•Capitulo 59 ~Caer En Lo Ridículo~

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-Eres muy ridícula, ya deja de arrastrarte, supera todo y no te vuelvas a atravesar por mi vista. - le dije a Amanda mientras la seguridad del hotel se la llevaba, literalmente cargando.
Que estúpido drama armó en solo 5 min.
Y un drama mejor le armaré a Tony por haberle dicho dónde estaba, y es que me siguió hasta el hotel y hasta mi número de habitación descubrió.
Admiro el talento de estas personas por fastidiar, son las mejores en lo que hacen.
¡Que fastidio!
•Calle
Esta mañana ha sido tan extraña.
Primero recibí un mensaje de Vale accediendo a hablar conmigo, quedamos en una café y mientras la esperaba, llamó mi papá, después mi mamá, ambos preguntando mi situación con Poché, con lágrimas en los ojos les expliqué un poco de lo que ha pasado y vienen en camino a Bogotá, Juli les dijo, lo sé porque fueron directo al grano.
No la culpo, sabe lo triste que he estado y un poco de la cura, serían abrazos de mis padres a los que amo tanto.
Vale llegó y ambas hablamos, le expliqué todo y no muy convencida, se levantó dijo que iba al baño y justo cuando regresaba llegó Amanda y el lugar se volvió un campo de guerra, Amanda dijo que Poché estaba en Medellín y que la había visto entrando a un hotel junto con Tony y que Tony le presumió la gran noche que tuvieron juntos, Vale al escuchar eso, obvio se puso a la defensiva por su hermana, peleándose con Amanda y obvio yo la apoyé.
Espero que lo único cierto de todo esto solo sea el hecho de que si está en Medellín.
Después de salir con rabia del café Vale recibió una llamada de Poché y después de esto Vale solo dijo que Amanda tuvo una fuerte con Poché en el hotel en qué se hospeda en Medellín, estoy muy confundida y tengo una serie de preguntas.
Quisiera correr ahora mismo hacia Medellín, pero no, esperaré a que todo fluya como tenga que fluir.
Me llegó la noche y mis padres me avisaron que habían llegado a la ciudad, fui por ellos al aeropuerto.
- Qué raro verlos juntos de nuevo, y más raro aún, que viajarán juntos en un avión. – dije tratando de disimular mi tristeza.
-Mientras se trate de nuestras hijas, uniremos fuerzas para soportar estar en un agujero de 1 metro por 1 metro. – bromeó mi papá y los tres reímos.
Nos dirigimos a mi apartamento, pero a mí papá se le hizo buena idea pedir comida para llevar e ir a nuestra antigua casa, desde que regresé a Colombia no he ni pensado en ir a aquella casa donde crecí y dónde pasé mis mejores años.
Al llegar, me dio una nostalgia inexplicable. Lo primero que hice al entrar fue correr a mi cuarto, me daba curiosidad ver qué se había quedado, ya que cuando me fui para Los Ángeles mi papá mandó la mayoría de mis cosas. Y lo primero que me topé al entrar fue una fotografía justo arriba de la cama, pegada a la pared de Poché y yo. Me congelé.
- ¿Lo recuerdas? – dijo mi papá tocándome el hombro.
- Si. – le respondí en seco, mi voz se iba a romper si decía una palabra más.
-La guardé y la pegué justo ahí, ya que ese fue el primer día que Poché piso esta casa, aquel día sus risas podían escucharse hasta el otro lado de la calle, cuando subí ambas lloraban de la risa, las vi tan felices que tomé esa foto para recordarlas justo así, tan pequeñas, tan felices. – me dijo mientras mis lágrimas fluían.
No dije nada, solo tomé la foto y bajamos a la sala.
Les puse el contexto de todo lo que está pasando, les expliqué todo.
Mi papá se llevaba las manos a la cabeza, mientras que mi mamá se llevaba sus manos a la boca, y pude entender aún más que la situación estaba muy grave y que difícilmente tendría algún arreglo.
Tenía el corazón en mil pedazos, mis padres no me decían nada, sé que no esperaba que me dieran una solución, pero deseaba que me dijeran algo, lo que fuera.
Después de un gran rato de silencio, llegó Juli, y después Mary con Antonio y después llegó Vale.
- ¡Amanda es ridícula! - dijo Vale justo cuando entró
- Eso ya lo sabemos. – le respondió Mary.
-Poché me había dicho que estaba loca, pero no me imaginé que tocara tan fondo, en la llamada que tuve con Poché hace un rato me dijo que Amanda había estado en su habitación y que discutieron y que tuvo que llamar a seguridad ya que todo se estaba poniendo mal y recibió amenazas de muerte de parte de Amanda, que estúpida es Amanda. – dijo y en las últimas tres palabras rio sarcásticamente.
-No es causa de risa esas amenazas, la creo capaz después de cuando le abrió la cabeza en el baño del bar. – dije y todo me dio vueltas al decir eso, justo frente a Vale y frente a mis papás. Claro que ellos no lo sabían, ni Juli lo sabía, era algo que solo Antonio, Mary y yo sabíamos además de Poché y Amanda claro.
- ¿Qué? – dijeron, Juli, Vale y mis papás en coro.
Con esto solo alteré y preocupé a todos. Tengo la boca más floja del mundo.
Vale salió corriendo de la casa y nadie pudo alcanzarla, me siento mal por decirlo y preocupar a todos aún más.
Me fui a mi apartamento, con lo último que solté empeoré a todo y preocupé más a Vale. No quiero estar sola en mi apartamento, así que decidí salir a dar una vuelta por las calles hermosas de Bogotá, me encontraba entre los rascacielos de la ciudad, cuando sentí un gran jalón en mi brazo.
-Solo te digo que nuestra cuenta aún no está cerrada Daniela, me robaste a Poché y la quiero de vuelta. – dijo Javier, tomándome muy fuerte del brazo.
No supe que decir, solo me solté de su agarré y caminé con miedo.
Volví a sentir lo mismo, un gran Jalón en el mismo brazo, pero ahora está más fuerte, a un grado de que me estaba lastimando y entonces….
Grité.

A Un Milímetro De TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora