-Me alegra mucho que estés intentando recuperar lo que tenías con mi hermana – dijo Vania con una sonrisa.
Había llegado a Cancún hace una hora. Y lo primero que hice fue ir a la casa de Vania.
Estando ahí ya me sentía más tranquilo. Me había propuesto disfrutar al máximo estos días junto a ella.
-Llegaste – dijo con una sonrisa en los labios -. Estaba en la playa con Iker y me olvidé de llevar el celular.
-Llegue hace un rato
-Supongo que debes de estar cansado. Considerando que ayer llegaste bastante tarde a tú casa – dijo seria
Sí, definitivamente la había extrañado.
Me acerqué a ella y le di un beso.
Habíamos decidido que a pesar de que estaríamos con su familia. No, nos íbamos a quedar en la misma casa, según ella quería que tuviéramos privacidad. Y, para ser sincero yo también lo quería. Lo bueno es que tuvimos suerte de encontrar una casa en alquiler muy cerca de donde estaba la casa de Vania.
-Te acompañó a la casa para puedas dejar tus cosas y puedas descansar un rato. Porque traes una cara de que no duermes hace días – dijo graciosa.
¿tan mal me veía?, pensé.
Me despedí de Vania y del pequeño y salimos rumbo a la casa.
Llegamos a los minutos. La casa era realmente hermosa y sobre todo tenía una vista increíble.
Fui al cuarto y la encontré echada en la cama con el celular en la mano. Si alguien me hubiera dicho hace meses que tendría la oportunidad de volver a verla así, me hubiera reído y hubiera dicho que ni en mis mejores sueños pasaría.
Me eché con la cabeza encima de sus piernas y automáticamente ella comenzó a hacerme cariñito en el pelo.
-Si, sigues eso me voy a quedar dormido – le dije
Realmente estaba muy cansado.
Río bajito.
-Descansa un rato – dijo -. Estoy terminando de contestar unos correos y yo también me uno. Porque también estoy cansada.
Asentí.
Me desperté desorientado. Hasta que la vi a ella a mi lado. Eran como las 6 de la tarde.
¿Tanto habíamos dormido? Me pare de la cama y me dirigí hacia la cocina para tomar un vaso de agua.
Un celular comenzó a sonar.
Fruncí el seño, el mío no era porque estaba en vibrador. Entre al cuarto y el celular que sonaba era el de ella.
Danna seguía durmiendo, al parecer no había escuchado el celular.
Volvió a sonar.
Me acerqué a donde estaba el celular para ver quién la llamaba con tanta insistencia.
Era él.
¿Debía contestar?
La respuesta era clara. No debía. Pero había algo dentro de mí que me decía que contestara.
Decidí dejar el celular donde estaba.
Agarre mi vaso de agua y salí al balcón, la vista realmente era increíble.
Le mande un mensaje a Chiara para avisarle que había llegado bien. Y mientras esperaba que me contestara fue inevitable no pensar en la última vez que Danna y yo hablamos hace algunos años.
Flashback
-Yo lo siento – dije -. No puedo
Se quedó callada.
-Danna creo que nos estamos apresurando. A ti te está yendo muy bien allá y no creo que sea muy conveniente que dejes todo por una relación que no sabemos si va a funcionar.
Murmuró algo que no pude entender.
-No vengas a tomar como excusa mi carrera para tomar lo cobarde que eres. Debí haberlo imaginado – dijo con la voz quebrada -. Jorge, yo aposté por nosotros. Aposté por esto, no puedes simplemente venir a decir que no te sientes preparado. Cuando venimos hablando de esto hace semanas.
-Es que Danna…
-Es que nada – me interrumpió -. Esta más que claro la situación. No necesito que me digas más. Espero que cuando te des cuenta del grave error que estas cometiendo no sea muy tarde.
Colgó la llamada.
Minutos después comencé a llorar como un niño. La había perdido para siempre.
Fin del flashback
El sonido de mi celular me sacó de mis pensamientos.
“Que bueno que llegaras bien. Nosotros seguimos grabando”
Me mandó una foto donde estaba ella con otros compañeros del elenco.
Estaba muy linda.
“Suerte con eso. No te molesto más entonces. Háblame cuando termines"
-¿Jorge? – escuché que me llamaba
Ya se había despertado.
-Voy – contesté
Estaba sentada en medio de la cama con el celular en la mano.
Debe de estar hablando con él, pensé.
-¿Dónde estabas? – pregunto dejando el celular a un lado.
-Fui a la cocina por un vaso de agua
-Amor tengo hambre – dijo haciendo un puchero.
Reí.
-Escríbele a tú hermana y pregúntale si ya cenaron. Si te dije que no, dile que los invito a cenar fuera.
Esbozo una sonrisa.
-Escríbele tú. Hay esta mi celular, la contraseña es la misma. Me voy a bañar
Agarre el celular y lo desbloquee. Entré a WhatsApp y la primera conversación que me apareció fue con Franco. Él le había mandado un mensaje hace 5 minutos que ella aún no veía.
Quería ver la conversación pero sabía que no debía hacerlo.
Busque el chat de Vania y le mande el mensaje. Automáticamente me respondió que nos esperaba para salir a cenar.
Abrí la vista previa del chat de Franco, para que Danna no se enterara que lo había visto.
El último mensaje que él le había mandado decía:
Te extraño
Decidí retroceder la conversación y hubo algo que me llamó la atención.
Franco le estaba reclamando por haberle dicho que yo estaba en México.
“Podrías haberme al menos avisado ¿no crees? Me enteré por las páginas de chismes Danna”
“¿Y que querías que te dijera? Yo también me acabo de enterar. ¿Que parte que no tengo contacto con él desde hace años no entiendes? Franco estoy cansada de que siempre me hagas reclamos estúpidos por Jorge”
“¿Cómo no vas a saber? Si tú y su mamá son amiguísimas. Es imposible que no te hayas enterado”
“Mira Franco te lo voy a repetir una vez más por si no te quedo claro. El hecho de que Jorge y yo no estamos más juntos no significa de que yo tenga que dejar de hablar con las personas que forman parte de su vida tanto de él como de la mía. Y si no te gusta eso, ya sabes que tienes que hacer. Estoy ocupada hablamos después”
Salí de la conversación y bloquee el celular.
Había algo que no me convencía. Desde hace días había algo que me estaba haciendo mucho ruido. Y, después de ver lo que vi decidí hacerle caso a mi intuición.
Necesitaba conocerlo.
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When I Met You
Fanfiction𝑈𝑛 ℎ𝑖𝑙𝑜 𝑟𝑜𝑗𝑜 𝑖𝑛𝑣𝑖𝑠𝑖𝑏𝑙𝑒 𝑢𝑛𝑒 𝑎 𝑎𝑞𝑢𝑒𝑙𝑙𝑜𝑠 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠𝑡á𝑛 𝑑𝑒𝑠𝑡𝑖𝑛𝑎𝑑𝑜𝑠 𝑎 𝑒𝑛𝑐𝑜𝑛𝑡𝑟𝑎𝑟𝑠𝑒, 𝑎 𝑝𝑒𝑠𝑎𝑟 𝑑𝑒𝑙 𝑡𝑖𝑒𝑚𝑝𝑜, 𝑑𝑒𝑙 𝑙𝑢𝑔𝑎𝑟, 𝑎 𝑝𝑒𝑠𝑎𝑟 𝑑𝑒 𝑙𝑎𝑠 𝑐𝑖𝑟𝑐𝑢𝑛𝑠𝑡𝑎𝑛𝑐𝑖𝑎𝑠. 𝐸𝑙 ℎ...