Una Luz En Mi Oscuridad (SIN CORREGIR)

Capítulo 33

Seguía sin poder reaccionar no sé cuanto tiempo estuve así  hasta que Erick tomó de mis hombros y me sacudió un poco, mientras me hablaba, su voz me hizo responder y lo vi a los ojos confundida. 

— ¿Estás bien? — pregunto, se nota preocupado. 

Yo asiento con mi cabeza lentamente, sin dejar de verle. 

— M-mi hermano... — tartamudeo.  

Él sin decir nada más, rápidamente me toma en sus brazos para abrazarme, se encuentra arrodillado con una pierna, y la otra doblada frente a mí, ya que sigo sentada en la cama. Apoyo mi cabeza en su hombro y comienzo a sollozar mientras salen lágrimas tras más lágrimas de mis ojos. Me siento fatal, casi a morir. 

Después de llorar por minutos, me separo de él para poder tomar mi celular, recordando que había dejado a Olivia en la llamada, pero noto que ya ha colgado.  
 

— Yo terminé de hablar con ella. — responde Erick 

Alzo mi cabeza hacia ver el techo, inhalo y saco el aire. Pero ahora sí reaccionó y de golpe me pongo de pie, para ir en busca de mi maleta, Erick me sigue por detrás. 

— Me tengo que ir — hablo desesperadamente mientras coloque todo lo mío en la maleta.  

Erick se pone frente de mi camino y toma de nuevo mis hombros haciéndome detener. 

— Espera — dice — Tranquilízate primero. 

— ¡Cómo me puedes decir eso! — grito molesta — ¡No puedo tranquilizarme! Cuando se que mi.. pequeño... esta… gravemente en un hospital. — mustio lo último.  

— Lo sé, te entiendo — toma de mis brazos — Pero tienes que esperar, mañana saldremos muy temprano.  
 

No sé si pueda lograr conciliar el sueño, no creo qué pueda pegar un ojo en toda la noche. Asiento para aceptar lo que dice, y tiene razón, lo que necesito es tranquilizarme y más que nada para saber tomar el asunto, así alterada no sabré que hacer. Y Olivia y mis hermanos me necesitan emocionalmente estable. 
 

                          ♡♡♡♡♡

Al día siguiente, a primera hora al amanecer lo primero que hacemos es salir de la ciudad para regresar a casa. El regreso se me hace eterno. Ya lo que más deseaba en ese momento era estar con mi hermano. 

En toda la noche no logré poder dormir, y era de esperarse ya que mi cabeza no dejaba de pensar en Ray, y en como la estaban pasando mi par de mostrillos. Estaba sumamente preocupada por los tres, porque se que ellos también la están pasado mal. Al igual que mi angelito.  

En cuanto llegamos a la ciudad, Erick no espero más y pidió a su chófer que nos llevara al hospital donde se encontraba mi hermano. Olivia le había dado toda la información del lugar y lo poco que sabía del estado de mi pequeño.  

Baje rápidamente del coche sin esperar nada, ni a nadie, pero Erick alcanza mi paso llegando hasta a mí y tomando de mi mano, para luego seguir caminando. Lo peor de todo es como si el cielo sintiera mi dolor y mi nostalgia, esta gris y nublado, en cualquier momento puede llover, y eso me hizo temer más. Ya que es el tipo de clima que detesto. 

Ya tomados de las manos entramos al hospital. Llegando hasta un módulo de recepción nos detenemos para preguntar por mi hermano, le damos los datos completos a la chica, mientras ella teclea el nombre en su computadora y uno minuto después, me dice el piso y el número donde se encuentra Ray. "Planta tres, habitación 313", después de agradecerle salgo casi corriendo de ahí, jalando a Erick de la mano.