~ 열네 ~

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Había una rubia que hervía de rabia.

El articulo junto a la foto del beso entre Charlotte y Jungkook la tenía vuelta loca. Y no era para menos, pues Jungkook durante su relación jamás la había besado en público y ahora con Charlotte era todo lo contrario.

— ¿Qué te tiene tan molesta? Si sigues frunciendo el ceño así te harás vieja más rápido.

La rubia le gruñó a su amiga.

— Mira esta maldita basura — prácticamente le arrojó el periódico y la otra tuvo que atajarlo en el aire.

Lalisa Manoban, Kang Seulgi y Eric Nam leyeron el periódico que les lanzó la rubia.

— Bueno, ¿y qué? — comentó el chico sin entender realmente cuál era el problema.

— ¿Cómo que "y qué"?

El chico rodó los ojos.

— Es que no entiendo porqué te molestas. Tú fuiste la que lo engañaste y lo dejaste, ¿no? Entonces, ¿Cuál es el problema?

La rubia no supo que decir. Sabía que sus amigos tenían razón pero no podía evitar sentir una gran molestia en el pecho cuando los veía juntos; Jungkook jamás había sido así de cariñoso con ella... aunque bueno, no era que ella hiciera un máximo esfuerzo por cambiar eso, de hecho le daba igual lo que Jeon hiciera con su vida... hasta que le terminó. Cuando terminaron ella esperaba verlo rogándole por volver, siendo miserable y suplicando por el amor que ella nunca le había dado pero nada fue así porque Jungkook había aceptado la separación como si no le importara nada, como si en realidad hubiera estado esperando por eso, y eso le jodía el ego. Por eso había empezado a hostigarlo, a burlarse de él e inventar falsos rumores sobre su vida... y todo eso sólo para sentirse mejor consigo misma después de que a Jeon Jungkook no le había importado un pepino la ruptura ni el hecho de que ella lo hubiese engañado ni nada.

Había sido imposible descifrar si alguna emoción había cruzado por la cara de Jungkook cuando ella le dijo que quería romper porque no quería estar con un raro perdedor y que lo había engañado porque ni siquiera era bueno en la cama; el azabache no había tenido reacción alguna, sólo se le había quedado ahí parado frente a su puerta con un ramo de rosas mirándola  con su rostro inexpresivo y sin soltar palabra alguna así que cuando Cindy terminó de despreciarlo mediante palabras él sólo le entregó las rosas, se encogió de hombros y dio la vuelta para irse dejándola molesta y con el orgullo herido.

Pero su hostigamiento no había servido de nada cuando meses después de haber terminado, Jungkook tenía novia nueva y con la cual se veía más feliz que nunca. Otra apuñalada a su orgullo femenino. Jungkook ni siquiera la besaba en público... o bueno, no después de que ella le hiciera toda una escena en pleno restaurante cuando él había intentado besarla, pero eso no había sido su culpa, había sido culpa de Jungkook por querer besarla sabiendo que estaba molesta con él por no haberle comprado aquel hermoso conjunto Chanel. Sí, quizás sonaba como una interesada pero poco le importaba en estos momentos.  Tenía un novio rico así que, ¿Por qué no podía comprarle todo lo que ella quería?

Para Cindy, Jeon Jungkook era un egoísta a pesar de que sabía que ella no había sido la novia estrella pero eso era algo que jamás admitiría. No le gustaba resaltar sus fallas.

Ignorando las palabras de su amigo, gruñó molesta cuando vio a Charlotte Clark entrar por la puerta de la cafetería. Nunca le había caído bien esa chica, la odiaba y ahora mucho más porque sentía que le había robado a Jungkook cuando en realidad no era así.

— Uy. Como detesto a esa tipa.

Sus amigos la miraron con expresiones aburridas. Ninguno entendía y tampoco querían entender que era lo que le pasaba a su rubia amiga, y siendo sinceros, ya estaban hartos de la actitud obsesiva y tóxica que tenía ella con Jeon Jungkook, sin embargo no decían nada... o al menos las chicas no decían nada porque Eric sí que lo hacía.

Jeong | JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora