Parte 5/1

1.3K 119 28
                                    

Al final decidí que lo mejor sería llamar a Lucas por ayuda. El apareció diez minutos después en la puerta, acompañado de una muchacha muy alta y de profundos ojos castaños. Se presento a sí misma como Yuqi y congeniamos rápidamente. Ella y Lucas eran novios desde hace un par de meses; se habían conocido gracias a Ten, ya que él y Yuqi eran algo así como primos segundos—O algo parecido—.

Mientras Lucas seguía arriba junto con Ten, nosotras seguíamos hablando de cosas sin sentido alguno. Realmente podría asegurar que ella y Yiren se llevarían demasiado bien. Tendríamos que averiguarlo pronto.

—Así que dime, ¿qué se siente ser la niñera de tiempo completo de Ten, eh? —Pregunto ella muy interesada. Yo forcé una sonrisa.

—No soy su niñera de tiempo completo —Respondí, aunque no era del todo cierto— Solo estoy con él hasta la tarde... ¡Oye! ¡Yo no soy su niñera! -Yuqi comenzó a reír. Era una risa melodiosa, que solamente me hacía sentir más culpable por mentirle. Yo era la niñera de Ten, nos gustara o no.

—Vale, perdón —Dijo levantando los brazos levemente, en son de paz. Sonreí— No quise decir eso, solo, uh. ¿No te desespera? —«Totalmente» pensé.

- ¿A qué te refieres? —Pregunte inocente.

—Bueno, lo conozco desde toda mi vida, y él es una persona muy difícil. Sabes, antes del accidente, él solía ir a todos lados, acompañado por mujeres y fumando y tomando sin control.

—¿Qué? ¿El fuma y toma? ¿Y es un mujeriego?

—Ya no. Bueno, no lo sé —Confesó ella— Antes lo hacía, pero ahora... Uh no, no lo creo. Él ha cambiado bastante. Aunque sigue siendo el mismo arrogante de siempre.

—Te entiendo —Le dije, brindándole una sonrisa— Yuqi abrió la boca para decir algo más, pero rápidamente fue interrumpida por los dos chicos, que iban bajando las escaleras.

Ten apoyado en Lucas, por supuesto. La visión me recordó a los bailes de graduaciones, en los cuales los chicos esperan a las chicas a que salgan de sus cuartos y bajen de las escaleras para ponerles la flor en la mano. Solo que aquí era al revés, chicos por chicas y sin ninguna flor. Lucas tomo la mano de Yuqi y le besó lentamente. Yo me sonroje.

—Oh, vamos. No le den un espectáculo a Sook, ¿está bien? Lucas, puedo oír tus gemidos a kilómetros —Ten dijo con tono irritado. Yuqi lo golpeó en el hombro y Lucas rodó los ojos. Me aclaré la garganta.

—Bueno, se hace tarde, ¿no? Deberíamos de irnos ya —Dije para romper la tensión imaginaria que se acumulaba alrededor de mí. Los tres asintieron y en poco tiempo nos vimos apretujados los cuatro en el viejo auto descapotado de Lucas. Me senté en el asiento trasero junto con Ten, con nuestras rodillas y hombros rozándose. Me sentía nerviosa.

— ¿A dónde vamos, Lucas? —Pregunto Ten mientras rascaba su cabeza y miraba hacia el cielo. Literalmente.

—Ya verás —Dijo él, visiblemente animado y sin percatarse del silencio incomodo que creo con su comentario. Yuqi lo fulminó con la mirada y de pronto pareció reaccionar. -Oh, Ten, perdón yo...

—Ahórratelo —Contesto Ten con tono frío y molesto. Vaya, y este parecía ser un día muy bueno.

Media hora después, Lucas aparcó el coche en frente de un gran parque verde. Era uno de esos días en los que la feria ambulante andaba por aquí, así que decidimos aprovecharlo al máximo. Yuqi se llevó a Ten a comprar un par de entradas, mientras yo me quedé con Lucas a solas.

—Ten está muy molesto conmigo, ¿verdad? —Preguntó, con una especie de curiosidad y tristeza en su tono de voz.

—Sinceramente, no lo sé. A penas lo he tratado tres días. Uno, si cuentas que desde hoy nos empezamos a llevar "bien" —Le dije, intentando suavizar las cosas. Rápidamente añadí— Además, no creo que este enfadado contigo. Es decir, eres tú su mejor amigo, ¿no? —Él asintió— Desde que lo conocí se ha comportado así conmigo, así que no te preocupes.

—Oh claro, me di cuenta el día en que nos conocimos los tres —Él dijo. Imágenes de su trasero mojado sobre mi cara cobraron vida. Oh Dios No.

—Sí. Como olvidarlo —Levanté una ceja hacía él y solo se carcajeó. Después dijo algo que no entendí.

—Oye, qué te parece si yo me voy con Yuqi por ahí y tú te quedas con Ten, ¿eh? Pareja y pareja. Aprovechemos que Ten no quiere hablar conmigo —Me dio un ligero codazo y me sonrojé.

—Como quieras —Le dije, brindándole una sonrisa. —Bien, entonces, vayamos a buscarlos, ¿vale?

—Vale.

Durante el día ocurrieron muchísimas cosas. Después de haber encontrado a Yuqi y Ten que se encontraban comiendo manzanas de caramelo, nos dividimos en dos grupos. Lucas tomo a Yuqi de la mano y acordamos vernos debajo de la rueda de la fortuna a las ocho y media de la noche. Ellos dos se alejaron y yo me quede sola con Ten.

—Y bien —Le dije a él mientras rascaba mi brazo izquierdo y movía mi pie derecho contra el suelo— ¿A dónde vamos primero?

— ¿Y yo que sé? —Dijo Ten, irritado— De hecho, ni siquiera sé qué rayos hago aquí. Todos ustedes tuvieron esa pésima idea de traerme a este lugar y ¿para qué? No me trae ningún chiste subirme a todos esos juegos si no los puedo ver —Mientras decía esto, ocultaba sus ojos con unas gafas negras y metía las palmas de las manos en los vaqueros.

—No empieces, Ten—Le conteste mientras lo jalaba del brazo, con dirección hacía los juegos mecánicos— El día de hoy te divertirás, quieras o no.

Caminamos sin rumbo durante un par de minutos. Debatía contra mí misma sobre a cuál juego o qué podríamos ir a hacer él y yo. No es que hubiera muchas opciones, pero tenía miedo de provocar el enojo de Ten. Otra vez.

—Mira, ¿qué te parece si probamos con la casa de los espantos primero? —El bufó y después sacudió la cabeza— ¡Vamos! ¿O acaso tienes miedo? —Le di un ligero codazo en las costillas y él sonrió sarcástico.

Holaaa, ¿¿como estáis??

Espero que os esté gustando porque la verdad que a mi me encanta, me imagino a Ten así serio pero que después es un amor.

Blind Heart [Ten]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora