Protector [Stony]

D I E C I S É I S

Alaska seguía siendo frío, a Tony le encantaba el frío de niño, salía a hacer muñecos de nieve y a fingir que estos eran monstruos del espacio que derrotaba con bolas de nieve, ahora solo salía a la nieve para ver si era posible enfermarse y no tener que asistir a la fiesta de su papá.

—Levantese de ahí, no tiene ni una semana deade que llegó y ya le hizo lo suficiente difícil la vida a su padre— Jarvis le dijo, Tony ignoró sus palabras.

Tony empezó a mover sus manos y piernas, logrando hacer un ángel de nieve.

—Ponle cuernos a ese ángel para que se vea que lo hiciste tú — la voz de una chica se escuchó, Tony sonrió al saber a quién pertenecía.

Levantó su cabeza y parados en la puerta junto a Jarvis estaban la amada Pepper Potts y su mejor amigo Bruce Banner. Anthony se levantó de la nieve y corrió a abrazar a ambos. Bruce se removió en su lugar e hizo sus lentes más atrás, apegandolos al puente de su nariz, Tony recordó que al otro Omega no le gustaba el contacto físico, pero lo dejó pasar.

—Gracias por estar aquí, estaba a 20 minutos de volverme loco— agradeció, separándose del abrazo para hablarles de frente.

—Tony, tú ya estás loco—le recordó Bruce, con una pequeña y dulce voz.

Tony era un Omega precioso, demasiado hermoso, tenía una actitud un poco-mucho ególatra y altanera, pero cara y cuerpo eran excepcionales. Él en sí era demasiado sexy. En cambio Bruce era lindo por naturaleza, desde su cara redonda y pelo ruloso, era unos centímetros más pequeño que Tony, era muy amable y se ponía nerviso con facilidad, odiaba el contacto físico pero los lobos mayores de Alaska tenían el afán de apretar sus mejillas con dulzura, Bruce era muy bonito, pero no mostraba emociones que no fueran seriedad, sorpresa o incomodidad.

Pepper era una beta muy amable y dulce, un opuesto a Tony, ella era maternal por instinto, era tan comprensiva y graciosa, podía caerle bien a cualquier persona. Y al referirme a cualquier persona era Tony.

—Nos dijo Jarvis que estarás en la fiesta de bienvenida que tu padre te está prepsrando— Pepper se atrevió a hablar sobre eso, y Tony hizo una mueca de desagrado—. Anthony Stark, tu tienes que ir a esa fiesta— lo regañó cruzándose de brazos.

Anthony se dio la vuelta ignorando los llamados de Jarvis y Pepper, se quitó la camisa y los pantalones para después dejarse caer en la nieve y hacer angelitos, esperando a enfermarse. Bruce sonrió levemente y corrió hacia su amigo, empezando a jugar en la nieve divertido casi como un niño pequeño.

[...]

Steve subió al auto, Howard Stark lo estaba invitando ese día a él y Bucky a su casa, en su despacho tenía varios documentos de importancia para completar la misión en la cual estaban implicados. Llegaron a la mansión en puro silencio, bajaron del auto serios y de repente se escuchò un grito, el de una mujer, los tres Alfas se alertaron y corrieron donde se escuchaba, el patio trasero. Al llegar habían 3 Omegas semi-desnudos y una Beta que se estaba quitando la ropa.

—No grites, Pepper.

—Es que está muy frio.

Bruce Banner, Maria Stark, Pepper Potts y Anthony Stark parecían disfrutar de la nieve como si fuera un día caluroso. Howard frunció el ceño y corrió hacia su Omega, Maria, quién reía divertida a cada cosa que Tony decía.

—Amor mío, estás enferma, no deberías de estar afuera y menos con poca ropa— Howard habló preocupado, quitándose su saco y cubriendo a su esposa, miró a un lado y Tony sonreía altanero, portando solo un bóxer. Howard hizo una mueca y observó a la puerta de la casa, Steve y James parecían sonrojados y apartando la mirada de la escena—. Anthony, ponte algo, hay Alfas aquí.

—¿Por qué traerías Alfas a mi casa?— preguntó divertido, diciendo que la mansión era suya—. Ellos deben ser inteligentes y respetuosos— las palabras de Tony eran demasiado filosas.

Bruce se cubrió con sus propias manos y corrió a dentro de la casa, miró a James con un sonrojo violento de vergüenza.

James lo miró y apartó su vista de nuevo—. Oh, lo siento— se disculpó, quitándose de la entrada para que el adolescente pudiera pasar. Pepper le siguió, ya que su ropa al igual que la de Bruce se encontraba adentro.

Tony rodó los ojos y recogió su camisa blanca de botones, empezando a ponérsela, después le siguió con su pantalón algo aburrido.

—Dios, Howard, eres tan aburrido— se quejó el Omega castaño, caminó en medio de los Alfas y chocó sus hombros con los de ellos, mostrando cero respeto.

Howard soltó un gruñido levantándose pero María le tomó de la mano algo divertida.

—Se le pasará, ya verás, estar aquí en Alaska le hará bien, Howard— dijo con una sonrisa. Howard sonrió y cargó a la mujer, besando su frente y llevándola adentro.

Steve se había quedado callado en todo eso, Tony no era el mismo que antes efectivamente, desde su personalidad tan dulce y amable, ahora solo era sarcástico y orgulloso. En cambio Bucky había estado rígido, en su vida había tenido intimidad con un Omega o Beta, ni siquiera había visto a alguien más desnudo que no fueran tontos Alfas en las duchas compartidas.

N/A: Fueron 6-7 meses, jaja, si me mamé. En fin,como disculpa actualizaré de nuevo pasado mañana o mañana, a ver qué pasa primero. Equis somos chavos.