Gracias a los jefes de ambas organizaciones, el Soukoku y el Shin Soukoku deben vivir en la misma casa.
Está historia es escrita con el propósito de entretener y divertir a los lectores.
Si no les gusta la historia o algo que hagan los personajes se...
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Los dos presentes en el lugar no sabían si llamar a la policía, a la ambulancia o a un psiquiatra, es que la escena que observan no es nada común y menos que lo haga una persona que sólo demuestra ira o que te quiere matar. Ver como esa persona tiene una pequeña sonrisa mientras prepara el desayuno y lo que da más miedo, es que lo haga cantando.
ㅡ ¿Ves lo que yo veo?. ㅡ pregunto Dazai.
ㅡ Si ve a Akutagawa preparando el desayuno con una media sonrisa y cantando, entonces si.ㅡ el albino en verdad que tenía miedo.
ㅡ Creo que Akutagawa ya encontró la forma de matarte. ㅡopinó el suicida.
ㅡ Llame a la policía. ㅡpidió el albino.
Los observadores se asustaron al darse cuenta que Akutagawa volteo a verlos, el azabache se acercó a ellos manteniendo su sonrisa. Akutagawa agarro la mano de Dazai y lo sentó en la silla, hizo los mismo con Atsushi, Chuuya ya estaba en la mesa leyendo su periódico. El mafioso menor le dio a cada uno un desayuno latinoamericano, aparte de que fue más fácil, les entrego un plato con huevo y hotdogs. Ambos Agentes estaban pensando que Akutagawa los quiere envenenar por eso tiene esa sonrisa, tienen miedo por sus vidas, bueno, solo Atsushi.
ㅡ Chuuya-san. ㅡllamó Atsushi ㅡ ¿Porqué Akutagawa esta feliz?.
ㅡ Es bueno que sonría, tiene una bonita sonrisa. - evadió el tema halagando al menor.
ㅡ Enano, ¿la comida esta envenenada?. ㅡ la verdad a Dazai no le importaba, así moría más rápido.
ㅡ No.
Los cuatro chicos terminaron de desayunar y dieron las gracias, el azabache sentó a cada uno en el sillón mientras su sonrisa se ensancha, el mafioso menor corre a su habitación y baja cuatro regalos grandes, se acerca a cada uno y se los entrega. El trío lo observó confundido pero sonrieron igualmente mientras agradecen. Chuuya es el primero en abrir su regalo encontrándose con lo mejor del mundo con un Aurumred que es demasiado caro, el segundo en abrir su regalo es Dazai quien se encontró con vendas, un sake y una cuerda muy resistente para su suicidio y, el tercer en abrir su regalo es Atsushi quien lloro al ver un montón de dinero.
ㅡ ¡Gracias Akutagawa!. ㅡgrito Atsushi abrazando al azabache.
ㅡ Aja, no me toques. ㅡrespondió alejando al albino.
ㅡAku - el pelirrojo lo observó serio - será mejor que hables.
ㅡ Está bien. ㅡcontesto agarrando el cuarto regaloㅡMiren.
Akutagawa abrió el regalo y de este saco un gatito chiquito color gris, lo acurrucó entre sus brazos y observó a los presentes.
ㅡ Quiero su permiso para tener un gato. ㅡcomentó el azabache con seriedad.
Los tres se observaron entre sí, y Chuuya hablo.
ㅡ No era necesario que nos pidas permiso. ㅡ aclaró el mafioso sonríendo.
