Capítulo 19

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Capítulo 19.


MÍA'S POV


Convencer a un montón de adolescentes ebrios y cachondos a jugar verdad o reto había sido la parte más fácil del plan. No todos habían estado dispuestos a jugar porque un poco menos de la mitad de la fiesta estaba dentro de la alberca y otro poco menos estaba en el sótano drogándose. Pero éramos una cantidad considerable de personas en la sala principal de la casa de Josh, y bastaría para que el juego fuera interesante y cumpliera con el objetivo.

Había algo que comenzaba a hacerme mucho eco en cuanto a mí y a Alexis, y eran esas ganas casi imperiosas de mantenerla a mi lado casi en todo momento. Trataba de repetirme a mí misma que no era más que esa novedad y entusiasmo que sientes cuando haces una amiga o un amigo nuevo con el que te llevas estupendamente bien porque es muy genial pasar tiempo con él o ella. Pero mi yo interno no podía evitar cuestionarse aquello.

Cuando el juego comenzó, ya todos -menos Kiara por supuesto- sabían qué decir cuando la botella la señalara a ella o a Gabe y alguno escogiera reto. Incluso Alexis ya había hablado unos momentos antes con Gabe para que estuviera al tanto de nuestro plan, que en realidad había sido mío y mi amiga no dejaba de llevarse el crédito por él.

Conforme el juego avanzaba más gente se iba uniendo, y comenzaba a ser más difícil que la botella señalara a alguno de los dos objetivos.

—¿Algún plan para no fracasar en esto, genio? —murmuró Alexis cerca de mi oido para que nadie escuchara.

—Rezar —alcé ambas cejas divertida haciéndola reír.

—Es que no me creo nuestra jodida mala suerte —murmuró entre divertida y frustrada— por qué cojones de pronto todos decidieron venir a jugar.

—Porque todos están cachondos, cielo —le dije en un susurro.

—Me incluyo —confesó.

—¿Y qué tienes en mente? —pregunté un poco curiosa, como ya era costumbre en mí con todo lo que tenía que ver con esta chica.

—Escucha, si la botella me señala aceptaré el reto —dijo— haz que me encierre con Roney en alguna habitación. Aunque no te toque a ti ponerme el castigo, los demás te harán segunda.

—No puedes hacer eso —sostuve muy apacible bajo su mirada— tú me invitaste y sería descortés dejarme tirada por irte a follar. Eso no es de amigas.

Alexis sonrió negando tomando de su vaso. —Qué linda hija de puta eres, lo sabías? —dijo con una aspereza repentina en su voz que sonó muy sensual.

Las risas y el alboroto nos regresaron al juego inmediatamente. Entonces nos dimos cuenta que la botella había señalado a Alexis, quien rápidamente aceptó un reto. Y cuando iba a ser buena amiga y cumplirle su capricho con Veronica, un chico se me adelantó, era quien tenía que ponerle el castigo.

Pero entonces a quién señaló después me hizo tragar en seco.

—Las reto a enrollarse aquí mismo —dijo con una sonrisa que me provocó mucho disgusto.

Alexis me miró un poco paralizada sin saber muy bien qué hacer. Mi estómago dio un vuelco, y supuse que me había caído mal la cena antes de venir a la fiesta.

—¡Cinco minutos en el paraíso! —gritó Gabe varias veces empezando una oleada de gritos diciéndo lo mismo. Nos había salvado.

Aún un poco perplejas nos paramos del lugar y seguí a Alexis al armario que estaba justo al lado del baño donde ya varias parejas se habían metido para cumplir con los retos cuando les tocaba lo mismo que a nosotras.

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