Capítulo 25. Las invitaciones al baile.

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Emi. -Escuché a Richard llamándome seriamente cuando entraba al comedor. Todos lo habíamos estado esperando sólo a él para la cena.

-¿sí? -Pregunté curiosa por su tono enojado, casi nunca se molestaba conmigo.

-La profesora Hulberts mandó las calificaciones de los pasados exámenes. -Me dijo él. Hice una pequeña mueca.

-¿y eso? -Preguntó mi tía Belle curiosa aun sentada en su lugar en el comedor.

-Emi tiene una B negativa en el último parcial. -Dijo él por lo que me mordí el labio inferior.

-¿Emi? -Me llamó Samuel confundido. Lo miré. Parecía desconcertado, yo siempre tenía calificaciones perfectas.

-Lo siento...-Fue lo único que se me ocurrió decir por su decepcionada expresión.

-¿Por qué te sacaste la B? Siempre te va bien en la escuela. -Preguntó Samuel confundido.

-La señora Hulberts es muy dura, no soy buena en las matemáticas. Es muy difícil. -Me justificaba yo.

-Pues tienes que mejorar ese promedio, Emi ¿te va a gustar ver puras As en tu boleta y una B arruinando tu excelencia? -Me preguntó Richard.

-No...-Susurré negando un poco.

-¿sabes lo que pasa si te sacas una B como calificación final del semestre verdad? -Me preguntó él.

-Mi...mi historial quedará feo. -Supuse que se refería a eso.

-No, no te graduarás de blanco. -Me recordó él. La verdad era que nunca me lo había propuesto, pero sí había creído que me graduaría en los colores de excelencia porque siempre me iba bien.

-No es tan importante. -Opinó la tía Lina confundida por la tensión entre nosotros.

-Es lo que tus padres querrían. -Me dijo Richard haciéndome estremecer.

-Rick...-Se quejó Samuel en voz baja quizás notando lo sentimental que me habían puesto las palabras de Richard.

-Y también mi padre, Emi. Tu educación siempre fue lo más importante para el abuelo, incluso prefirió educarte él mismo para asegurarse de que no fallaras en el ámbito académico. -Me recordaba Richard. Asentí un poco, con los dientes apretados para comprimir mi llanto. Él también dio un serio asentimiento.

-Necesitas una A en tu examen final para subir tu promedio y no tener esa B ensuciando tu historial. -Me advirtió. Y yo quería quejarme, preguntarle como haría para subir mi calificación si ya me había esforzado todo lo posible en el pasado examen y aun así había tenido una B negativa, pero no me salían las palabras, quizás lloraría antes de lograrme expresar, por lo que sólo le asentí un poco.

-Bueno. -Llamó la tía Belle con autoridad, por lo que todos la miramos. Ella me vio a mí. -No hay razón para desconfiar de Emi, sé que lo hará bien. -Aseguró ella tranquilamente. Le asentí un poco sintiendo ahora el compromiso más grande por no quererla defraudar a ella que confiaba en mí. -Ahora vamos a cenar, ya es tarde. -Dijo, por lo que iniciamos con la comida. Yo ya no dije una palabra en toda la cena.

El jueves en la escuela, le conté a Dylan sobre ese problema que ahora tenía. A ella le estaba yendo igual que a mí en la clase, por lo que dijo que no me podía ayudar mucho, pero que podíamos estudiar juntas.

-Compañeras. -Saludó Ángelo sentándose al lado de Dylan en el salón de clases.

-Hola. - Saludé confundida.

-¿puedo acompañarlas hoy? -Preguntó él.

-¿Por qué no te sentaste con Luciana? -Lo reté ansiosa porque Dylan escuchara que a él no le gustaba Lucy. Ángelo hizo una expresión extraña mientras abría su mochila.

Deseos de Cristal (#3 Saga Cristal)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora