Capítulo 15

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― Vaya, estás a punto de superar al maestro.― Azael dice realmente anonadado

― No bromees.―digo nerviosa― Me falta muchísimo para tan siquiera ser tan buena como tú.

― Lo digo en serio, Daiana. Lo estás haciendo muy bien.― hace una pausa― Me consta que das todo lo mejor de ti en cada práctica. Dejas toda una huella, en cada melodía.― Le' Brun termina de hablar con su voz ronca

― Bueno, es que tengo al mejor maestro.― le digo mientras le choco su hombro

― Gracias por el cumplido.― responde el chico de mirada color miel

Azael Le' Brun guarda silencio y siento que una tormenta toma paso por su cabeza.

― ¿Qué sucede?― susurro estudiándolo con atención

― En una semana comienza las aplicaciones para la universidad. No dejo de pensar en ello, Daiana.― musita

Era poco decir que ya estábamos en la recta final. Solo quedaban unas cuantas semanas para graduarnos y luego de unos meses entrar a la universidad.

― ¿Ya aplicaste para las universidades de Australia?― le inquiero

― Algo así.― Azael Le' Brun me observa― Solo he aplicado a una universidad. He dejado toda mi esperanza en que me acepten allí.

Me sorprende lo que acabo de escuchar. Todos los profesores nos han aconsejado que apliquemos a más de una universidad por si sucede algo no esperado a último minuto. Ellos decían que debíamos tener más de una opción y que nos sintiéramos con el poder de escoger nosotros mismos a donde pertenecer y no ser uno de los que esperan a ser elegido.

Yo tampoco había enviado solicitud a otra universidad que no fuera a Manhattan School of Music, Nueva York, pero se que me escogerían ya que ya había adelantado créditos universitarios en mi internado que terminé hace unos meses.

― Tranquilo, te aceptaran. No podrán resistirse a tu talento.― hablo confiada

Confiaba en Azael, estaba muy segura que podría entrar a cualquier universidad que él eligiera.

― ¿Qué te parece si hoy en vez de continuar con la clase de piano, mejor nos distraemos?― me pregunta inesperadamente

Azael Le' Brun guía el rumbo de la conversación a una propuesta inesperada, pero fascinante.

― ¿Cómo así?― digo un poco confusa ante su repentina propuesta

Pensé por un momento que no sería buena idea ya que estaba en una etapa crucial con el tiempo. Debía mejorar aún mi lado musical con el piano, pero pensé en que Azael necesitaba relajarse y distraerse un poco. No debía negarme a tal propuesta y mayor aún si en ella involucraba a Azael Le' Brun.

― Tengo una idea, vamos. ― Azael toma mi mano y sale corriendo arrastrándome por los pasillos del Colegio Adams.

Ya en el estacionamiento del colegio quedan unos cuantos autos todavía. La camioneta  de Azael está justo al final del estacionamiento. Era una camioneta Hyndai ix35 de color oscuro.

― ¿A dónde vamos?― pregunto divertida

Todo es tan repentino que me es inevitable hablar con una gran sonrisa en mis labios

― Ya lo verás. ― el chico de mirada color miel, me observa regalándome una sonrisa

Y esa fue su única respuesta

♪♪♪

Mientras Azael Le' Brun conduce me limito a ver la naturaleza por la ventanilla de su camioneta.

Entre sueños y melodíasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora