Los problemas parecían ir desvaneciendose con el paso del tiempo para YeonJun.
Ahora finalmente podía decirse fácilmente que comenzaba a superar todo y que la sonrisa que les dirigía era verdadera.
Ya no tenía porque ocultarse.
Era de noche en la antigua casa de YeonJun, su padre llevaba el tercer licor abierto y comenzaba a afectarle.
El único sonido en el lugar era su pesada respiración. Los recuerdos lo invadían y la soledad se volvía su única compañía por el resto de su miserable vida.
Aún le costaba creer que en cuestión de minutos había perdido a lo que una vez fue; su familia.
El enojo seguía siendo parte de él, el arrepentimiento también, pero sobre todo la culpabilidad era algo que nunca se iba a ir de él. Y él lo sabía y lo entendía, sabía que fue su culpa hacer caer la hermosa familia que una vez tuvo.
¿Este era realmente su karma? Porque obviamente todos sabemos que él realmente lo merecía. Incluso él lo reconocía. Se merecía eso y mucho más.
El enojo y la culpabilidad lo estaban comiendo vivo, hizo tronar su copa entre sus manos, causando al instante una profunda herida y un charco enorme en la mesa, pero eso no era suficiente cuando lanzó las botellas vacías de vidrio hacia alguna parte de lo que una vez fue; el comedor.
...
Era un nuevo día, y al parecer, sería feliz, los rayos del sol lo indicaban y la presencia del verano se sentía. Todo era agradable. Demasiado.
El bullicio de los estudiantes se escuchaba a través de la llamada que la linda chica llamada Arin contestaba, al otro lado de la línea, una voz varonil contestó.
—¿Cómo te va en tu nuevo colegio? ¿Es agradable? —preguntaba ella.
—Eso aún no te lo puedo contestar. Empiezo mañana y de seguro será... Agradable y cómodo —había contestado el chico.
—Leí los mil mensajes que me mandaste. Fácil podía confirmar que era una biblia lo que me habías mandado —ella rió, al instante, YeonJun solo sonrió.
—Querías saber toda la historia... En fin, mi mamá decidió que era bueno que yo regresará a entrenar y también que me inscribiera en el equipo de mi nuevo colegio —contó.
—Eso es demasiado bueno, me alegro demasiado por ti. Pero..., ¿tienes en cuenta que me lastimaste?
—Lo sé y creeme que me arrepiento. Fuiste demasiado para un imbecil como yo.
—Bien. Tratare de verte pronto —dijo ella, viendo cómo un chico de agradable sonrisa se acercaba a ella—. Por cierto, ¿crees que soy hermosa?
YeonJun rió mientras seguía caminando.
—Realmente lo eres. Demasiado. ¿Quién te ha dicho lo contrario?
—Oh, nadie realmente... Nos vemos luego, cuando acordamos.
Después de eso, Arin se perdió en la llamada y tuvo que colgar debido a su nueva cita quien la esperaba para ir juntos a almorzar.
...
Días más tarde, Kai y Arin estaba juntos, sentados viendo las vías del tren. Era un hermoso lugar poco transitado a excepción de las personas que aún disfrutaban de tomar el tren.
ESTÁS LEYENDO
Bon Bon Chocolat ➸ YeonKai
Fanfic«Tus labios son como mi caramelo favorito, imposible dejar de consumirlos»