- ¡¿Por qué me odias?!- le gritó y en seguida soy metida por el en un salón que inmediatamente reconozco, es el salón de ensayos - ¿Que te molesta de mí? ¿Ah? - me acorrala frente a él. Acerca su cuerpo al mío y su respiración está demasiado cerca d...
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Lo veo salir del coche con calma, este maldito hijo de puta intenta jugar conmigo, pero se ha equivocado de jugador. Lo hare lamentar todo lo que ha hecho y si la ha tocado... se puede declarar hombre muerto. Se dirige hasta mi con paso calmado y una estúpida sonrisa arrogante.
— Aquí me tienes, dime ¿Qué se te ofrece? — intento contenerme, pero este tipo me lo hace difícil. En este preciso momento deseo tanto golpearlo hasta sacar la mierda de él.
— No te hagas el gracioso Novikov, entrégame a Átala — comienza reírse — ¿Qué te da risa estúpido? — me acerco a el, hasta quedar completamente a mi alcance y así poderlo golpear.
— Tú, tú me das risa ¿por que creerías que yo la tengo? ¿acaso no estaba con ustedes en el teatro? — lo tomo del suéter.
— Entrégamela y saldrás sin un rasguño de esto-— vuelve a reír — ¡¿De que te ríes?! ¡Hablo en serio, cabrón! ¡¿donde esta?! — bramo.
— Tus amenazas siempre han sido palabras al viento, nunca representan algo ¿Sabes por que? por que nunca has tenido el valor para enfrentar lo malo, al contrario siempre has sido una pieza mas del ajedrez de tu padre, el cual mueve a su antojo — me empuja para que lo suelte y lo hago — Dime un cosa ¿que se siente cuando te quitan lo mas preciado, lo que mas te importa? —
— ¿De que hablas Novikov? — no entiendo nada de lo que este tipo esta hablando.
— ¿Acaso ya no recuerdas a leila? — niego — ¡Claro que no! ¿sabes por que? ¡Por que solo fue un juego para ti! ¡Me la quitaste para joderme! — se acerca y me tira un puñetazo en la cara, el cual no logro esquivar — ¡Dime que se siente! ¡¿eres miserable por que no la tienes?! — me levanto y le suelto un golpe.
— ¡CALLATE! — le grito cuando me le voy encima. Comienzo a golpearlo sin piedad.
— ¡¡Andrya!! ¡Sueltalo! — Escucho a Vladimir gritandome, más no le hago caso.
— ¡Me la quitaste! ¡Eres un mal nacido! ¡Igual a tu padre! ¡Me la quitaste! — grita mientras me golpea, da un giro y queda sobre mi — Me la quitaste — se queda pasmado, ya no me golpea, solo... Solo se quedó pasmado.
¿Que mierda?
— ¿Alexey? — lo quito de encima mio — ¿Estas bien? — el niega. Aquel enfurecido y lastimado hombre, se ha convertido en un niño asustado y lastimado.
Con mi orgullo de lado, me siento y le ayudó a hacerlo, el niega varias veces y sin mirarme me señala el coche de donde salió. Le pido con un movimiento de cabeza a Vladimir que vaya a ver, me hace caso y va hasta el coche.
No se que hacer, ambos no pedimos nacer en este horrible mundo, no somos igual a ellos. A ambos nos ha tocado vivir la misma mierda pesada y traumante, los dos hemos perdido, odiado y amado a alguien, no somos los culpables. En conclusión, estamos jodidos.
