El Hielo de mi Vida

Capítulo 11: Tú eres lo que tengo

POV'S Elsa

Nuestros padres estaban muertos...muertos, sentía que el aire se agotaba y un gran dolor crecía en mi pecho. todos los momentos con ellos llegaron a mi mente y no me había dado cuenta que estaba en el suelo junto a Anna hasta que ella comenzó a hablar.

—¿Por qué ellos, Elsa?—me dijo y sus lágrimas corrían por sus mejillas—¿Por qué? Nunca debieron salir

—Todo es mi culpa, si les hubiera insistido en que se quedaran no estarían muertos

—No fue tu culpa—dijo levantando mi rostro y limpiándome las lágrimas

—Anna, no puedo soportarlo

—Puedes, Elsa, tú eres mi hermana mayor y sé que podrás, siempre puedes

—Anna, que vamos a hacer, no puedo vivir sin ellos

—Elsa, por favor, no...— dijo, pero no pudo terminar la frase, era doloroso para ambas hablar de eso—Eres todo lo que me queda, no me dejes—me dio un fuerte abrazo y ambas seguimos llorando

Seguimos llorando toda la noche, hasta que nuestros ojos no tenían lágrimas que derramar. Ignoramos todas las llamadas, las que no fueron pocas porque aún seguían tratando de comunicarse con nosotros las personas que nos informaron del accidente de nuestros padres, más tarde hablaríamos con ellos, este no era el momento.

Nos vestimos y después de un rato nos fuimos a sentar juntas al sofá, Anna se acostó en mis piernas mientras yo acariciaba su cabeza, no hablábamos, no podíamos, pero estábamos conscientes de que no habría forma de dormir u olvidar lo sucedido. Mi teléfono sonaba, esta vez era Jack, le quería contestar, pero no tenía la fuerza para levantar mi brazo y presionar el botón, además qué le diría, no puedo hablar en este momento.

POV'S Jack

Hace un rato que llamaba a Elsa y no me contestaba, quizás dejó su teléfono en silencio y no escuchaba mi llamada... había algo que me preocupaba, faltaba todavía para salir, pero necesitaba hablar con ella.

—¿Por qué Emma aún no se levanta?—le dije a mi madre cuando entré a la cocina en donde ella se encontraba

—Emma amaneció enferma, no irá hoy a clases

—¿Por qué a ella la dejas faltar y a mí no?

—Porque está enferma de verdad y a ti te dejaría faltar si de verdad puedo comprobar que estas enfermo o algo—dijo y continuó— Cuando pequeño siempre decías que te dolía algo para no ir a estudiar y siempre metías

—Mamá era un niño ¿a qué niño le gusta ir al colegio?

—A Emma

—Cambio la pregunta—dije para reformular lo dicho—¿A qué niño normal le gusta ir al colegio?—mi mamá se molestó más y no respondió mi pregunta porque no sabía la respuesta

— Jack, sigue con tus cosas porque irás igual

Después de intentar muchas, pero muchas veces llamar a Elsa, me rendí y llamé a Kristoff porque de seguro tiene el número de Anna y podrá decirme algo

—Hola Kris— le dije

—Hola Jack

—Puedes llamar a Anna, he intentado comunicarme con Elsa para llevarla a clases, pero no contesta

—Ok, la llamo y después hablamos

Esperé y esperé a que me devolviera la llamada, pero nada, entonces decidí ir a su casa. Mientras manejaba mi celular sonó, pero no podía contestar, vi en la pantalla que era Kristoff. Cuando llegué a la casa de las chicas le devolví la llamada