La maldición de Nunca Jamas.

7. Aurora.

En Nunca Jamás era muy común todo el drama familiar al ser maldecidos por una bruja, desde el día en que Cenicienta redujo a toda su familia a cenizas se liberaron los malos sentimientos con una fuerza mayor de la normal. Accidentes, suicidios, embrujos y desapariciones han acechado en la tierra donde el amor y la paz se esparcían, ahora una nube negra está por encima de la cabeza de todos los habitantes.

El día en que una Aurora Boreal ilumino el cielo todos creían que sería el fin de todos los mal infortunados incidentes pero pronto se descubriría que este fenómeno solo avisaba que se preparan para lo peor.

La ciudad de Crowell estaba de fiesta, celebraban el aniversario de matrimonio de los reyes de Crowell y en honor a ellos se celebraría un gran banquete donde todos estarían invitados, la princesa Aura se probaba cientos de vestidos al igual que su madre, Audrey la vanidad de ambas mujeres era insuperable pero que se podía esperar si todos sus súbditos o dejaban de recalcar el hecho de poseer a la princesa y la reina más hermosa.

El rey por otra parte era más humilde y no se dejaba guiar por la vanidad de su esposa e hija. El gobernante de Crowell, Roger era conocido por ser caritativo y pacífico, el que todos los habitantes de su reinado fuesen invitados al castillo no era extraño, aún más en fechas festivas.

Al dar inicio al banquete, el cielo se ilumino con una aurora boreal haciendo que todos dirigieran sus miradas asombradas hacia el fenómeno que pintaba el cielo con hermosos colores. Cuando desapareció todos quedaron maravillados con el hermoso espectáculo de colores que habían visto, algunos respiraron aliviados tomando la aurora como una señal de buen augurio para romper con la cadena de infortunios que estaban sobre Nunca Jamas desde hace un tiempo. Más animados de lo normal todos ingresaron al gran comedor del castillo, vaporosos vestidos de diversos colores fueron vistos, la decoración ostentosa fue alabada y manos fueron besadas.

Para el momento en que la comida fue servida, las puertas principales del castillo fueron abiertas con fuerte estrepito. Todos saltaron en sus lugares incluidos los reyes sentados a la cabecilla de la mesa principal.

Un humo verde se esparció por el piso mientras una hermosa mujer vestida completamente de negro entraba al gran comedor.

"Lamento llegar tarde" Dijo con un susurro que se expandió por todo el lugar.

Los guardias estaban alerta por la preciosa mujer con aspecto letal

"Un pajarito me ha contado sobre el gran banquete organizado de esta noche, me ha entristecido no recibir una invitación pero supongo que se habrá perdido entre el mar de invitaciones repartidas."

Camino hasta acercarse al rey y se inclinó ante él. "Disculpe mi grosería, mi rey. No me he presentado, Maléfica es mi nombre y soy la guardiana del bosque."

Aura y Audrey estaban severamente ofendidas al ser ignoradas por la distinguida mujer frente a ellas, pero lo que más les hacía mal era la belleza de Maléfica. "Vine hasta aquí porque mis bosques están siendo invadidos por sus hombres, no me molesta que visiten los bosque, al contrario, mi señor. Sus hombres están acabando con mi bosque, vine hasta aquí con la esperanza de que cesen con sus acciones."

"Mi padre no hará tal cosa. En ese lugar es donde se construirá mi castillo. Sera mejor que se vaya, usted aquí no es bienvenida"

La mujer sonrió mientras se acercaba a Aura y moviendo sus manos habló.

"Tu lengua ha dictado tu sentencia. Tu vanidad y poca humildad la han sellado. El bosque es un lugar sagrado y por ti está siendo destruido. Yo, Malefica te condeno a ti Aura Crowell a cerrar tus ojos y dormir hasta que tu vanidad duerma contigo y tu humildad despierte. Hasta entonces has de dormir." Finalizo para luego con su delicada mano cerrarle los ojos. Todos los presentes quedaron impactados por lo sucedido, la princesa había sido hechizada delante de sus ojos. El rey, preocupado por la situación intervino a favor de su hija.

"Por favor, mi señora. No condene a mi hija por mis decisiones, toda actividad dispuesta al bosque cesara de inmediato. Permita despertar a mi hija, le aseguro que no volveremos a ofenderla de ninguna manera."

Maléfica le observo a los ojos y viendo verdad en el cambio su maleficio.

"Has de despertar cuando la próxima Aurora boreal ilumine el cielo, si para ese momento tu vanidad ha disminuido despertaras y ninguno de ustedes recordara este acontecimiento. Si para la próxima Aurora nada en ti ha cambiado dormirás por siempre y contigo, condenaras a tu pueblo a dormitar conmigo." Con esas palabras Maléfica desapareció dejando en el castillo a una princesa dormida.

El bosque floreció y se esparció con más brillo que antes, con el paso del tiempo una Aurora volvió a iluminar el cielo y esa noche toda Crowell se sumió en un profundo sueño.