Capítulo 12. La familia de Levi

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Hange era una persona muy curiosa y llena de energía, eso es lo que la había impulsado a pedirle a Levi tratarse, quería conocerlo mucho más, su pasado y el porqué de sus actitudes, ella aseguraba que solo era eso, pero como saberlo...

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Levi estaba en su habitación vistiéndose para ir a clases, mientras se frotaba el cabello con una toalla no pudo evitar pensar en la "estúpida cuatro ojos" una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios, aunque no entendía que había sucedido era inútil negarlo, se había enamorado, sin embargo, para alguien con esa reputación era difícil, que alguien confiara en sus sentimientos era complicado y él se lo había ganado a pulso. Le era nuevo expresar sentimientos, no sabía cómo hacerlo pero ella era la primera chica que lo hacía sentir así y valía la pena intentarlo.

Después de vestirse salió del dormitorio para ir a sus clases como todos los demás, o eso planeaba hasta que recibió una llamada.

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Entre clases había pequeñas oportunidades para descansar e ir a comer, Hange y sus compañeros estaban en la cafetería revisando algunos apuntes mientras comían.

-¿Qué te salió aquí?-preguntaba Nifa refiriéndose a un ejercicio.

-Esto ¿a ti?-respondió Moblit.

-Algo diferente ¿Keiji?-

-Espera aun no hago eso, estoy resolviendo otra cosa.-

-¿Qué te dio a ti Hange?-

No hubo respuesta alguna.

-¿Hange?...-

-¡¿HANGE?!-

La castaña se sobresaltó por el grito de su compañera.

-¿Por qué gritas?-

-Te estoy hablando y parece que estuvieras en otro lugar.-

-Lo siento ¿qué paso?-

-Pues te estaba preguntando sobre los ejercicios.-

-Ah, aquí están.-

-Hmm creo que estoy equivocada.-

Al mirar de nuevo a su amiga noto que esta volvió a perderse en sus pensamientos ¿Qué la tenía así?

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El día transcurrió como siempre, ir de aquí para allá, pero para Hange algo diferenciaba a ese día de otros, Levi ¿dónde estaba? No lo había visto ni siquiera cuando Erwin fue a recordarle sobre el partido al que la había invitado hace días. Era extraño que decidió ir a buscar a Erwin para preguntarle.

El rubio se encontraba en el gimnasio conversando con el entrenador sobre algunas jugadas que quería poner a prueba. Entonces la castaña entro.

-Hola Erwin.-

Volteo al escuchar su nombre y como siempre recibió a su amiga con una gran sonrisa.

-Hola Hange ¿Qué te trae por aquí?-

-Quería preguntarte algo.-

-Claro.-Erwin se despidió del entrenador y salió junto a Hange.-¿Qué pasa?-

-Pues quería saber ¿has visto al enano?-

-¿Levi? Ahora que lo mencionas, no.-

Hange frunció el ceño extrañada.

𝓛𝓪 𝓪𝓶𝓲𝓰𝓪 𝓭𝓮 𝓔𝓻𝔀𝓲𝓷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora