Quinze

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"Ambos somos iguales, por ello te aferras a negarlo"


Se encontraba en su cama, sus ojos cerrados mientras poco a poco comenzaba a caer en un sueño profundo, su respiración era lenta, delicada, su pecho subía y bajaba de manera rítmica, sus labios ligeramente entre abiertos su brazo aún envuelto en yeso reposaba sobre un cojín para de esta manera evitar que se lesionara por si solo.

Se encontraba en un restaurante, solo, como habitualmente iba a comer, no le gustaba que la gente hablará mientras comía, a parte él era bastante paciente a la hora de comer (por no decir que comía extremadamente lento), su platillo por fin llego. Un filete, ensalada, puré de patatas y fideo, una copa de vino tinto fue servida frente a él y por cortesía de parte de la casa le dejaron la botella allí mismo. Tomo el cuchillo y el tenedor, clavo el pequeño objeto en el grueso pedazo de carne y lo corto de manera lenta, viendo como el humo de la comida aún caliente comenzaba a emanar de este, inundando sus fosas nasales haciendo que comenzará a salivar ansioso por probar tal manjar.

Corto el pedazo de carne, viendo como este aún se notaba ligeramente rojizo del centro, pues siempre pedía este a termino medio, llevo el trozo a su boca, saboreando lo jugoso de la carne, saboreando este sin la mínima especia agregada, cerro sus ojos disfrutando el comer de tal platillo, cuando hubo terminado de tragar su alimento, llevo la copa sus labios disfrutando del suave y apagado sabor del líquido, alzó su vista y noto que de pronto todo el lugar se encontraba solo, en silencio, con ligera curiosidad y comenzando a sentirse ansioso miro sus al rededores no había nada, ni nadie, bajo la vista a su plato y esta vez la carne se encontraba a término blue, corto la carne notando como esta se encontraba casi cruda, mordió su labio levemente, titubeando sin probarla o no, observo a sus alrededores, viendo como no había nadie, suspiro y probo aquel trozo de carne, era absolutamente jugoso mucho más que el termino medio, su boca se vio inundaba por un exquisito sabor, la carne era... Perfecta, su piel se erizo, mientras el disfrutaba de aquel delicioso sabor, volvió a bajar la mirada, y esta vez... La carne se encontraba cruda, la sangre emanaba del trozo manchando el plato, no había nada más que un trozo de carne crudo frente a él, y una copa, una copa con un espeso líquido carmesí en ella, Sehun corto el trozo, viendo como más sangre era expulsada del trozo, trago pesado, y comió aquel pedazo de carne, el sabor era dulce, dulce y a la vez ácido, la textura era suave, muy suave, era extraño, pero la carne parecía una combinación de ternero y puerco, era exquisita, deliciosa, nada similar a lo que hubiera probado, tomó la copa de cristal llevándola a sus labios sintiendo el sabor del líquido carmesí que en esta reposaba, el sabor dulce y metálico a la vez inundo su lengua, la combinación de sabores lo hizo sentir extasiado, levanto la mirada y frente a él se encontraba aquel hombre castaño de hermosos ojos color esmeralda.

-¿Le gusto el platillo doctor Oh?, ¿recuerda lo que le dije?, los muslos son la mejor parte, ¿cierto? -Chanyeol se encontraba frente a él, una pierna sobre la otra, viéndolo con una sonrisa, burlándose de la expresión que se encontraba en su rostro en esos momentos.

-No sé de que me habla señor Park -joder claro que lo sabía, sabía exactamente de que estaba hablando pero su orgullo era mayor, limpio su boca con una servilleta, dejando a los costados del plato los cubiertos, viendo fijamente al mayor.

-Admítalo doctor Oh, somos iguales.

-No, no lo somos -negó de inmediato aquello, sabiendo, muy en su interior, que se estaba negando a si mismo, que se estaba reprimiendo, pues queria volver a probar aquel sabor, quería volver a sentir aquella textura.

-Lo somos, y muy en su interior lo sabe por ello lo niega cada vez que se lo digo.

-No sabes de que hablas Chanyeol.

-Lo sé, ambos lo sabemos. Sé que sientes algo por mi, sé que te mueres por estar conmigo. Y lo más importante, sé que te mueres por ser igual a mi.

Chanyeol se acerco a él tomándolo del mentón besando sus labios con brusquedad mientras él se sometía dejándose llevar, siguiendo aquel ritmo, dejando que el mayor lo tomará.

Se despertó de golpe y un quejido de dolor escapo de sus labios, pues una punzada de dolor recorrió todo su brazo por la brusquedad del movimiento, se sentó en la cama, pensando en todo lo que había sucedido en su sueño, suspiro pesadamente y se puso de pie para tomar su abrigo.

-¿Saldrás? -pregunto su hermana desde la mesa de la cocina donde se encontraba tecleando en su computador.

-Iré a comprar algo para comer, ¿necesitas algo?

-Solo tráeme algo dulce, ten cuidado con tu brazo.

-Lo tendré -y con aquella frase salió del departamento, necesitaba aire, necesitaba pensar.

"Sé que te mueres por ser igual a mi..." Eso había dicho Chanyeol, pero la pregunta era... ¿eso era cierto?, ¿sentía eso...?

Flesh And Blood (ChanHun)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora