Capítulo 41."Revelaciones"

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La ceremonia había comenzado con gran emoción y buena organización por parte de los alumnos y maestros del comité universitario.

Katerin se había colocado un hermoso traje rosa, el cual resaltaba su tez clara y cabello negro, dándole un aspecto más formal y adorable a su rostro. A ella junto a Michael se les había asignado dar las palabras de despedida a su generación, a sus maestros y la institución.

El director había inaugurado la ceremonia, presentó a unos invitados y comenzó con un largo discurso de como había sido el desempeño de cada salón, lo que vendría en su vida y consejos que serían útiles para ellos.

Aquello sirvió para hacer tiempo, ya que Michael no aparecía por ninguna parte, él no respondía a sus llamadas y nadie podía darle información acerca de su paradero. Katerin comenzaba a perder las esperanzas, se preocupó por él y miraba constantemente la puerta de la entrada, esperando a que por un milagro él llegara.

— Chicos, nunca olviden quienes son y de donde vienen, les deseo éxito a todos ustedes. Ahora, los dejaré con las palabras de despedida a cargo de sus compañeros, quienes tuvieron un impecable y asombroso desempeño en todo este largo transcurso que caminaron a la par con sus maestros. Ahora, bien, Katerin y Michael, se les hace la invitación de pasar.
Terminó diciendo el maestro con una sonrisa.
— Gracias, director.
Respondió Katerin con nervios.

El momento había llegado, y Michael no aparecía por ningún lugar. Subió lentamente hasta el escenario, las miradas de sus compañeros, maestros, padres de familia, invitados y acompañantes recayeron sobre ella, esperando mucho por sus ilustres palabras.

— Compañeros y compañeras, fue un gran camino el que recorrimos desde el primer semestre hasta aquí. Todos tuvimos dificultades, también buenos momentos, hicimos grandes amistades en este lugar, fuimos instruidos por buenos maestros y alcanzamos la meta, gracias a nuestro arduo esfuerzo. Hoy me complace verlos recibirse como todos unos licenciados, éxito para todos.
Concluyó Katerin, mirando para todos lados, pero, Michael no llegaba.

Ellos dos habían preparado el discurso para decir lo en pareja y complementarse, sin embargo, él no había aparecido. Su discurso fue corto. Aún así, sus compañeros aplaudieron con emoción y le sonrieron.

Más tarde, después de que cada uno comenzará a recibir sus documentos. Michael hizo su presencia, con un traje perfectamente arreglado, su cabello y su estilo era diferente al que normalmente usaba, él se veía despreocupado.

— Mike, ¿todo está bien?
Preguntó Katerin mirándolo de arriba a abajo.
— Claro, todo está perfecto.
Respondió relajado.
— Entonces, ¿puedes decirme por qué no llegaste hace un rato? O, ¿es que se te olvidó?
— Oh, no. La verdad no sé me olvido, estaba atrás, pero como te vi que podías sola, dejé que brillarás en el escenario. Lo hiciste bien, felicidades.
Le felicitó con un poco de sarcasmo en su tono.

Katerin lo noto, definitivamente algo le pasaba a Michael, él no solía portarse de esa manera y menos con ella.

— ¿Sucede algo? ¿Por qué te comportas así?
Preguntó contemplando lo con preocupación.
— Yo estoy bien, no veo razón para que te preocupes.
— ¿Qué dices?

Michael solo hizo un movimiento de hombros, dando a entender que no sabía. Estaba a punto de decirle otra pregunta, cuando pronunciaron su nombre por los altavoces.

— Señorita Gyuri Katerin Castillo Jiménez.
Anunció la que dirigía la entrega de documentación.
— Ya hablaremos, Michael.
Dijo antes de levantarse e ir por sus documentos.

Alejandro se dio cuenta de la tensión que había entre ellos dos. Michael no era el chico cariñoso y caballeroso que solía ser con ella, algo estaba mal y él descubriría que es.

Y si tan solo nos amamos. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora