Volkway - OneShots.

Melody - VW XMAS WEEK #2.

Como siempre, recordar que esta inspiración viene de la poderosísima Volkway XmasWeek que hizo @ryanfeelsorange en twitter, les dejo acá la imagen para que no se pierdan con los días y sepan más o menos lo que se viene.

Víspera de navidad, canciones alegres, movidas y navideñas, esenciales para pasar una buena y emocionante navidad pero, Conway y Volkov preferían pasarlo a su manera. Ya habían decorado el amplio departamento que compartían los dos hace un año exactamente, para ser específicos, el tres de diciembre del año pasado. Aún faltaban veintiocho días para que el año terminara pero, en estos momentos ellos se sentían las personas más felices del mundo, agradecían al universo el haberlos puesto en el camino del otro, el haberlos juntado y permitido que pasaran acompañados todas las aventuras que habían vividos entre los dos.

Hoy sería un día muy importante puesto que, los dos después de cinco años largos de noviazgo se habían animado a adoptar a un pequeño niño de ojos miel que por lo que habían averiguado sobre este, sus padres lo habían dejado abandonado en una casa de un barrio bastante humilde debido al exceso de gastos que presentaba mantener a un niño y suponían que al verse afectados por el estrés de los costos prefirieron huir y dejar a un chico de tan solo un año abandonado en el interior de una casa que de milagro no se caía en pedazos. La visita al orfanato era constante desde hace tres meses, tres meses en los que los dos mayores se enamoraron de ese pequeño chico de ahora seis años que cada vez que iban los recibia a ambos con una sonrisa en su rostro y un fuerte abrazo a la pierna de Conway a quién le decía papi y a Viktor le llamaba papá.

—¿Estás listo, cariño?— Le preguntó Viktor a Jack, tomandolo fuerte de su mano y apretando está para inspirarle confianza a su novio. —Claro que si rusky idiota, vamos por Kenai, anda.— Lo miro y sonrió con grandeza, por fin había recuperado lo que hace años atrás perdió y había de admitir que amaba demasiado a su ruso estúpido que media dos metros y lo hacía ver como un puto enano de los cojones pero, Conway no era bajito, para nada, solamente media 1.73 PERO, no era bajito.

Los dos se subieron al deportivo negro que pertenecía al extranjero y arrancaron emocionados, nerviosos y con un corazón latiendo a mil por segundo en dirección a dónde se encontraba el futuro Kenai Volkov Conway y si, los dos eran conscientes de que esa combinación de apellidos no quedaba muy bien pero, que se le iba a hacer. Además, el bravucón que se burlara de su hijo se las vería con el superintendente y el ex-superintendente de la ciudad ¿Qué era más intimidante que eso? Nada, absolutamente nada.

—Volkov... ¿Y si no soy buen padre? ¿Y si no me quiere?— Viktor entrelazó su mano con la del mayor y beso sus labios aprovechando la parada que les había brindado el semáforo, acarició la mejilla derecha de su amado y le sonrió para tranquilizarlo. —Детка, ese niño te adora, te recibe con un abrazo en una de tus piernas siempre que entras, reparte besos por todo tu rostro y te mira como jamás ha mirado a nadie. Ese chico da su vida por ti e incluso te llama papi ¿Qué más quieres, eh Jackie? Tranquilizate y piensa que todo saldrá bien, el permiso de adopción ya lo tenemos, solo vamos a ir a por nuestro hijo y lo llenaremos de muchísimo amor cuando lo tengamos en nuestros brazos.— Siguió conduciendo por la oscura carretera -ya que era una sorpresa para el niño que ellos dos serían oficialmente sus nuevos padres- entraron a la habitación del más bajo y Jack acarició los cabellos negros del dormido chiquillo.