Flowershop

1.5K 97 8
                                    

[↓]

𝑷𝒆𝒐𝒑𝒍𝒆 𝒂𝒓𝒆 𝒍𝒊𝒌𝒆 𝒕𝒉𝒆 𝒎𝒐𝒐𝒏 𝒇𝒍𝒐𝒘𝒆𝒓, 𝒚𝒐𝒖 𝒕𝒓𝒚 𝒔𝒐 𝒉𝒂𝒓𝒅 𝒕𝒐 𝒎𝒂𝒌𝒆 𝒊𝒕 𝒃𝒍𝒐𝒐𝒎, 𝒕𝒐 𝒈𝒊𝒗𝒆 𝒚𝒐𝒖 𝒇𝒓𝒖𝒊𝒕 𝒂𝒏𝒅 𝒊𝒏 𝒕𝒉𝒆 𝒆𝒏𝒅 ... 𝑶𝒏𝒍𝒚 𝒃𝒍𝒐𝒐𝒎 𝒕𝒘𝒊𝒄𝒆 𝒂 𝒚𝒆𝒂𝒓, 𝒐𝒏𝒄𝒆 𝒆𝒗𝒆𝒓𝒚 𝒔𝒊𝒙 𝒎𝒐𝒏𝒕𝒉𝒔.

/

People are like the moon flower, you try so hard to make it bloom, to give you fruit and in the end... Only bloom twice a year, once every six months.

[•••]

Moon flowers, una floristería muy famosa en el centro de Los Santos ubicada justo al frente de una avenida principal en la que frecuentaba muchísima gente. ¿Su dueño? Su dueño era un amor de persona, era el ser más amable y servicial del mundo que te podías imaginar: Viktor Volkov. El chico tenía 19 años cuando decidió iniciar con la floristería en la ciudad, las flores siempre han sido algo que le apasione ya que, sentía que todo el tiempo y esfuerzo que le dedicabas al final tenía un resultado productivo, podías ver como cada maldito segundo de tu tiempo valía oro al ver florecer a una orquídea, unas peonías o unas hermosas gardenias y, además de eso cada una tenía un significado maravilloso que servían para expresar tus sentimientos hacia otra persona sin necesidad de decirlo.

Un viernes por la noche, Volkov se encontraba en su floristería, estaba a punto de terminar su turno ya que, por supuesto tenía empleados en ella aunque la mayoría del tiempo le agradaba permanecer ahí, le otorgaba la calma que necesitaban sus demonios. Tomó las macetas con las flores que estaban fuera del local y las adentró en el mismo, había que decir las cosas como son y es que, la gente en la ciudad era tan rata que él aseguraba que si dejaba las flores afuera, algún desquiciado pasaría a robarlas así que, prefería curarse en salud y dejarlas adentro aunque costara un poco más de tiempo el hecho de hacerlo. Justo cuando iba por la penúltima maceta, un joven de facciones masculinas remarcadas, barba de unos tres días aproximadamente, un cuerpo que cualquier hombre en el mundo deseara tener y un cabello negro como la noche que empezaba a hacerse más oscura y profunda.

—Buenas ¿Aún está en servicio?— Preguntó el joven que era unos diez o quince centímetros menos que él. Volkov en ese entonces dudó que responder, su turno había acabado ya y la floristería estaba prácticamente cerrada pero, su personalidad amable no le dejaba decirle al joven que ya había cerrado el negocio así que, dejó la maceta en la superficie de una vitrina de cristal y se giró para ver los ojos del chico, le parecía una falta de respeto evadir el contacto con una persona y él lo que menos era irrespetuoso. 

—Pues... Si le soy sincero ya me encontraba cerrando la floristería pero, no se preocupe ¿qué desea?— Le habló con su tono de voz suave y cálido mientras esperaba la respuesta del contrario. Se cruzó de brazos y se sentó encima de su escritorio, estaba agotado. Eso era lo malo de su oficio, tenía que permanecer parado la mayor parte del día y eso lo cansaba bastante, sus pies dolían un poco así que procedió a hacer movimiento circulares con ellos al igual que lo hizo con sus muñecas en un acto de auto relajación.

—Verá, lo que pasa es que mi trabajo ocupa la mayor parte de mi tiempo y no he podido prestarle la atención que se merece a mi novia...— Se tomó un tiempo pensando en sus siguientes palabras y dio una rápida ojeada observando las plantas con poco detalle. —¿Sabe si hay unas flores que expresen... arrepentimiento o algo por el estilo? Yo la verdad es que no se mucho del tema y, por lo que he escuchado en la ciudad usted es uno de los mejores ¿jardineros? no se como coño se dice.— Se puso a analizar al chico que lo estaba atendiendo, rostro serio, cabello platinado peinado hacia un lado, su voz sonaba amable y calmada pero, su fisico era algo completamente distinto a lo que aparentaba su voz, era alguien que tenía un cuerpo bien tonificado, abdomen marcado por lo que dejaba ver su uniforme, sus brazos se marcaban al estar cruzados y haciéndose fricción entre ellos.

Volkway - OneShots.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora