sonrojó y tocó con el dorso de sus manos sus acaloradas mejillas. -¡Estoy bien! - Tomó la bandeja que habia dejado su compañera y empezó a colocar los bizcochos recién hechos en el exhibidor.

A unos pocos pasos, un alfa de aproximadamente unos 30 años o más, miraba con disimulo el fino y esbelto cuerpo del menor. Era un cliente recurrente en la tienda, con el único objetivo de ver la dulce silueta del ojiazul.

-Disculpe, quiero comprar esto. -Con una mirada calculada, el señor coloca la bandeja repleta de todo tipo de panes en la mesa de cobro.

Louis retoma su puesto en la caja registradora y toma con una pinza los panecillos escogidos por el cliente misterioso. - Claro, ¿Quiere que ponga juntos los panes dulces y salados?

-No, separados están bien. Además, ¿podría poner una servilleta por cada uno?

-Como usted pida.

El cliente se complace con la vista de los labios finos y frescos del encantador castaño, deleitándose con su piel aterciopleada, blanca y delicada, con la mirada revoloteando por su puro y casto cuello sin marca alguna, listo para ser devorado.

Louis se queda un poco perturbado por la mirada que le da el contrario, sin embargo decide desviar la vista y dejarlo pasar. Registra el producto en la máquina y toma el ticket. - Usted pago $18 y le devuelvo $2. - Ligeramente atemorizado, Louis deja el cambio en la mano del contrario. -Gracias por su compra.

-Tú...

-¿Eh?

- N-Nada. Buena tarde. - El mayor se despide con una sonrisa algo espeluznante para su perspectiva y se retira de la tienda. Y él que pensaba que Harry era raro, este señor era aún peor.

-¡Louis, te encargo esta bandeja!

...


El omega se desliza por la cocina para tomar una jugosa manzana y carga al robusto de su gato en sus brazos para adentrarse a su cuarto sigilosamente. -¡Louis! ¿Qué son esos modales? -Su madre lo observa enfurruñada interrumpiendo su sesión de yoga en la sala.

Atrapado en la fuga, Louis camina hacia ella y le da un beso en la mejilla. -Hola, mamá. - No recibe respuesta de la contraria que vuelve a cerrar los ojos y enfocarse en su respiración, por lo que el bajito vuelve sus pasos hacia su cuarto.

Say I love you [Larry/Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora