❝〔 cinderella 〕❞ ; satzu

|| 08.

- ¿Se conocen? - Dahyun, la niña timida que tiene un crush patético en su roommate (a juzgar por lo que le cuenta Momo), se ve completamente sacada de onda por su anuncio.

Sana, sonriente y victoriosa, se apresura a aclarar:

- Por supuesto.

- No.

Tal parece que han hablado al mismo tiempo. Tzuyu usa un tono tan serio que es incapaz no reírse de nuevo.

Podrá lucir indiferente, o hasta cierto punto irritada, pero Tzuyu no puede mentirle a sus sentidos sobrenaturales. Si afina su oído, Sana puede escuchar alto y claro los latidos apresurados de su corazón.

Está nerviosa. Hace mucho que Sana no saborea su nerviosismo, al fin y al cabo Tzuyu dejó de tenerle miedo hace mucho tiempo atrás.

Sin embargo, esta pequeña probadita de los nervios de Tzuyu no es suficiente. Si no puede deleitarse ahora con su dulce sangre, de seguro que lo hará con su vergüenza.

- Sí nos conocemos, pero entiendo que a Tzuyu le dé penita admitirlo - musita, divertida. Nota como la menor la fulmina con la mirada sin tener una pizca de disimulo. Aww, que tierna, ¿en serio cree que la intimida? - Después de todo, nos conocimos en Tinder.

Dahyun mira a su amiga con los ojos abiertos como platos, y antes de que su cazadora favorita pueda desmentirlo o hacer una excusa, Sana añade:

- Sí... Pero no dejemos que eso amargue nuestra relación. Tengamos un nuevo comienzo, ¿sí? Puedo olvidar que me rompiste el corazón. Hagamos como si no me hubieras bloqueado apenas lograste tu cometido de ilusionarme para acostarte conmigo.

La nena castaña, después de su confesión, luce como si estuviera al borde de un paro cardíaco. Momo ríe, creyendo conocer lo descarada que es y Tzuyu, dulce e inocente Tzuyu, maldice en voz baja y se sonroja por la insinuación, quizás, confirmando sin querer el falso comentario de Sana.

- Bueno, esto es incómodo - se carcajea Momo.

- Sí, sí... ¿Sana? - La más alta de las presentes se levanta súbitamente de su asiento, arrastrando su silla en el suelo con brusqueza. La mirada que le dedica denota una deliciosa mezcla de frustración y enojo. - Quiero disculparme apropiadamente por lo que te hice, ¿puedes seguirme un momento? - Sana encuentra divertido que sus palabras no coincidan con su tono, agresivo y mordaz.

Riendo, porque siempre le es tan divertido molestar a la cazadora, Sana asiente con la cabeza. - Claro. - contesta, antes de que Tzuyu la tome por la muñeca y la comience a arrastrar lejos de ahí.