✖ En sus ojos vi mas que un te quiero, vi a alguien que quería amar de verdad ✖
Lo observaba desde la distancia, haciéndome múltiples preguntas ya que, jamás lo había visto socializar con los estudiantes de la universidad, ni siquiera había esc...
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sᴏʀᴘʀᴇsᴀᴇɴʟᴀᴄᴀsᴀᴅᴇʟᴏsMɪɴ.
[◆◈◇]
K. Young Soo
Treinta, cuarenta y cincuenta minutos le tomó a Jung Kook despegarse de su nueva amiguita, mientras más lo esperábamos se nos hacía tarde para arreglar todo para nuestro amigo gruñón y dormilón, así que la mejor solución fue decirle a los chicos que se adelantaran.
Lo miré desde mi auto, recostada de el con los brazos cruzados, analizando toda la situación tan sospechosa y repentina de aquella niña, sabía que tramaba algo, pero no podía deducir que era.
¿Y si ella solo quería ser amable con él? No, eso era imposible... Ella era una chica detestable, cínica e inestable sentimentalmente.
Y aquel sentimiento desconocido me invadió el cuerpo entero, pero no podía oponerme ante esa amistad, ¿Quién era yo para hacerlo? Por fin, él comenzaba a tener amigos, repentinos, sin embargo los tenía... El hecho de que comenzara a formar su propio círculo amistoso y sólo pensarlo, me hacía sentir como innecesaria, como aquel papel que puedes arrugar y botar... Hecha a un lado.
—¿Podría tardarse más? —hablé sin siquiera percatarme de que lo había hecho.
—¿Problemas con tu príncipe azul? —la voz repentina de Jimin hizo sobresaltarme, mirando hacia donde provino la voz con cautela—. Tranquila, no pienso hacerte nada que no quieras —me guiñó un ojo divertido.
—No, no tenemos problemas y tampoco pienso hacer algo contigo —rodé los ojos y seguí analizando cada acción que tenía aquella niña, ya que estaba muy pegada a él.
—Ya veo... Tranquila, es cuestión de tiempo —su voz nuevamente invadiendo mis oídos.
—¿De qué hablas, Jimin? —alcé una ceja y lo miré, ya se me hacía costumbre caer bajo y más ante él, por sus provocaciones y malas jugadas.
—Que hasta el hombre más fuerte cae por esa niña —su sonrisa sin una pizca de gracia se asomó en su rostro, ¿Qué era ésto? ¿Una venganza tal vez?
—¡Adiós, Kook! —escuché la desagradable voz de la niña, Siyeon y desvié mi rostro del pesado de Jimin.
Ella le sonreía como una niña enamorada y para colmo, Jung Kook le devolvió el gesto de la misma forma.
—Pienso que es hora de que te vayas, no quiero que Jung Kook me vea junto a tí —solté junto a una bocanada de aire, tenía muchos sentimientos encontrados y odiaba sentirme así.
