Filthy; draco malfoy [traducción]

wine glass

lucille granger

Durante los ultimos días, los cinco hemos estado bebiendo y disfrutando de las vacacciones de invierno en la Mansión Malfoy. Desde mi llegada, no ha habido un día en el que Draco y yo pudiéramos mantener nuestras manos quietas, literalmente.

Los cinco habíamos terminado de nadar en la maldita piscina techada de Draco. Y vaya que nos moríamos de hambre.

Envolví mi cuerpo en una toalla blanca y me contoneé dentro de la cocina mientras todos me seguían.

—¡Por la barba de Merlín! —exclamó Narcissa—. ¡Todos estan goteando sobre el suelo! —Ella miró a nuestros pies mientras el agua goteaba sobre el suelo de mármol—. Corran arriba y séquense, ahora —dijo severamente.

—Lo siento, mamá —soltó Lorenzo, corriendo escaleras arriba, chocando con Blaise para evitar meterse en problemas.

Mientras caminaba con Onyx y Draco, fui interrumpida.

—Lucille, ¿podrías quedarte aquí un segundo? —preguntó Narcissa. Detuve mis pasos y tragué saliva. Joder. Me dí la vuelta y la miré mientras sonreía.

—¿Qué necesitas de ella? —espetó Draco.

—Draco, ve a secarte. Estás goteando sobre mi piso pulido. Sólo voy a pedirle que me ayude con algo en la cocina, eso es todo. —Miré a Draco mientras la frustración se plasmaba en su rostro.

Le di una mirada tranquilizadora. —Ve, Draco. Estaré bien.

Resopló y se dió la vuelta, alejándose con sus chirriantes pies mojados sobre el suelo de mármol.

Volví a mirar a Narcissa, temblando por el aire frío que comenzaba a sentir en mi cuerpo empapado.

—Entonces, Lucille —dijo—. Draco olvidó informarme que tenías... padres muggles. —Mi garganta se secó—. Por lo general, nunca dejaría entrar a algún... sangre sucia a mi casa, especialmente por mi esposo. —Continuó Narcissa, acercándose poco a poco a mí—. Pero por alguna extraña razón, no sé cómo, has logrado hacerlo... más feliz.

Mordí mi labio nerviosamente.

—Y no hay otra cosa que quiera en el mundo más que tener a mi propia sangre, bueno... feliz —dijo Narcissa suavemente—. Supongo que sabes que es un mortífago, ¿correcto?

Contuve el aliento en estado de shock. —Um. S–si —respondí.

—¡Oh! ¿Así que conoces la tarea que el asignó el Señor Oscuro?

—Si...

—¿Y cómo te sientes al respecto?

Sus ojos ardían a través de mí. Supongo que Draco sacó eso de ella. —Um, asustada por él, supongo. —Quiero decir, ¿Que más se suponía que debía de sentir al respecto?

—No asustada de él, ¿verdad?

—No. No tengo miedo de él.

—Genial. —Resopló, caminando de regreso a la barra de la cocina, agarrando una botella de vino—. Porqué Lucille, realmente me encantaría que estuvieras aquí durante este momento tan... perjudicial.

Tragué saliva. ¡Por supuesto que voy a estar cerca! No soy una tonta.

—Por supuesto, Señora Malfoy —respondí.

Ella sonrió y sacó dos copas de vino para después servir el licor en ambas.

—Aquí tienes. —Hizo un gesto, extendiendo su brazo para darme la copa mientras me sonreía.