Este martes desperté de buen humor porque anoche, Alec me había invitado a visitarlo a la florería. Así que llegué a la escuela segura de que ni siquiera los engreídos estudiantes de Hawtz podrían arruinarme el día.
-Buenos días, amiga. -Saludé de excelente humor al sentarme frente a Dylan que había estado en su pupitre dibujando algo en su cuaderno de arte.
-Buenos días, amiga. -Repitió seria, quizás desanimada. Ni siquiera me había visto por seguir dibujando.
-¿está todo bien? -Pregunté. Asintió aun dibujando. Me asomé a su cuaderno, dibujaba un retrato del Grinch. Me vi curiosa.
-Sí...todo bien...-Murmuró, pero ella sonaba desanimada.
-¿qué pasa, Dylan? -Insistí desanimada por su tristeza. Dio un suspiro y me miró. Hizo una mueca de lastima.
-¿te enteraste? -Preguntó.
-¿de qué?
-De...Ángelo, irá al baile de invierno con Luciana Valverde. -Me dijo ella haciéndome sentir algo pesado y oscuro cayendo sobre mí, era culpa.
-Ah... ¿de verdad...? -Pregunté intentando fingir sorpresa. Dylan hizo una mueca y sacó su celular buscando algo.
-Apenas lo vi esta mañana. -Dijo ella en voz baja repitiendo la historia de Instagram de Lucy. Al parecer anoche había ido con Ángelo a cenar, ella le había tomado una foto y había puesto "La mejor pareja de baile" con algunos emojis navideños. Resoplé de mala gana.
-¿Enserio te entristece tanto que vaya con Lucy? -Pregunté aun culpable por haber sido yo quien le insistía a Ángelo.
-No creo que Lucy sea el problema. -Admitió ella volviendo a apagar su celular. -Supongo que me entristecería con cualquier chica que fuera. Y ya sé que es obvio que si no era Lucy sería...Chrissy Reyes, o Eloína Pardo, sólo me hubiera gustado no enterarme y ya. -Dijo ella.
-¿Por qué sigues a Lucy en instagram? -Pregunté con algo de disgusto. Ella suspiró.
-No lo sé, sigo a casi todos los de la escuela. -Admitió ella.
-Excepto a Ángelo. -Le recordé. Se encogió de hombros.
-Me da vergüenza. -Admitió en voz baja. Hice una mueca. -Sólo...me olvidaré de todo eso ¿sí? Ni siquiera sé por qué me afecta. -Dijo ella intentando armarse de valor. Le sonreí y asentí. Ella dio un suspiro y arrancó su aun no terminado dibujo.
-¡¿Qué haces?! -Pregunté confundida porque lo hacía bola en su mano. Ella negó. Se puso en pie y fue a tirar la bola de papel. Hice una mueca mejor sin quejarme para dejar que ella sola encontrara la forma de sentirse más cómoda. Se volvió a sentar en su lugar tras del mío.
-Deberíamos salir este fin de semana. -Me propuso ella supongo que para distraerse. Hice una mueca sabiendo que Axel llegaba el viernes y seguro querría que pasáramos juntos el fin de semana.
-Yo...te aviso. -Asentí. Me vio y asintió también, aun seria. Varios chicos entraron al salón de clases riendo, al parecer era Ángelo que había entrado corriendo, a pesar de su elegante uniforme de saco y pantalón, iba botando un balón de basquetbol con tres chicos tras de él riendo y jugando, intentándole quitar el balón.
-¡Muy lento! -Se burló Ángelo al lograr seguirse moviendo con el balón botando frente a él. Lo atrapó en sus manos y fingió que lo lanzaría a una canasta invisible, pero al notarme viéndolo, sonrió y me lanzó el balón a mí haciéndome estremecer. Lo atrapé torpemente entre ambos brazos, pero al menos lo atrapé.
-¡Y anota! -Exclamó él antes de fingir una celebración que todos en el salón hicieron también aplaudiéndole e incluso repitiendo su nombre como si fueran espectadores en un juego importante.
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Deseos de Cristal (#3 Saga Cristal)
Teen FictionCon Axel en la universidad, Emi se da el tiempo de conocer a sus compañeros de Hawtz, y se hace más cercana a Alec y su familia. Axel regresa para las fechas festivas. Se esforzará por recuperar el interés de Emi, pero quizás ya es tarde.