A pasado tiempo desde la batalla contra Hades y Athena tendrá que enfrentarse contra un viejo enemigo que ha esperado por mucho tiempo la caída de la diosa.
¿Será que un viejo recuerdo quiere contar su historia para poder escapar de su soledad y su...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Habían pasado a penas 15 minutos después de que Camus se había ido a la reunión quedándose sola en el templo Eunice. Mientras preparaba sus cosas de aseo pensaba en lo que había estado pasando con el guardián del onceavo templo, incluso a ella misma... Camus cada día amanecía cada vez mas demacrado y agotado, tenia arañazos y golpes hechos por quien sabe que durante la noche y eso la asustaba al pensar que parecía no poder ayudarlo; Por un momento pensó que quizás todo lo que se decía sobre el Santuario era cierto, tal vez si habían fantasmas merodeando, pero la pregunta era ¿Acaso Athena y el Patriarca no se habían dado cuenta? Y si lo habían hecho ¿Por qué no habían hecho nada?
Era cierto que Saori tenía un cosmos increíblemente fuerte, capaz de generar poderosas barreras de protección sobre el Santuario, entonces... ¿Acaso no había sentido las energías diferentes a las de los sirvientes del Santuario?... Eunice tenia muchas dudas en su mente y no seria correcto culpar a alguien y mucho menos a Athena o el Patriarca que tan amablemente le habían permitido quedarse con Camus.
Cansada de llenar su cabeza con teorías e hipótesis absurdas decidido ponerse a sus deberes y darle una buena aseada al templo de Acuario por el persistente aroma desagradable que parecía flotar en el ambiente dentro de este; estaba limpiando el piso con aromatizante floral cuando al mover el mueble junto a la cama de Camus un montón de gusanos blancos cayeron de detrás de este, Eunice los miro impresionada y desconcertada, al observarlos bien noto que no eran como los otros animales que vivieran en esas tierras, eran blancos y más bien parecían pequeños granos de arroz que se movían intentando huir y esconderse nuevamente, rápidamente la chica los limpio y busco la fuente de aquellos sin encontrar nada; la madera del mueble estaba intacta así como la pared, no había humedad ni otra cosa que pudiese haberlos originado... Eunice se extrañó aún mas ¿De dónde habían salido aquellos animales?
Siguió limpiando, encontrando unos pocos mas en el mueble del otro lado de la cama, pero de igual forma sin fuente de alguna. Termino de sacudir y limpiar el piso sin encontrar nada más, de hecho, ni polvo ni tierra salieron del piso... tal y como lo sabía, Camus era una persona muy pulcra en el aspecto de la limpieza y su propio físico, nada de eso parecía tener sentido.
*************************
Justo en ese momento Saori entraba a la cámara Patriarcal dirigiéndose a los presentes:
-Muchas gracias por asistir a la reunión mis Caballeros, la razón por la que los he citado es para informarles que me ausentare del Santuario por algunos días –
- ¿Saldrá del Santuario? –pregunto Aioros
Justo en ese momento un incómodo escalofrió recorrió la espina dorsal de Camus, haciéndolo sentir extraño e incómodo con la sensación, mientras los vellos de sus brazos se erizaron como presintiendo algo que no comprendía.
*************************
- ¡Listo! – dijo Eunice mientras se sacudía las manos, satisfecha por haber terminado de limpiar la habitación de Camus y observando complacida su trabajo.
