Capitulo 4

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'Deberías saber que eres su peor pesadilla favorita.'

-Yoon, corre!

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-Yoon, corre!

Mis ojos se abrieron de golpe, luego tomando una respiración profunda y sentándome en mi cama. Mi corazón latía con rapidez en mi pecho, mientras el frío sudor hacía que mi cabello desordenado se pegara a mi piel. Temblaba y me aferraba a las sábanas de mi cama como si mi vida dependiese de ello. Las imágenes de mi pesadilla aún eran increíblemente vívidas en mi cabeza y desesperadamente necesitaba un poco de aire fresco.

Salí fuera de mi habitación y por un momento olvidé que no estaba en el hogar del detective Sangyeon o en prision. Me encontraba en el tercer piso del club y estaba completamente sola. En momentos como estos, a veces, extrañaba la prision. En ese tiempo cuando me despertaba de mis pesadillas, al menos siempre tenía alguien con quien hablar, aún si era solo un increíblemente aburrido guardia en medio de su turno de noche. En cambio ahora, aquí estaba, la nueva miembro de la mafia y en verdad nadie confiaba en mi. Era cierto que solo era mi segunda noche en este lugar, pero buscaba siempre excusas para llamar a el detective charlatan, quien de alguna forma siempre estaba listo para oír mis quejas.

Hice mi camino a través del pasillo que llevaba a una terraza abierta en el centro del tercer piso y salí afuera. Habían unas sillas, plantas y cuerdas que las personas utilizan para secar su ropa lavada. La terraza era algo oscura y sombría en medio de la noche, pero rápidamente pude notar dos figuras que estaban sentadas en un lado de un escalón.

El primero era Félix. Sus piernas estaban estiradas frente a él, y estaba inclinado hacia atrás utilizando uno de sus brazos para poder sostenerse. El observaba hacia el cielo y había un cigarro colgando entre sus labios. La segunda persona que había allí, era una mujer que no reconocí. Tenía cabello corto y rubio, hermosos ojos, piel y rasgos muy elegantes. Ella abrazaba sus piernas y su barbilla estaba descansando en sus rodillas. Apenas me recibió con sus ojos antes de qué mirara de nuevo hacia abajo, siendo imposible no notar la tristeza en su rostro.

Félix giró su cabeza hacia mí y tomo una calada de su cigarro.-Sin poder dormir, Yoko?

La cabeza de la mujer se volvió a levantar cuando oyó a Félix recibirme y me observo con una expresión de asombro en su rostro.-Oi los rumores, pero no crei que fueran ciertos. En verdad tienes una compañera ahora Félix?

El motociclista frunció su ceño en desapruebo y casi aplasta el cigarro entre sus dedos.-Por qué todos piensan que somos compañeros?!

No esperaba que alguien más estuviera en la terraza, ya que era alrededor de las cuatro en la madrugada, pero ahora salí de mi pequeño trance y sonreí hacia la mujer.-Es verdad, el gran Lix aquí es mi mentor. Yo soy su mentoreada.

Las cejas de la hermosa mujer se fruncieron con confusión.-Mentoleada?

Los ojos de Félix brillaron con asombro cuando vio mi sonrisa desvanecerse, colocando su cigarro en un cenicero y levantándose. El estiro sus brazos antes de chasquear sus dedos y señalarme.-Ya que estás despierta, más vale comenzar con el trabajo. Has sido aceptada en la mafia, pero eso no significa que puedes dormir hasta el mediodía. Tienes que ganarte tu dinero.

ADRENALINA - LEE FÉLIX SKZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora