Reacciones de un adolescente dañado

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Tres semanas pasaron como un día, posiblemente por qué tuvieron que colocarme suero de nuevo, dejaron que Mathew venga a visitarme los días que tenía permitido. La verdad me alegré bastante al verlo venir, me divertía mucho a su lado. Cumplió su parte del trato, yo le daba cinco alimentos y él los comía sin protestar ni vomitar después, con ayuda de mi hermano logré averiguar el lugar donde sus papás trabajan, también dónde viven.

Me sacaron justamente a medio día, así que me llevaron a comer, creo que deberán pagar de más por tanta comida que ingerí, no se imaginan lo que es convivir con Mathew preguntando las calorías de todo, resulta que no come más de 50 calorías en el desayuno; 130 como máximo en el almuerzo; y 300 en la cena. En todo el día su meta es llegar menos de 1000, suele llegar a 500 con suerte.

Desde mañana ya asistiré al colegio, pero sinceramente no quiero ver a Mackenzie, básicamente porque no tengo idea de cómo reaccionar. Thomas me dijo que debía encontrar la oportunidad de hacerla sufrir, el problema es que no me gusta hacer que las mujeres lloren, lo detesto.

Sav me cuidó toda la tarde, se quedó en mi habitación contando sus peleas con mi papá, en algunos casos le podía dar la razón, es decir, mi padre es agotador, sin embargo ella tiene culpa también. Le expliqué el por qué actuaba de esa manera, le dije que era normal al tener una hija tan linda como ella, con eso la convencí totalmente.

(...)

Entré con la cabeza en alto, no iba a acongojarme por ella, simplemente la ignoraría el día entero. Lo que en estos momentos me preocupaba era Martín, no había hablado con él desde ese día que admitió frente a todos su bisexualidad. Tenía mucha curiosidad sobre las reacciones de sus papás, aunque sabía a la perfección que ellos lo aceptarían, mi tío Martín es bastante compresivo y tolerante, mi tía ni qué decirse. De lo que tal vez debía estar alerta es de la prensa, porque si bien no le importa lo que ellos digan, pueden destrozarlo en público.

Llegué a mi salón tranquilamente, normalmente me sentaba al lado de Mack, pero esta vez decidí tomar lugar junto Pedro, quien se alegró al verme, no entiendo por qué, solo sé que le agrado un montón. Dominik no decía absolutamente nada, estaba metido en su teléfono, odiaba este grupo, enserio, son tan falsos. Sus conversaciones son en base a la última moda, cantantes, modelos y actores, tuve que fingir interés en sus estúpidas charlas, hasta les prometí entradas al próximo concierto de Maroon 5 solo para que cerraran su boca.

Las clases pasaron increíblemente lento, estaba contando hasta los segundos para que el timbre del receso tocara, cuando esto ocurrió fui directamente a buscar a Martín, por lo que no me toparía con ella en este tiempo. Busqué por TODO el colegio, nada, lo extraño es que me dijeron que sí asistió al colegio.

El último lugar que me faltó ver fue la biblioteca, aunque dudaba que estuviese ahí, él ni sabe lo que es un libro. De todas formas entré para matar un poco de tiempo, sacaría algún libro de mi interés y lo leería en mi casa, la bibliotecaria ya me conoce, así que me deja entrar y sacar los libros que yo quiera. Esta vez me decidí por algo de suspenso, de manera que fui a ese estante, observé las portadas de algunos que estaban a mi alcance, cuando algo me llamó la atención. Al fondo del pasillo estaba mi primo sentado en el piso, la cabeza enterrada en sus rodillas, las cuales estaban dobladas, dejé todos los libros en su lugar y corrí hasta estar a su nivel.

-¡Te he buscado por todos lados! – le reclamé al verlo, sin embargo me callé al ver su rostro. Su ojo derecho estaba morado, supongo que por un golpe, su labio superior partido, sus nudillos llenos de heridas. Para resumir, estaba hecho una lástima.

- Hola John – su voz era tan apagada que por un momento creí que no era mi primo, sino un clon suyo.

- ¡¿Pero qué mierda te ocurrió hombre?! – sus ojos se llenaron de lágrimas al escuchar mi pregunta, podía hacerme una idea, aunque sinceramente esperaba que no fuera cierta.

¿Dónde está mi alma?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora