Abrí la puerta y mi cara no era definitivamente para alguien que traía pizza o mis amigas.—¿Albert?— joder ¿cómo es posible? Es decir, solo Liam, las niñas y yo sabemos de este escondite.
—Le pedí a Liam que me dijera tu paradero ya que en casa dicen que estas en casa de Jenny— dijo él, parece que hizo la tarea en estos días.
—Vaya, parece que te volviste Sherlock Holmes— levanté una ceja y reí entre dientes.
A decir verdad él es la última persona a la que quiero ver hoy pero le debo esta visita a mi queridísimo Liam.
—Jajaja la verdad es que no me costó mucho porque es que nuestro mejor amigo siempre sabe donde estamos—musitó y aquello me dio tanta rabia que pudiera haberle tirado un zapato en ese momento, pero luego recordé que no traía.
—En fin... ¿qué es lo que quieres?— dije cortante.
—Quiero verte, amarte, recordarte lo lindo que es tenernos— dijo mientras se acercaba a mi boca, genial lo que faltaba—Add eres todo para mí aunque te demuestre lo contrario.
¿Pero qué es esto?
Es enfermizo como lo dice, me da miedo esta situación, sus manos se van aferrando a mi cintura y el escalofrío me recorre por el cuerpo...
—Para Albert— ordené tratando de apartarme de él lo más rápido que pude—las cosas no son tan así, tú desapareces y apareces cuando te da la gana, esto no funciona así— me da besos por el cuello y no entiendo porqué esto me gusta tanto que se me mojan los pantalones.
Es tu novio Add.
—Ambos sabemos que no quieres que esto pare— tiene razón y me odio por esto pero, ¿por qué estoy tan preocupada? Total, es mi novio y el otro debe estar revolcándose con su novia igual, ¡¡¡Que siga el juego!!!
—Game Over, Albert— le dije levantando una ceja triunfante, cayó en mis redes y salir de aquí no es tan fácil.
Le comencé a besar los labios mientras que me empujaba dentro, la puerta la cerró con un pie mientras sus manos jugaban con mis nalgas. Me cargó para llevarme al sofá y quitarme el pijama que traía, yo le quité su camiseta sin dejar de besarle. Sus labios bajaron por mi cuello y sus manos hacían juegos con mis laterales, el cosquilleo me excitaba mucho más. Sacó un condón de su bolsillo y lo puso cerca para más luego.
Me giró boca abajo en el mueble bajándome las bragas con la boca, me dió una fugaz nalgada suficiente como para que me mojara aún más. Me llenó de besos toda la espina dorsal de abajo hacia arriba haciendo que me retorciera de placer, había olvidado que mi novio era un Dios del sexo.
Miniature.
La voz de Liam llega en estos momentos sacándome del trance placentero. Mi cuerpo se tensa por completo, no logro concentrarme. Albert sigue dejando pequeños besos húmedos por mi tronco hasta que vuelve a mis labios.
Te quise siempre.
De un impulso aparto a mi novio— ¡No!
La mirada de desconcierto en su rostro me hizo volver a la realidad. Noté que estaba temblando y en un manojo de nervios.
¿Qué me estaba pasando?
—¿Add pasa algo?— su voz me hizo saltar. No entiendo por qué me siento tremendamente fatal.
—Dame mi espacio— tragué en seco alejándome de él.
Tomé mi ropa y me vestí lo más rápido que pude, levanté la mirada hacia Albert y sé que espera una respuesta a lo que acaba de pasar pero realmente no tengo nada que decir, todo en mi cabeza me da vueltas. Quiero decir tantas cosas que solo se atoran en mi garganta cuando intento hacerla salir.
—Sé que esperas a que diga algo.
—No pasa nada, a veces entiendo que las cosas no pueden ser de la forma en la que planeamos— me dedicó una sonrisa de boca cerrada y besó mi frente para luego tomar su ropa del suelo.
Pues esperé a que terminara de vestirse y lo empujé hacia la salida lo más rápido que pude, no quiero que mis niñas malinterpreten esto, a fin de cuentas dijimos que nada de chicos y acabo de violar la primera regla.
—Pero... ¿qué haces?— me preguntó extrañado, trata de detenerme.
—Te saco fuera, si las chicas te ven me cortan la garganta, literalmente— le dije rápido y mirando a ambos lados del vecindario para ver si estaban cerca.
—Ah... ya entiendo- dijo como cayendo en la cuenta— Girls Day.
—Exacto nene— musité.
—Pero vine a pedirte perdón y aún no lo he hecho— murmuró parándose frente a mí haciendo que me detuviera.
—Te perdono ¿ya?— solté seca un poco concluyente, le di un fugaz beso en los labios y le empujé hacia la calle entrando y cerrando la puerta prácticamente en su cara.
Joder que nochecita, no me creo lo que acabo de hacer, pero igual tengo que guardar las apariencias con mi novio porque nunca hemos terminado formalmente sino que hemos tenido crisis últimamente como todas las parejas. Aún así se ha tomado todas las molestias en buscarme por la ciudad mientras yo estaba pasando un excelente día con mis amigas y encima le detengo cuando estamos en un momento íntimo, en verdad me ama.
Lo que hago con Liam solo pido que sea un calentón de adolescentes porque es con Albert con quien quiero realmente pasar mi vida: es un chico maduro, excelente en la Universidad, inteligente, responsable y sobre todo me ama a pesar de las adversidades; eso no lo tiene cualquiera y tampoco nadie pasa por tantas crisis. No olvidaré nunca lo que siento por Liam pero ya es hora de que piense en asentarme con uno solo.
¿Por qué te mientes?
Últimamente ya no sé ni que pensar, estaba tan preocupada hace unos meses porque mi mejor amigo no notara lo mucho que me gustaba que ahora solo me preocupo porque mi novio no lo note.
¿Por qué siempre vienes a mi mente Liam?
Porque es todo lo que habita en ella las horas del día.
11:00 pm:
Las chicas llegaron unos minutos después de que Albert se fuera, el chico de las pizzas llegó hace unos minutos. Ahora estamos sentadas en el sofá viendo una de las mejores películas del mundo: "Mercenarias". En la parte en que Cassandra Clay salva a la chica huérfana es la más increíble. Nos reímos fantaseando con ser como ellas y tener unas vidas increíbles, eso hacemos desde que nos conocimos aparte de contarnos los morbos y las fantasías sexuales que nos pasan por la cabeza.A pesar de las cosas no pude pensar una mejor manera de terminar el día.
Albert:
Sé que ella y él comenzaron a jugar sucio ya, pero no imagino lo que le haya hecho como para que ahora no quiera ni que la toque.
—¿Estás bien?— me preguntó masajeando mis hombros tensos.
— Es que aún no lo entiendo— me pasé la mano por el cabello.
—Tranquilo, sabes que pronto acabaremos con eso— la tranquilidad en su voz me asustaba.
Me giré frente a ella para encontrar sus ojos azules bien penetrantes. Si yo tenía algo de maldad fue sembrado por ella y "aquella noche" supo como enseñarme a abrir los ojos. Tengo que recuperar a Adria de alguna forma.
—Aún no entiendo como lo harás, cada día parece más enamorada de él— la pequeña sonrisa en sus labios se esfumó por unos segundos para luego engrandecerla.
—Ya veras querido...
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N/A: Hola chicos. 🙋🏻♀️Vaya capítulo.
Espero que estén disfrutando de esto.
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ADDED
Teen Fiction¿Por qué él? Porque la vida no es justa... ¿Por qué duele? Porque si no es amor entonces no duele. ¿Lo amo? No lo sé, pregúntale a tu cerebro y a tu corazón porqué deciden trabajar juntos cuando lo ven. Tengo miedo. Es natural cuando tienes alg...