La Hija del Sultan

La Danza del Fuego

Ya había pasado una semana desde la última ves que salió con Terry y pensó, que no tenía porque molestarse con el si solamente eran amigos, no entendía porque sentía celos, pero sabía que los tenía.
- Nana hoy hablaré con Terry no tengo porque estar enojada con el solo somos amigos y nada más.
- Estás segura hija, dijo preocupada su nana.
- si nanita.
- no vayas a entregar tu corazón hija, un hombre así no te conviene.
- tranquila Nana, pensaba Candy, que ya era muy tarde, ya estaba enamorada o por lo menos eso pensaba ella.
- salió a bailar e inicio la presentación de su nuevo baile en lo que ella tomaba posición detrás del escenario.
- Hoy amigos el escenario arderá, hoy Lady Esmeralda será puro fuego.
- Las cortinas se movieron y ella con un candelabro en la cabeza y en posición recostada inicio  a contorsionar su cuerpo con movimientos tan sensuales que los hombres todos tragaban en seco y abrían la boca, un guapo inglés solo miraba al rededor y se consumía en celos, el sabía que la necesitaba que era algo más que gustar, se sabía enamorado y por eso estaba cambiando, maldecia en su interior cada uno de los errores que había cometido y sobre todo el haberse casado con Susana, no sabía que hacer, pero tampoco quería estar lejos de su amor, de Lady Esmeralda, de Candy.
Por eso luchaba por su perdón, uno que añoraba.
Esa mujer era puro fuego y el se quería quemar.
Así que observando el baile y el coqueteo que está tenía con el público, luego bajo del escenario y por primera ves en una semana lo veía fijamente y le bailaba a el, cuando se dió la vuelta Candy y batió sus caderas, Terry la quería tomar y llevársela, pero sabía que no era correcto, pues la sabía inocente y buena, era justamente esa mezcla de inocencia y pasión que lo volvían loco.
Pidió permiso para entrar en su camerino cuando ella salió del escenario, en ese mome le pidieron a la nana Camilla que fuera a brindar entrevista, lo que hizo tapada con un pequeño turbante, así se dirigían a la prensa, tanto Lady Esmeralda, como Camilla, cuando ingreso Candy le dijeron y ella fue a colocarse detrás del vestidor, para poderse quitar la ropa y limpiarse.

Cuando Terry estaba entrando, Candy se estaba terminando de colocar una crema por todo el cuerpo, el la miro a través del espejo y Terry no se pudo contener más, cerró la puerta con llave, Mientras se acercaba a Candy como un felino detrás de su presa y claro el era un león y Candy un tierno corderito, la tomo y le beso sus labios con desesperación, Candy no atino a reaccionar y se dejó envolver por la emoción que sentía ante su primer beso, luego el aprovecho para llevarla a un sillón y recortarla, logrando abrir su bata y tocarle todo su cuerpo, Candy estaba rendida, no podía controlar la cantidad de emociones que sentía ardía todo su cuerpo y sentía mariposas revolotear en su estómago, Terry aprovecho ese momento para bajar y degustar de sus pechos, tocó sus piernas e introdujo un dedo en su chorreante intimidad, cuando había decidido hacerla su mujer, tocaron la puerta.
- mi niña ya estoy aquí, abre, Terry le pedía que no lo hiciera. Sin embargo ella en ese momento salió de su nube y apenada le pidió a Terry que se ocultara en su armario, el lo hiso y su nana entro, sospechando que había pasado algo pues su niña estaba completamente ruborizada por lo que había pasado.
- saldrás hoy hija, le pregunto su nana.
- no nanita más me gustaría invitar a Terry a cenar con nosotros para pedirle disculpas por mi conducta, le iré a dejar una nota, Candy asintió y cuando miro que su nana daba media vuelta, saco a Terry quien la esperaba tomándola entre sus brazos y dando un ardiente y desesperado beso, ella se lo devolvió pero le pidió que corriera a su mesa, este a regañadientes accedio y salió corriendo pero feliz pues se sabía correspondido, disfrutaría al máximo la oportunidad que se le presentaba, oportunidad que no dudaría mucho pues sus pecados, sus errores lo alcanzaría quitando la felicidad efímera que había logrado con la mujer de sus sueños, sin embargo disfruta mientras durará.

Así fue como paso una bella y tranquila noche lleno de alegría y calma después de tanto tiempo sentís paz, pues por primera ves la gente era cálida con el, sin importar quién era.

En Brasil los negocios estaba seguro Albert estaban a punto de terminar y lograr irse era ya apremiante así que solo esperaba estar más firme en los negocios para viajar a América y al fin liberarse de esa mujer tan necia e insistente.

Mientras tanto Candy ya había iniciado una relación de noviazgo con Terry, pero tenía cuidado de no entregar su cuerpo a un que ya tenía su corazón, sin embargo en sueños le aparecía aquella mirada azul cielo y escuchaba aquella bella vos qué no paraba de llamarla, con desesperación.
Las desiciones que tomaron tendrán consecuencias pero a un no sabían ¿Cuáles serían?

Continuara........