Luego de la situacion del lago no dije nada más a Die, me acosté a dormir y asumo que el igual. Soñe con Noah, no lo buscaba y creo que el tampoco a mi, pero nuestros sueños de alguna manera de conectaron. Algo no anda bien con él.
Suspiro viendo por la ventana, Die trabaja en las plantas del jardín sin camisa, es un poco flacucho y pálido, me río recordando lo de cruda amiga. El es mi crudo amigo. Amigo, no quiero nada más que su amistad, lo de ls noche anterior fue un error enorme, pensé que podría vengarme de Noah y su amiguita del baile, pero no, ahora solo tengo un Die, que saldrá herido y es lo que más me molesta. A veces actúo sin pensarlo, podría excusarme con la típica frase de que soy una adolescente, pero la verdad es que eso es estúpido, hasta para mí.
Suspiro y bajo las escaleras, tarde o temprano tendré que hablar con él y aclarar todo, no quiero herirlo más, pero tampoco puedo mentirle diciendo que podríamos intentarlo, aúnque no esté con Noah, aún estoy enamorada de él.
Me aclaro la garganta al estar cerca de él, sus mirada se posa en mi y su sonrisa se amplia, al ver mi cara se disipa un poco.
—¿Estoy en problemas? —pregunta.
—No, Die yo...
Se levanta hasta quedar de pie frente a mi, pasa un brazo por su frente secando el sudor y alejando los mechones rubios que caen. Me interrumpe, cuando intento hablar de nuevo.
—Zoey, sé lo que quieres decir, ayer solo fue un juego —suspira—. Es agradable saber que puedo gustarte aunque sea un poco, al punto de que pidieras que te besara, aunque estábamos ebrios —puntualiza—. Y aunque me gustas, no voy a pedirte más oportunidades, valgo mucho ¿Sabes? Y si tú no sientes la misma atracción que siento yo por ti, está bien, no puedo obligarte a estar conmigo.
Intento hablar de nuevo pero me interrumpe, otra vez.
—Pero si puedo obligarte a ir a buscar al idiota ese que te tiene tan enamorada, eres mi amiga, más allá de todo lo que pueda sentír y te quiero ver feliz.
Le sonrío y abrazo, me arrepiento inmediatamente cundo mi rostro queda pegado a su torso húmedo de sudor, el se rie y me pega más cerca. Esto es lo único que puedo hacer, ofrecer mi amistad a este maravilloso chico. Sé que conseguirá a alguien más que aprecie todo lo que es.
Mi estómago suena, él me guía a la cocina como si fuera una niña, me sienta en una silla y me hace esperar a que esté listo mi desayuno, parece estar tranquilo y de acuerdo con lo que no dije. Nunca imaginé que me encontraría con chicos emocionalmente tan maduros, Noah, nunca me ha presionado y siempre está allí apoyándome en todo... Soy tan idiota ¿Por qué me estoy rindiendo y no estoy luchando por mi novio? Me he convertido en una cobarde.
—No te auto castigues, sé lo que estás pensando. Uno: ella te hizo ver algo que te lastimo en un momento dónde estabas vulnerable, dos: nuestro beso no significó nada al menos para ti, tres: si no luchas por él es porque tienes miedo y esa no es la Zoey que conozco.
—¿Cómo supiste lo que estaba pensando?
—A veces hablas sola en voz alta, además, tienes una cara de depresión horrible.
Se ríe de mí y me sirve el chocolate helado junto con mis huevos y tostadas. No sabía que hablo sola, debo medir lo que hago. Die me deja sola para continuar con su trabajo de jardinería, parece que eso lo relaja y así canaliza sus sentimientos.
Es hora de que vaya al otro lado y hablé con la mujer que está en la otra cabaña, sé que se sorprenderá al verme o quizás no, pero es importante para llegar a Novakwies, sin ella no podré abrir la puerta del lago.
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Mentiras
FantasiLuego de volver a la tierra la vida de Zoey no volvió a ser igual, aunque intentó ir a clases, las discusiones con su madre son cada vez más fuertes por su relación con Noah y sin mentir, aún sospecha que falta algo por saber. Las cosas aunque mal...