Capítulo 15

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30 de Junio, 2023. Apartamento de Anya, Centro de Manhattan, Nueva York. 19:30 horas.

Pasó un mes desde que Bellamy me había dado las llaves de mi nuevo apartamento, pero hasta ese entonces no había podido mudarme o no había querido.

Por más que el apartamento de Anya fuera una mugre, me había acostumbrado a estar todo ese tiempo con ella.

—¿Qué haces?—me preguntó parada en el marco de la puerta de la habitación, mientras armaba mi maleta— ¿Griffin te pidió casamiento e irás a vivir con ella?

—No—respondí riendo y guardando mis camisetas—. Bellamy me ha dado un apartamento hace un mes...

—¿Hace un mes?

—Ajam.

—¿Y recién ahora te vas?

—Pues... No quería separarme de ti.

—Oh estúpida—me dijo entrando y ayudándome con la maleta— ¿Qué tan lejos está de aquí?

—Es en Brooklyn.

—¿Estarás a una hora?

—Pero en auto no vas a notarlo... Es como si fueras al desguace—le dije y ella me miró seria—. Anya, sé cuidarme.

—Lo sé, pero no quiero que nada te suceda.

—No me pasará nada.

Se acercó a mí y sin que lo esperara, me abrazó fuerte acariciándome los cabellos.

—Promete llamarme cada tanto.

—Lo haré, además nos seguiremos viendo. Viajaré hacia lo de Bellamy o a lo de Clarke cuando nos necesiten.

—Harás que llore... Será mejor que te ayude a terminar—sonreí y ambas seguimos guardando mis cosas, pero mientras me encontraba de espaldas a ella, Anya abrió mis cajones encontrándose con algo—. Vaya ¿qué tenemos aquí? ¿Te has portado mal últimamente hermana?

—¿Qué?—pregunté y al darme vuelta vi que tenía las esposas que me había dado Clarke en sus manos—. Oh mierda... ¡Anya! Deja eso donde estaba.

—Sólo si me dices de dónde las has sacado.

—No—le dije intentando quitárselas pero tenía brazos largos y mientras mantenía las esposas en alto, me tapó el rostro con su mano libre deteniéndome—. Oye... Dámelas.

—Dime para qué las usas.

—No te diré.

—¿Te gusta el sexo sadomasoquista?

—Dámelas—volví a decirle quitándoselas de las manos y guardándolas en la maleta.

—Le preguntaré a Clarke...—dijo cuando el timbre sonó y ambas nos miramos, ella sonriendo y yo con terror. Se asomó por el pasillo y gritó— ¿Quién es?

Clarke.

—Já. Justo a tiempo, preguntémosle a Griffin qué sabe de eso.

—No te atrevas... Anya—le dije tomándola por el brazo, pero se zafó de mi agarre. Corrí hasta treparme a su espalda deteniéndola y comenzó a caminar pero le trabé las piernas con las mías—. Ugh... Detente.

—¡Suéltame! ¡Déjame abrir!

—¡No!

¿Chicas?—nos preguntó Clarke desde afuera— ¿Están bien?

—¡Sí!—gritamos las dos y Anya giró retrocediendo, golpeándome fuerte contra la puerta— ¡Ah!

—¡Suéltame idiota!

True Lies - Clexa AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora