Capítulo 6

12 3 0
                                    

Luego de haber llegado a mí casa, había terminado algunas tareas que tenía pendientes del colegio. No me gustaba acumular tareas y deberes para ganar estrés y después estar arrepentida de ello.

Me encontraba recostada en mi cama aún con mis botas de color negro puestas tomando unos minutos de descanso. Quería relajarme un poco mientras escuchaba música. Mis oídos iban acorde a la melodía de You Say (Lauren Daigle). Justo cuando termina la canción, observo la libreta que me había regalado mi abuelo en el día de hoy.

Tomo la libreta entre mis manos con notas musicales y abro el primer cajón de mi escritorio en busca de un lápiz o algún bolígrafo.

Me recuesto nuevamente y no me doy cuenta en que momento comienzo a componer alguna letra. Solo sé que mi mano no deja de moverse a un ritmo lento dejándose llevar por mis sentimientos, por lo que he callado para mí misma en estas largas semanas.

Letra: Confieso

Confieso que hoy estoy dispuesta a revelarte lo que siento aunque sean letras en papel

Me ahogo en mis sentimientos, así que ya no hay más remedio

Hoy confieso que me gustas más que ayer

Así que voy a un paso atrás de ti

Y tú vas huyendo de mí

Te acercas, yo tiemblo

Te vas y te deseo

Yo tropiezo con tu mirada color miel

Así que voy a un paso tras de ti

Y tú vas huyendo de mí

♪♪♪

― Es raro que Charlotte aún no haya llegado.― menciona Ilana

Esperábamos a Charlotte para desayunar juntas en la cafetería del colegio.

― Es cierto.― concuerdo

Doy una ojeada a mí alrededor y logro visualizar a nuestro objetivo a algunos pasos de nosotras.

― ¡Ahí está la pelirroja!― pronuncio

― ¡Hola chicas!

Charlotte nos saluda a ambas con un beso en la mejilla y un pequeño abrazo.

― Lamento la tardanza. Creí por un segundo que no llegaría a tiempo, había mucho tráfico.― Charlotte suelta un suspiro mientras acomoda su falda

No cabe duda que mi amiga pelirroja había nacido con unas muy pronunciadas curvas en su cuerpo. Hasta podría donarnos un poco a Ilana y a mí.

― No te preocupes. Mejor ya vayámonos a la cafetería, tengo mucha hambre.― le suplico

― Si, por favor.― Ilana habla mientras recoge su mochila

― Me pregunto que habrá de desayuno. Tengo ganas de una crema de maíz.― murmura la pelirroja

Mientras tanto, Ilana y yo seguíamos escuchando lo que le gustaría devorar a Charlotte en el caminar hacia la cafetería. Me resultaba gracioso que todas hoy lleváramos un gran monstruo en nuestros estómagos.

♪♪♪

Finalmente, habíamos llegado a la cafetería y ya nos disponíamos en hacer la fila para tomar nuestro desayuno.

No me sorprendía ver a tanta gente en la cafetería del colegio, la comida era muy buena. Dudo que alguien pudiera quejarse tan siquiera.

Luego de que teníamos nuestro desayuno sobre las grandes bandejas de color rojo, paso mi mirada por todo el salón de la cafetería para buscar alguna mesa disponible.

Entre sueños y melodíasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora