Buses

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—Ja, hasta que se le hizo a Jackson —Clarisse negó con la cabeza —Todos los malditos años aquí y se esperan hasta estar terminando todo —Se lleno la boca con comida.

—Si, algunos son unos vagos que se esperan hasta el último momento para hacer todo —Chris miraba su plato moviendo su comida con el tenedor de un lado a otro.

—Si, cómo algunos que conozco, pero me imagino que es porque tienen miedo de los resultados —Susurro Frank a lado de Chris, este casi da un salto de un metro en su asiento y lo vio con horror, el asiático sólo sonrió.

—Frank —Habló Clarisse con fastidio pasándose una servilleta por la cara —No hagas eso —

—Sólo acelero un proceso —Se encogió de hombros, ella le dio una mirada extrañada y luego miró a Chris.

—¿Vamos a salir o no? Si el tarado de Jackson puede tener un verano con su novio al menos, yo también puedo —Ella se lo quedo mirando, Chris casi se muere atorado con lo que había logrado meterse en la boca.

—Vaya —Fue todo lo que dijo Frank mientras golpeaba ligeramente la espalda de Chris —Casi matas a tu nuevo novio y eso que recién empiezan —Le paso un poco de jugo, el castaño lo bebió con desesperación.

—Aceptó ¿Dónde firmó?

—Tu de verdad estás loco —Frank negó con la cabeza mientras Clarisse sonreía con suficiencia.

—Eres mi novio y es todo lo que se, no sé que se hace a continuación —Clarisse frunció mucho el ceño mirando su comida.

—Yo sé más o menos, te puedo enseñar —Chris se levanto y se fue a sentar a su lado para terminar su almuerzo.

—Ahora si que la tendrás difícil cabeza de inodoro —Se reía entre dientes Connor viendo la mala cara de Travis, habían visto como de la nada ahora su hermano tenía una novia, una que fácilmente los podía quebrar como un palito —Y aún falta que lleguemos al campamento, donde tiene la facilidad de ocultar tu cuerpo —

—No eres de ayuda Connor —Gruñó el otro y Connor sólo siguió riendo. —Encontraré la forma de hacerlo pagar y a ella también —

—Eso va a ser tan real como los monstruos de la mitología griega —Rodó los ojos, el otro se puso bien la gorra que ahora cargaba pues el otro sombrero lo había perdido en la turba del gimnasio.

—Ya vas a ver, me encargaré de él y su nueva novia —Sentenció y un rayo se escuchó de afuera.

—Parece que si lloverá al final de todo —Hazel miraba la ventana de la cafetería una tormenta se avecinaba, los nubarrones se hacían cada vez más negros.

—Estaremos bien Haz —Trato de calmar Bianca sentándose frente a ella con una bandeja.

—¿No deberías sentarte con los maestros? —Dijo Nico jugando con su comida.

—Son aburridos, sólo hablan de trabajo y de juegos de ancianos como pinacle —Sacudió su cabeza —Prefiero estar con ustedes —

—Yo preferiría...

—Nico —Le cortó Hazel mirándole fijamente, el resoplo y no dijo nada más, ellas se enfrascaron en una conversación sobre la naturaleza y como arreglarian sus habitaciones en la casa que compartirían Bianca y Nico.

—Vamos, no será tan malo que vivas con Bianca —Decía a su lado Will, Nico le dio una mirada de muerte, él sólo le sonrío —Tendrás unos meses para acostumbrarte —

—Sólo será una molestia, aunque papá diga que el estará ahí con nosotros cada semana, se que no será así. Será como cuando mamá murió, otra vez sólo Bianca y yo, de vez en cuando Hazel y nada más —Comentó por lo bajo moviendo su comida de un lado a otro.

Un gran viaje [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora